PARENTESIS DE UN SUEÑO

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PROSA POETICA. PARÉNTESIS DE UN SUEÑO-



La vida, el mar, las uvas, las rosas.
Paréntesis de un sueño………



Cruzo arenas amarillas, en playas que semejan al color de tu pelo, y esta tarde, pisando recuerdos, te observé entre espumas de tus olas, miré tus ojos pardos y aspiré desde las orillas, olores a salitre junto a tu vida entera. Venías tan erguida, adentro de una cascada; ya que somos marítimos, nacidos en el mar. Sobre blanca catedral ,muy llena de peces rojos, construída piedra sobre piedra, en argamasas de sal, llena de gaviotas, flotando en un floio, con Anaximandros, escuchando una serenata de Haendel,música llena de gotas de agua, que se transforma en graznidos y gaviotas, cuando muere la tarde. Las caracolas brillan con ruídos de olas en sus oídos sordos, de tú ola surge una mano, mano de poetisa y la beso con el azul de mares llenos,

fué beso y poema,

y de ése mar nació nuestro amor, con una cantata, una flauta dulce, con Purcell se llenó de notas la tarde, llena de mares y arrullos; entre esas notas despertó mi sueño impregnado de yodo y salitre, a meditar alegre a orillas del Pacífico, en mi playa de Reñaca llenos con tus mensajes, dulzura, amor de mar. Y los violines de esa serenata, me abren un paréntesis, y trato de recordar, olvidar, para mirar la vida de hoy, muy feliz nuevamente.


Y han pasado años, el reloj no se detiene. Y a veces me siento sólo. Estamos lejos, lo sé, muy lejos pero muy cerca unidos por el mar. .Tu respiras la sal, la misma que respiro, oigo el ruido de las olas, el mismo que oyes allá, mientras miras las nubes arriba en el cielo, acá las toco con mis iris. Cierro los ojos y estiro mis manos y siento tus dedos tocando los míos; es un sueño, lo sé; todo es un sueño, la vida es un sueño fugaz, feroz, hermoso, como las olas del mar, duermen y despiertan, llenas de peces, hay racimos de uvas verdes, hay rosas rojas casi negras, nuestro amor.


Tantas veces he despertado, sobre mis acantilados de Dover, y he encontrado esa mirada misteriosa, plena en metáforas, imágenes surrealistas, adentro del Bolero de Ravel, o encima de una ola, o en un beso en Time Square….


Camino entre topacios y amatistas, sangran mis pies….me duele mi rosa roja. y se vuelve cada vez más negra.


Volveré sobre mis pasos, y de nuevo seré piedra, porque de ellas nació el mar. Que misteriosa eres con el fondo de tu océano, sinónimo de amor, para los dos. A veces pienso al no tenerte a mi lado, que eres esa gaviota que revolotea arriba y me llama con su canto y me dan ganas de volar, y ser Salvador gaviota para amarte. Y desde allí miremos la eternidad, encerradps en el paréntesis. En tardes de insomnio, mirando el mar, cuando el sol se va dormir en él, pienso en lo tanto que sueño, si todo lo que escribo,camino, pinto, sea un sueño. Miro ese cielo rojo, encendido, donde cae el horizonte, y veo a la Poesía donde la luz se hace palabra.
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Pasan enfrente mío, torrentes de versos, letras, melancolías, gritos de alegría. Me desbordo y dejo de ser yo y me convierto en estrofas y más estrofas. Pasan las horas, el sol ha caído y se escucha a Haydn sumergiéndose en el agua desapareciendo en la noche con un toque de violines ahogándose en el mar..
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Tantas cosas que he vivido en los viajes, en esa vida de años, en que luchábamos por sobrevivir, en el que cuando me mirabas no me mirabas a mi, mirabas esa espada de Damocles, y te preguntabas hasta cuando viviremos. Yo te miraba de reojos, y me decía, quisiera ser el primero en irme, porque no podría vivir sin ti. Y me confesastes una vez que tu pensabas lo mismo. Entonces te dije, vámonos juntos, hagamos el viaje juntos, y te lo repetí esa noche, la última en abrazarnos, y tu me dijistes, quèdate, tienes muchas cosas que hacer todavía. Escribe nuestra novela de viajes, arregla el monologo de una enferma de cáncer, termina las poesias inconclusas y ámame como siempre me has amado. Y que soledad sentí cuando partistes sin mí. Cuan solo me quedé. Fue el único viaje que no me agradó desde el comienzo, en que tomastes sola el avión de regreso a la eternidad. Solo ida. Y sentí esa despedida como no te imaginas, hasta hoy la recuerdo, y a pesar de todo, sigo caminando y trato de subirme nuevamente, a nuestros acantilados de Dover. Y desde allí mirar la eternidad. Y busco nuevamente nuestro paréntesis. Tiene la forma del arcoiris.

Ernesto, pr Dios, me qued muda, muda de ternura, de amor, de admiración, muda de todo. Tenía razón ella, sigue escribiendo, escribiendole, hasta que puedan volver a estar juntos...allá en la eternidad.
Yo también he hech vts con mi esposo pr hacer ese viaje juntos...

Un abrazo grande, con mi corazón y mi alama hacia tu playa.

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ANTONIETTA, gracias querida amiga, tu conoces al amor como yo, por eso te agradezco más tus palabras. Abrazos ernesto