Aires de Libertad

¿Quieres reaccionar a este mensaje? Regístrate en el foro con unos pocos clics o inicia sesión para continuar.

https://www.airesdelibertad.com

Leer, responder, comentar, asegura la integridad del espacio que compartes, gracias por elegirnos y participar

Estadísticas

Nuestros miembros han publicado un total de 1055995 mensajes en 48078 argumentos.

Tenemos 1580 miembros registrados

El último usuario registrado es Anneinpaintland

¿Quién está en línea?

En total hay 457 usuarios en línea: 1 Registrado, 0 Ocultos y 456 Invitados :: 3 Motores de búsqueda

Maria Lua


El record de usuarios en línea fue de 1156 durante el Mar 05 Dic 2023, 16:39

Últimos temas

» Jardines de La Tamarita (Barcelona)
JOSÉ HIERRO (1922-2002) - Página 3 EmptyHoy a las 21:05 por Maria Lua

» LA POESIA MÍSTICA DEL SUFISMO. LA CONFERENCIA DE LOS PÁJAROS.
JOSÉ HIERRO (1922-2002) - Página 3 EmptyHoy a las 13:30 por Maria Lua

» Fabricio Carpinejar (1972-
JOSÉ HIERRO (1922-2002) - Página 3 EmptyHoy a las 13:24 por Maria Lua

» ALICE RUIZ (1946-
JOSÉ HIERRO (1922-2002) - Página 3 EmptyHoy a las 13:22 por Maria Lua

» Luís Vaz de Camões (c.1524-1580)
JOSÉ HIERRO (1922-2002) - Página 3 EmptyHoy a las 13:18 por Maria Lua

» LA POESÍA PORTUGUESA - LA LITERATURA PORTUGUESA
JOSÉ HIERRO (1922-2002) - Página 3 EmptyHoy a las 13:16 por Maria Lua

»  FERNANDO PESSOA II (13/ 06/1888- 30/11/1935) )
JOSÉ HIERRO (1922-2002) - Página 3 EmptyHoy a las 13:15 por Maria Lua

» FRANCESCO PETRARCA (1304-1374)
JOSÉ HIERRO (1922-2002) - Página 3 EmptyHoy a las 13:09 por Maria Lua

» Rabindranath Tagore (1861-1941)
JOSÉ HIERRO (1922-2002) - Página 3 EmptyHoy a las 13:03 por Maria Lua

» Khalil Gibran (1883-1931)
JOSÉ HIERRO (1922-2002) - Página 3 EmptyHoy a las 13:00 por Maria Lua

Septiembre 2024

LunMarMiérJueVieSábDom
      1
2345678
9101112131415
16171819202122
23242526272829
30      

Calendario Calendario

Conectarse

Recuperar mi contraseña

Galería


JOSÉ HIERRO (1922-2002) - Página 3 Empty

+4
Carmen Parra
Adriana Pardo (Luia)
Maria Lua
Pascual Lopez Sanchez
8 participantes

    JOSÉ HIERRO (1922-2002)

    Pedro Casas Serra
    Pedro Casas Serra
    Grupo Metáfora
    Grupo Metáfora


    Cantidad de envíos : 46090
    Fecha de inscripción : 24/06/2009
    Edad : 76
    Localización : Barcelona

    JOSÉ HIERRO (1922-2002) - Página 3 Empty Re: JOSÉ HIERRO (1922-2002)

    Mensaje por Pedro Casas Serra Lun 29 Feb 2016, 08:07

    .


    De Cuaderno de Nueva York, 1998:


    BALLENAS EN LONG ISLAND

    I

    Las he visto varadas en la playa.
    Los niños han abandonado
    carruseles, montañas rusas,
    nubes de azúcar, blanca o rosa, palomitas de maíz
    y suspendidos de sus cometas de colores
    han llegado a la orilla. Atrás quedó
    la música crispada de los altavoces.
    Ahora escuchan otra música más sosegada y misteriosa:
    jadeo de olas, disnea de cetáceos agonizantes,
    chillidos de las aves marinas,
    estremecedoras polifonías.

    Los niños, desconectados de lo fabuloso,
    saben que es imposible que a Jonás
    se lo tragase una ballena,
    como cuenta la Santa Biblia,
    porque al final de la caverna amenazadora
    una garganta angosta permite sólo el paso
    de minúsculos pececillos, plancton, polen marino
    que atravesaron las barbas filtradoras.
    (Ignoran, sin embargo, que estas barbas
    fueron antaño utilizadas
    para acentuar la delgadez del talle de las damas.
    ¡Sólo Dios sabe qué habrá sido de ellas,
    dónde estarán ahora pudriéndose!)

    II

    Son, desde luego, extraños pero no infrecuentes
    estos suicidios colectivos.
    Los biólogos, oceanógrafos, ecologistas
    nada pueden hacer por reintegrar a los cetáceos
    a su habitat, a su medio natural;
    no sólo por su peso y su volumen, sino
    porque están decididas -resignadas-
    a morir. (Se barajan hipótesis
    diferentes y contradictorias; alguna,
    tal vez, resolverá el enigma).
    Hay quienes atribuyen el suceso
    a una avería, una desconexión
    -por el momento indemostrable-
    en el sofisticado sistema de radar
    que utilizan en sus desplazamientos.
    ¡Quién sabe cuál será la causa
    de esta agonía a la que yo asistí
    en las arenas de Long Island!

    III

    Yo sí lo sé. Yo he descifrado
    el, para los demás, indescifrable código,
    -¡oh mi piedra Rosetta de estrellas y de olas!-
    Los ballenatos, los jóvenes, los útiles,
    los que regresan a la mar
    tras culminar estas expediciones
    hablaban en sus asambleas nocturnas,
    mientras dormían las ballenas madres,
    de la necesidad imperiosa de liberarse de este lastre
    de ancianas jubiladas,
    de toneladas de disnea y sordera.
    Con fuegos o aguas de artificio,
    pirotecnia, acuatecnia,
    comunicaron su resolución:
    “Nosotros os conduciremos
    a unas playas calientes,
    a unos lugares a los que no llegan
    tempestades, témpanos, balleneros;
    allí disfrutaréis del merecido descanso
    después de tantas aventuras,
    tantos afanes, tantos riesgos.”
    Las dejaron varadas en la arena.
    “Hasta mañana”, les dijeron,
    sabiendo que no volverían.
    “Hasta mañana”.

    IV

    Misericordioso e implacable
    el sol les reseca la piel repujada de algas.
    Muy pronto albatros y gaviotas se ensañarán
    con estas moles de agonía,
    de grasa y carne putrefacta.
    El sol es chupado por el horizonte,
    se hunde poco a poco en él
    despidiéndose con su rayo verde.
    Luego es la noche, y otras noches.
    El faro inermitentemente
    pasa su lengua de luz piadosa sobre la arena.
    El mar agita sus espejos negros.
    Sobre la seda o terciopelo funeral
    chisporrotean las estrellas fugaces,
    las ascuas de la luna de azafrán.
    El zumbido de las abejas marinas,
    el crugido del oleaje que clava sus colmillos
    en las rocas de azabache y cristal
    resuena en los oídos agonizantes
    de las viejas ballenas,
    festín de la desolación, el silencio, el olvido, la sombra.

    V

    “Hasta mañana.” Fue el último mensaje.
    Y ya no habrá mañana.
    Ahora las moribundas,
    ciegas y sordas tienen la mirada del recuerdo
    puesta en sus ballenatos, indefensos
    frente al testuz terrible de las olas heladas,
    los témpanos, las hélices, los arpones,
    desvalidos, sin rumbo
    por esos mares de Dios.

    José Hierro


    (continuará)


    .


    _________________
    [Tienes que estar registrado y conectado para ver este vínculo]
    Pedro Casas Serra
    Pedro Casas Serra
    Grupo Metáfora
    Grupo Metáfora


    Cantidad de envíos : 46090
    Fecha de inscripción : 24/06/2009
    Edad : 76
    Localización : Barcelona

    JOSÉ HIERRO (1922-2002) - Página 3 Empty Re: JOSÉ HIERRO (1922-2002)

    Mensaje por Pedro Casas Serra Mar 01 Mar 2016, 05:49

    .



    De Cuaderno de Nueva York, 1998:


    ALMA MAHLER HOTEL

    Vago por los pasillos de este hotel
    construido en los años veinte
    (cuando los gansters, la prohibición,
    cuando Al Capone, emperador de Chicago).
    Recorro los pasillos fantasmales de un hotel
    que ya no existe, o que no existe todavía
    porque están erigiéndolo delante de mis ojos,
    piso a piso, día a día,
    a lo largo del mes de abril de 1991:
    es una proa que navega hacia Times Square,
    en donde encallará.
    No estuve aquí, no estaré aquí
    para ver su culminación en la planta 40,
    revestido por la cota de malla nocturna
    -lluvia frenética de estrellas
    de luciérnagas rojas, verdes, amarillas, azules,
    que proclaman el triunfo de las tecnologías
    made in Japan, in Germany, in U.S.A.

    Este hotel (y si he dicho otra cosa,
    ahora me desdigo) fue construido en 1870.
    ¿Habrá quien pueda asegurarme
    que no es sólo una pesadilla
    que va a desvanecerse al despertar?

    Me detengo -no puedo continuar-
    ante la puerta de la habitación 312.
    Soy un viajero que ha llegado
    de otro nivel del tiempo
    pero no sé si pasado o futuro
    (ya no estoy seguto de nada).
    Puede que aún no haya llegado,
    que no haya estado aquí jamás,
    que ni siquiera exista yo,
    o que no sea real mi sufrimiento.

    “Alma, mi amor” le grito susurrando,
    le susurro, gritando, ante la puerta,
    los brazos extendidos,
    en la mano la espada flamígera,
    para que no traspongan el umbral
    del paraíso recobrado en esta habitación;
    para que no me hieran.
    “Alma, mi amor, no entres”.
    No quiero que suceda lo que ya sucedió,
    lo que va a suceder.
    No me ven ni me oyen.
    Penetran a través de mí: soy humo
    o ellos son humo.
    Oigo sonar la transparencia helada
    de las copas; pronuncian
    palabras que no querría escuchar,
    confundidos sus cuerpos en el éxtasis.
    “Alma, mi amor, siempre me herirás”.
    Me abro las venas, me desangro,
    como el afluente en el río caudal,
    por el torrente de mi música.
    Ella restañará la herida,
    contendrá, piadosa, la hemorragia.
    “Alma, mi amor”, y nadie escucha mis palabras.

    Este hotel fue derruido
    en 1870, en 1920, en 1991.
    O acaso nunca haya existido.

    José Hierro


    (continuará)


    .


    _________________
    [Tienes que estar registrado y conectado para ver este vínculo]
    Pedro Casas Serra
    Pedro Casas Serra
    Grupo Metáfora
    Grupo Metáfora


    Cantidad de envíos : 46090
    Fecha de inscripción : 24/06/2009
    Edad : 76
    Localización : Barcelona

    JOSÉ HIERRO (1922-2002) - Página 3 Empty Re: JOSÉ HIERRO (1922-2002)

    Mensaje por Pedro Casas Serra Miér 02 Mar 2016, 15:43

    .


    De Cuaderno de Nueva York, 1998:


    EZRA POUND

    ACOTACIÓN PRIMERA

    Desconectado de su lugar y de su tiempo,
    extravagante americano nacido en Gran Bretaña,
    a contratiempo, a contraluz, a contralugar.
    Todo, hasta su lengua materna,
    le vino estrecho. Por eso recurría
    al griego clásico, al latín,
    al provenzal antiguo, al italiano del Dante, al chino.
    En Spoleto salmodiaba
    con susurro ancianísimo, en italiano,
    -una sutil manera de venganza-
    algunos de sus Cantos Pisanos,
    escritos en inglés, como es sabido.
    Esto ocurría años después
    de su exaltación del fascismo
    -Inglaterra mi natura, Italia mi ventura
    USA mi sepultura-.
    Porque fue en USA donde estuvo
    al borde de la ejecución
    -gas, horca, silla eléctrica, inyección letal
    o cualquier otra forma de exterminio
    civilizada y piadosa.
    Antes había sido la jaula, la vergüenza,
    la befa, el improperio. Finalmente,
    el psiquiátrico.

    MONÓLOGO

    Mis cantos definitivos. Los de la plenitud y el miedo. Tengo miedo. Tengo -soy, estoy- jaula. Las palabras más eficaces las de mi lengua y las ajenas, vivas y muertas, oxidadas y aún hermosas, mágicas como el chino, de llave inencontrable, como el bengalí. Miedo, jaula, escribo. Miro a cada instante la puerta cerrada. Podría entrar por ella el doctor, el coronel, el judío, el sayón, el comunista con su escalpelo, su espada, su estrella, su látigo, su hoz. Traen la jaula en la mano, para encerrarme, y en ella permaneceré hasta el fin de mis días.  Sin papel, sin pluma mi mano. Así, ¿cómo sobrevivir, escribir, liberarme del tiempo? Traen el dolor: nada me importa. Del dolor irresistible nacen estos últimos cantos. Los más intensos que jamás pude soñar. Alguien -no sé quién- los entenderá. Tal vez. T.S. Eliot los corrija y depure como yo corregí los suyos pimeros. La jaula.  Pero dentro. Fuera de ella escribo los últimos cantos que arranqué a la vida. No podría escribirlos en mi memoria, como con un dedo, sobre el vidrio empañado por el frío de afuera. Necesito verlos, no sólo recordarlos. Tenerlos presentes ante mis ojos, no como náufragos, pecios sobre la arena. Mis salvadores.

    Sangro palabras por mis venas ancianas, me desangro sobre el papel. Mi sangre irá a algún banco de sangre y alguien, un día, la solicitará para sobrevivir. Tengo sangre, miedo, jaula. Tengo Dorothy, Shirley, Caroline, o como se llame esta mujer, estas mujeres de verde y blanco almidonado. Me recorta la barba, arregla el embozo de mi cama, me anima a comer -con voces desafinadas, como si me creyese tonto o sordo- estas comidas repugnantes que saben a clínico, a puritanos, a América, me inyectan y me hacen tragar píldoras de muchos colores. A Mae, o Dorothy, o Carmen, o como se llame le entrego cada tarde mis cantos, mis papeles, cantos rodados y redondeados por el sufrimiento. El doctor lo permite. Sabe que escribir es una excelente terapia para los locos. Ella es mi cómplice. Guarda mis cantos. Se los entrego, numerados, plegados, ordenados, después de besarlos en son de despedida provisional. Beso la mano de ella, de ellas. Pongo en mis labios el dedo índice, recomendándole silencio y secreto. Sólo ellas deben verlos. No quiero que los utilicen como pruebas contra mí. Autoinculpaciones subconscientes del arrepentido o el obstinado, traidor, fascista, colaboracionista, hijo de puta. Quiero que nadie ponga su mirada en estas úlceras. El pus le saltaría a los ojos. Yo no soy traidor a mi única patria que es la poesía. No quiero su comprensión, su compasión ni su desprecio. Más miedo, más jaula, más muerte. No sé si sueño cuando doy a Doris, Gladys, a Miss Figura almidonada, oficiosa figura de cera, mis testimonios, mi testamento. Vuelvo a besar su mano, agradecido como un perro. Le recuerdo que estos pájaros de papel volarán algún día, se posarán en manos amigas. Me salvarán. No quiero sombra, hielo vacío. Buenas noches, Helen, Margaret, Anne, o como te llames.

    Y cuando abre la puerta, y me saluda desde el umbral de esta habitación sin ventanas, sin espejo -¿cómo será mi rostro?- sin nada que me permita suicidarme, oigo el rumor del río que no me dejan ver, el East River, el East Tiber que me trae palomas de Roma.

    ACOTACIÓN FINAL

    Dorothy -ese es su nombre- ha cerrado la puerta.
    Lleva en su mano la bandeja
    con los restos de la comida.
    Acto seguido, como hace
    todos los días,
    arroja al incinerador
    vasos y platos de cartón, cubiertos de plástico.
    Finalmente, como todos los días,
    los papeles que escribe el loco
    de la habitación 109.

    JOSÉ HIERRO


    (continuará)


    .


    _________________
    [Tienes que estar registrado y conectado para ver este vínculo]
    Pedro Casas Serra
    Pedro Casas Serra
    Grupo Metáfora
    Grupo Metáfora


    Cantidad de envíos : 46090
    Fecha de inscripción : 24/06/2009
    Edad : 76
    Localización : Barcelona

    JOSÉ HIERRO (1922-2002) - Página 3 Empty Re: JOSÉ HIERRO (1922-2002)

    Mensaje por Pedro Casas Serra Jue 03 Mar 2016, 05:35

    .


    De Cuaderno de Nueva York, 1998:


    ORACIÓN EN COLUMBIA UNIVERSITY

    Bendito sea Dios, porque inventó el silencio,
    y el chirrido de la chicharra,
    y el lagarto de fastuoso traje verde,
    y la brasa hipnotizadora
    (horizontal crepúsculo pudo haberla llamado
    don Pedro Calderón de la Barca en el declive del Barroco).
    Bendito sea Dios que inventó el agua,
    el agua sobre todo.

    Bendito sea Dios porque inventó el amanecer
    y el balido que lo poblaba.
    Ahora vuelvo a escuchar aquella melodía.
    El arroyo arpegiaba sobre cantos rodados,
    hacía el contrapunto.
    Suena el concierto en mi memoria.
    O puede que se trate
    de una música diferente:
    la que escuchó, primero, entre los arrayanes de Granada
    Federico García Lorca,
    y luego aquí, rescatada,
    en Columbia University.

    Bendito sea Dios que inventó los prodigios
    que contaba mi padre
    perfumado de espliego y de tomillo.
    Eran historias de ciudades mágicas
    en las que el agua circulaba
    por venas de metal, agua caliente y fría
    (nos lo contaba al borde del regato,
    helado en el invierno, seco en estío:
    “Venga, a lavarse, coño, guarros”.
    Y obedecíamos).

    Bendito sea Dios porque inventó la cabra
    -la cabra que rifaba por los pueblos-
    mucho antes que Pablo Picasso,
    con barriga de cesto de mimbre
    y tetas como guantes de bronce.
    Maldito sea Dios porque inventó el estaño
    parpadeante del olivo,
    ramas y tronco de Laoconte,
    y aquella sombra trágica de catafalco y oro:
    un rayo congelado en la mano siniestra
    y en la diestra un crepúsculo.
    Maldito sea Dios porque inventó a mi padre
    colgado de una rama del olivo
    poco después de recogerse la aceituna.
    No puedo perdonárselo.

    Pero eso fue más tarde.
    Antes fueron los niños.
    Bendito sea Dios que inventó aquellos niños,
    vestidos como príncipes o pájaros.
    Con voces de cristal, “Papá”, decían a su padre.
    Bendito sea Dios por inventar una palabra
    milagrosa, jamás oída,
    y su padre correspondía
    con vaharada de ternura.

    Maldito sea Dios, porque yo quise
    arrezagarme en la ternura
    pronunciando la palabra mágica
    entonces descubierta. “¿Papá?” “Mariconadas,
    si te la vuevo a oír te llevas una hostia”.

    Bendito sea Dios porque inventó los años,
    1970, 1980, 1990...,
    inventó el fuego, el oro viejo
    de los arces de otoño,
    y estos ríos profundos como penas,
    largos como el olvido o el recuerdo,
    hospitalarios, generosos,
    por los que la ciudad va navegando
    hasta la mar, que es el morir.

    Bendito sea Dios que inventó libros sabios.
    Se daba nombre en ellos
    a lo que antes no lo tenía.
    Bendito sea Dios porque inventó licenciaturas
    masters, campus con risas y con marihuana,
    laboratorios y celebraciones
    con cantos en latín, gaudeamus igitur,
    todo situado en niveles distintos del tiempo.

    Bendito sea Dios que inventó la memoria
    y que inventó el silencio de este lugar aséptico,
    y las venas metálicas ocultas
    en las que el agua espera
    unas manos liberadoras que le devuelvan su canción.
    Ahora sé que mi padre está vengado.
    Mi padre, descolgado del olivo
    pronuncia con mis labios las palabras totémicas,
    y se estremece este recinto sagrado.
    “Coño, joder, carajo, a lavarse la cara, hostia”.
    Y abro los grifos, lavabos, duchas, retretes,
    se desbordan las aguas que el soñaba
    en la choza de adobe y paja,
    cantan la gloria de la recuperación,
    y mi padre navega por las aguas,
    le provoco, gritándole desconsolado.
    “¡Papá!”. “Mariconadas”, me contesta.
    “¡Papá!”. Marico... glu, glu,
    ahogado, recuperado,
    navegante por los canales de oro,
    vivo ya para siempre.

    JOSE HIERRO

    (continuará)


    .


    _________________
    [Tienes que estar registrado y conectado para ver este vínculo]
    Pedro Casas Serra
    Pedro Casas Serra
    Grupo Metáfora
    Grupo Metáfora


    Cantidad de envíos : 46090
    Fecha de inscripción : 24/06/2009
    Edad : 76
    Localización : Barcelona

    JOSÉ HIERRO (1922-2002) - Página 3 Empty Re: JOSÉ HIERRO (1922-2002)

    Mensaje por Pedro Casas Serra Vie 04 Mar 2016, 06:16

    .


    De Cuaderno de Nueva York, 1998:


    VIDA

    A Paula Romero

    Después de todo, todo ha sido nada,
    a pesar de que un día lo fue todo.
    Después de nada, o después de todo
    supe que todo no era más que nada.

    Grito “¡Todo!”, y el eco dice ¡“Nada!”.
    Grito “¡Nada!”, y el eco dice ¡”Todo!”.
    Ahora sé que la nada lo era todo,
    y todo era ceniza de la nada.

    No queda nada de lo que fue nada.
    (Era ilusión lo que creía todo
    y que, en definitiva, era la nada.)

    Qué más da que la nada fuera nada
    si más nada será, después de todo,
    después de tanto todo para nada.

    JOSÉ HIERRO


    .


    _________________
    [Tienes que estar registrado y conectado para ver este vínculo]
    Pascual Lopez Sanchez
    Pascual Lopez Sanchez
    Administrador-Moderador
    Administrador-Moderador


    Cantidad de envíos : 89513
    Fecha de inscripción : 29/06/2009
    Edad : 72
    Localización : Murcia / Muchas veces en Mazarrón/ Algunas en Cieza ( amo la ciudad donde nací; amo su río - Río Segura_ y amo sus montes secos llenos de espartizales)

    JOSÉ HIERRO (1922-2002) - Página 3 Empty Re: JOSÉ HIERRO (1922-2002)

    Mensaje por Pascual Lopez Sanchez Lun 17 Oct 2022, 00:56

    EL BUEN MOMENTO QUE FLOTA

    Aquel momento que flota
    nos toca con su misterio.
    Tendremos siempre el presente
    roto por aqiel momento

    Toca la vida sus palmas
    y tañe sus instrumentos.
    Acaso encienda su música 
    sólo para que olvidemos

    Pero hay cosas que no mueren
    y otras que nunca vivieron
    Y las hay que llenan todo
    nuestro universo

    Y no es posible libarse 
    de su recuerdo.


    Última edición por Pascual Lopez Sanchez el Jue 20 Oct 2022, 03:58, editado 1 vez


    _________________
    "No hay  cañones que maten la esperanza."  Walter Faila


    GRANDES ESCRITORES ES DE TODOS LOS FORISTAS. PARTICIPA, POR FAVOR.


     ISRAEL: ¡GENOCIDA!
    Pascual Lopez Sanchez
    Pascual Lopez Sanchez
    Administrador-Moderador
    Administrador-Moderador


    Cantidad de envíos : 89513
    Fecha de inscripción : 29/06/2009
    Edad : 72
    Localización : Murcia / Muchas veces en Mazarrón/ Algunas en Cieza ( amo la ciudad donde nací; amo su río - Río Segura_ y amo sus montes secos llenos de espartizales)

    JOSÉ HIERRO (1922-2002) - Página 3 Empty Re: JOSÉ HIERRO (1922-2002)

    Mensaje por Pascual Lopez Sanchez Jue 20 Oct 2022, 03:55

    ALUCINACIÓN SUBMARINA

          Tal vez os cueste comprenderlo. Yo mismo,
    en este mármol verde de oleaje glacial,
    no lo comprendo bien del todo.
    Quizá nadie jamás reciba este mensaje.
    O, cuando lo reciba, no sepa interpretarlo.
    Porque todo, allá arriba, habrá variado entonces
    probablemente. (Aquí seguirá todo igual.)

          Si entendieseis por qué viví…
    Si sospechaseis cómo quise ser descifrado,
    contagiar, vaciarme, a través de unas pálidas palabras
    que daba vida el son más que el sentido…
    Y cuando imaginaba que moriría, que enmudecería,
    yo trataba de herir papeles con palabras,
    poner allí palabras muertas, sin son y sin calor.
    Era lo mismo que arrojar al mar una botella.
    Quién sabe si el mensaje se perdería en alta mar,
    se estrellaría contra los peñascos,
    llegaría a una costa lejana, donde se hablaban otras lenguas…

          Aquello era en la tierra. Aquí, en el mar,
    no penséis que las cosas son distintas de aquéllas.
    No lo creáis: bien lo sabían ellos, los japoneses.
    Por eso nos hicieron esclavos hace mucho.
    Los relativamente libres, vosotros, los de arriba,
    sabéis cómo cayeron los hombres de las islas
    sobre nosotros. Cuando el mundo fue estrecho para tantos
    y fueron estrujadas las ubres de la tierra.

          La cosa fue sencilla. Todo lo puede el hombre
    con teorías, experiencias, instrumentos y números.
    Sustituyeron los pulmones por branquias, y la sangre
    por caudales helados, y la piel por escamas…
    (No es más difícil que pensar la rueda,
    que hacer saltar a voluntad la chispa,
    que apresar vida, muerte y amor en cuatro letras
    ordenadas sobre un papel…
    dar a una llave y que se acerque la música remota,
    o tantas cosas admirables
    que se miden en años luz…)

          Alguien tenía que sacrificarse.
    Después de todo, nos dejaron la vida (aunque distinta).
    El mes en que las algas se aquietan en el fondo,
    tras las resacas del otoño, después de la cosecha
    de algas, vuestro alimento, celebramos la fiesta
    hermosa de la libertad…

          La esclavitud es Sísifo. Nosotros somos útiles.
    Somos granero de la Humanidad.
    Alimentamos a los seres, espantamos su hambre.
    (Sonríen amarillos cuando visitan nuestras plantaciones.)
    Somos felices, aunque todavía
    quedamos muchos viejos (la vida es larga aquí),
    y aún recordamos, y aún sabemos
    cuándo es de noche arriba…
    (Pocos conocen el significado
    de esa luz tenue –luna, decíamos- que se abre
    en el silencio negro, prodigiosa.
    Y nos besamos cuando nos ilumina…)

          Esto es lo malo; los recuerdos.
    Los que nacimos allá arriba, recordamos.
    Algunos aún soñamos y revivimos mitos
    y fábulas. Las viejas damas, cuando llega la noche,
    suben ligeras a la superficie
    a hechizar marineros, a destrenzar para vosotros
    canciones y prodigios, mientras los jóvenes sonríen.

          Aún recordamos; es lo malo. Este mar, por ejemplo,
    pero visto desde la playa.
    Y los sonidos…los rumores…el prodigio de las nubes,
    de matices, de flores…, los aromas aquellos…
    Y, sobre todo, tanta vida nuestra
    que les dio belleza y sentido…

          A veces nos decimos si no estaremos engañados.
    <> Es posible.
    Nos lo dicen los jóvenes cuando les relatamos
    historias que no entienden…
    Todo tiempo pasado
    era la juventud, y eso sí era mejor.
    La juventud es un diamante en medio del camino.
    Hasta llegar a ella, nada miramos sino a ella.
    Cuando la rebasamos –porque el fin nos reclama
    y es imposible detenerse-,
    es ya pasado. Y nada vemos. Y sólo recordamos
    el instante, el relámpago, en qué camino y juventud coincidieron.

          Tal vez ahora nos deslumbre
    no el sol, sino el diamante bajo el sol,
    tal vez…
                Un día dije a los jóvenes: <>
    Volví con la emoción y la inquietud de los retornos,
    como una ruina que visita a un ser viviente.
    <>, dije.

          …Cómo olvidé que el sol nos abrasa los ojos,
    hecho a la luz tenue de las profundidades.
    Y nos ahogábamos –ya somos criaturas marinas.
    Cómo olvidé, cómo pude olvidar
    el trueno de la voz, el bramido, el estrépito
    del viento entre las copas de los árboles…
    Cómo olvidé que nuestro paso, nuestros movimientos
    eran mecánicos y torpes… (Aquí en el mar es todo
    deslizamiento, suavidad, armonía…)
    Sufrí cuando los vi reír entre jadeos,
    entre toses y ahogos a los jóvenes…
    Cómo pude quemar mi recuerdo, empañar
    la luz de mi diamante… Cómo no supe a tiempo
    que al volver a la superficie
    lo destruía todo y me quedaba
    sin mar, tierra, ni cielo, pobre superviviente
    de la nostalgia y de la decepción…


    _________________
    "No hay  cañones que maten la esperanza."  Walter Faila


    GRANDES ESCRITORES ES DE TODOS LOS FORISTAS. PARTICIPA, POR FAVOR.


     ISRAEL: ¡GENOCIDA!
    Pascual Lopez Sanchez
    Pascual Lopez Sanchez
    Administrador-Moderador
    Administrador-Moderador


    Cantidad de envíos : 89513
    Fecha de inscripción : 29/06/2009
    Edad : 72
    Localización : Murcia / Muchas veces en Mazarrón/ Algunas en Cieza ( amo la ciudad donde nací; amo su río - Río Segura_ y amo sus montes secos llenos de espartizales)

    JOSÉ HIERRO (1922-2002) - Página 3 Empty Re: JOSÉ HIERRO (1922-2002)

    Mensaje por Pascual Lopez Sanchez Lun 30 Ene 2023, 02:31

    Válgame, cuanto poeta esencial abandonado:

    "...

    Pero los que están vivos,
    los henchidos de acción,
    los palpitantes de nostalgia o vino,
    esos... felices, bienaventurados,
    porque no necesitan las palabras,
    como el caballo corre, aunque no sople el viento,
    y vuela la gaviota, aunque esté seco el mar,
    y el hombre llora y canta,
    proyecta y edifica, aun sin el fuego"


    Extracto de TEORÍA ( de TEORÍA Y ALUCINACIÓN DE DUBLÍN


    _________________
    "No hay  cañones que maten la esperanza."  Walter Faila


    GRANDES ESCRITORES ES DE TODOS LOS FORISTAS. PARTICIPA, POR FAVOR.


     ISRAEL: ¡GENOCIDA!
    Pedro Casas Serra
    Pedro Casas Serra
    Grupo Metáfora
    Grupo Metáfora


    Cantidad de envíos : 46090
    Fecha de inscripción : 24/06/2009
    Edad : 76
    Localización : Barcelona

    JOSÉ HIERRO (1922-2002) - Página 3 Empty Re: JOSÉ HIERRO (1922-2002)

    Mensaje por Pedro Casas Serra Vie 07 Jun 2024, 14:01

    Al fin y al cabo, cualquier sitio
    da lo mismo para morir:
    el que se aroma de romero,
    el tallado en piedra o en nieve,
    el empapado de petróleo.
    Da lo mismo que un cuerpo se haga
    piedra, petróleo, nieve, aroma.
    Lo doloroso no es morir
    acá o allá...



    Es una gozada pasear por los versos de José Hierro. Gracias, Pascual, por haberlo traído aquí.

    Un abrazo.
    Pedro


    _________________
    [Tienes que estar registrado y conectado para ver este vínculo]
    Pascual Lopez Sanchez
    Pascual Lopez Sanchez
    Administrador-Moderador
    Administrador-Moderador


    Cantidad de envíos : 89513
    Fecha de inscripción : 29/06/2009
    Edad : 72
    Localización : Murcia / Muchas veces en Mazarrón/ Algunas en Cieza ( amo la ciudad donde nací; amo su río - Río Segura_ y amo sus montes secos llenos de espartizales)

    JOSÉ HIERRO (1922-2002) - Página 3 Empty Re: JOSÉ HIERRO (1922-2002)

    Mensaje por Pascual Lopez Sanchez Sáb 08 Jun 2024, 01:18

    Lo es sin duda, Pedro. Pero yo hace tiempo que he desistido: este espacio es de MARIA LUA. y así debería llamarse. Voy a constarte todos los comentarios que has hecho.

    Pero no voy a participar de momento. En realidad AIRES DE LIBERTAD o es suyo o no es de NADIE. eN NOMBRE DE LA LIBERTAD QUE ELLA SOSTIENE. Ejemplo: MACHACARME CUANDO EXPUSE UN POEMA SOBRE Brasil, que no concordaba con sus ideas. .

    De nuevo gracias. Pero no sé cuando volveré. Me siento más agusto en SUBFORO LLUVIA ( aunque ya ha empezado a acaparlo todo


    _________________
    "No hay  cañones que maten la esperanza."  Walter Faila


    GRANDES ESCRITORES ES DE TODOS LOS FORISTAS. PARTICIPA, POR FAVOR.


     ISRAEL: ¡GENOCIDA!
    Pedro Casas Serra
    Pedro Casas Serra
    Grupo Metáfora
    Grupo Metáfora


    Cantidad de envíos : 46090
    Fecha de inscripción : 24/06/2009
    Edad : 76
    Localización : Barcelona

    JOSÉ HIERRO (1922-2002) - Página 3 Empty Re: JOSÉ HIERRO (1922-2002)

    Mensaje por Pedro Casas Serra Sáb 31 Ago 2024, 10:14

    .


    Dejo tres poemas más de José Hierro:


    De Tierra de nosotros, 1947:


    DESTINO ALEGRE

    Nos han abandonado en medio del camino
    Entre la luz íbamos ciegos.
    Somos aves de paso, nubes altas de estío,
    vagabundos eternos.
    Mala gente que pasa cantando por los campos.
    Aunque el camino es áspero y son duros los tiempos,
    cantamos con el alma. Y no hay un hombre solo
    que comprenda la viva razón del canto nuestro.

    Vivimos y morimos muertes y vidas de otros.
    Sobre nuestras espaldas pesan mucho los muertos.
    Su hondo grito nos pide que muramos un poco,
    como murieron todos ellos,
    que vivamos deprisa, quemando locamente
    la vida que ellos no vivieron.

    Ríos furiosos, ríos turbios, ríos veloces.
    (Pero nadie nos mide lo hondo, sino lo estrecho.)
    Mordemos las orillas, derribamos los puentes.
    Dicen que vamos ciegos.

    Pero vivimos. Llevan nuestras aguas la esencia
    de las muertes y vidas de vivos y de muertos.
    Ya veis si es bien alegre saber a ciencia cierta
    que hemos nacido para esto.




    De Quinta del 42, 1945:


    UNA TARDE CUALQUIERA

    Yo, José Hierro, un hombre
    como hay muchos, tendido
    esta tarde en mi cama,
    volví a soñar.

    .........................(Los niños,
    en la calle, corrían).
    Mi madre me dio el hilo
    y la aguja, diciéndome:
    «Enhébramela, hijo;
    veo poco».

    .........................Tenía
    fiebre. Pensé: —Si un grito
    me ensordeciera, un rayo
    me cegara… (Los niños
    cantaban). Lentamente
    me fue invadiendo un frío
    sentimiento, una súbita
    desgana de estar vivo.

    Yo, José Hierro, un hombre
    que se da por vencido
    sin luchar. (A la espalda
    llevaba un cesto, henchido
    de los más prodigiosos
    secretos. Y cumplido,
    el futuro, aguardándome
    como a la hoz el trigo).
    Mudo, esta tarde, oyendo
    caer la lluvia, he visto
    desvanecerse todo,
    quedar todo vacío.
    Una desgana súbita
    de vivir. («Toma, hijo,
    enhébrame la aguja»,
    dice mi madre).

    .........................Amigos:
    yo estaba muerto. Estaba
    en mi cama, tendido.
    Se está muerto aunque lata
    el corazón, amigos.

    Y se abre la ventana
    y yo, sin cuerpo (vivo
    y sin cuerpo, o difunto
    y con vida), hundido
    en el azul. (O acaso
    sea el azul, hundido
    en mi carne, en mi muerte
    llena de vida, amigos:
    materia universal,
    carne y azul sonando
    con un mismo sonido).
    Y en todo hay oro, y nada
    duele ni pesa, amigos.

    A hombros me llevan. Quién:
    la primavera, el filo
    del agua, el tiemblo verde
    de un álamo, el suspiro
    de alguien a quien yo nunca
    había visto.

    Y yo voy arrojando
    ceniza, sombra, olvido.
    Palabras polvorientas
    que entristecen lo limpio:
    ..............Funcionario,
    ..............tintero,
    ..............30 días vista,
    ..............diferencial,
    ..............racionamiento,
    ..............factura,
    ..............contribución,
    ..............garantías…

    Subo más alto. Aquí
    todo es perfecto y rítmico.
    Las escalas de plata
    llevan de los sentidos
    al silencio. El silencio
    nos torna a los sentidos.
    Ahora son las palabras
    de diamante purísimo:
                    Roca,
                    águila,
                    playa,
                    palmera,
                    manzana,
                    caminante,
                    verano,
                    hoguera,
                    cántico…

    …cántico. Yo, tendido
    en mi cama. Yo, un hombre
    como hay muchos, vencido
    esta tarde (¿esta tarde
    solamente?), he vivido
    mis sueños (esta tarde
    solamente), tendido
    en mi cama, despierto,
    con los ojos hundidos
    aún en las ascuas últimas,
    en las espumas últimas




    CANTO A ESPAÑA

    Oh España, qué vieja y qué seca te veo.
    Aún brilla tu entraña como una moneda de plata cubierta de polvo.
    Clavel encendido de sueños de fuego.
    He visto brillar tus estrellas, quebrarse tu luna en las aguas,
    andar a tus hombres descalzos, hiriendo sus pies con tus piedras ardientes.

    ¿En dónde buscar tu latido: en tus ríos
    que se llevan al mar, en sus aguas, murallas y torres de muertas ciudades?
    ¿En tus playas, con nieblas o sol, circundando de luz tu cintura?
    ¿En tus gentes errantes que pudren sus vidas por darles dulzor a tus frutos?

    Oh España, qué vieja y qué seca te veo.
    Quisiera talar con mis manos tus bosques, sembrar de ceniza tus tierras resecas,
    arrojar a una hoguera tus viejas hazañas,
    dormir con tu sueño y erguirme después, con la aurora,
    ya libre del peso que pone en mi espalda la sombra fatal de tu ruina.

    Oh España, qué vieja y qué seca te veo.
    Quisiera asistir a tu sueño completo,
    mirarte sin pena, lo mismo que a luna remota,
    hachazo de luz que no hiende los troncos ni pone la llaga en la piedra.

    Qué tristes he visto a tus hombres.
    Los veo pasar a mi lado, mamar en tu pecho la leche,
    comer de tus manos el pan, y sentarse después a soñar bajo un álamo,
    dorar con el fuego que abrasa sus vidas, tu dura corteza.
    Les pides que pongan sus almas de fiesta.
    No sabes que visten de duelo, que llevan a cuestas el peso de tu acabamiento,
    que ven impasibles llegar a la muerte tocando sus graves guitarras.

    Oh España, qué triste pareces.
    Quisiera asistir a tu muerte total, a tu sueño completo,
    saber que te hundías de pronto en las aguas, igual que un navío maldito. 

    Y sobre la noche marina, borrada tu estela,
    España, ni en ti pensarías. Ni en mí. Ya extranjero de tierras y días.
    Ya libre y feliz, como viento que no halla ni rosa, ni mar, ni molino.
    Sin memoria, ni historia, ni edad, ni recuerdos, ni pena...

    ...en vez de mirarte, oh España, clavel encendido de sueños de llama,
    cobre de dura corteza que guarda en su entraña caliente
    la vieja moneda de plata, cubierta de olvido, de polvo y cansancio...


    JOSÉ HIERRO, Poesía de la primera generación de posguerra, Cátedra, 2008.


    _________________
    [Tienes que estar registrado y conectado para ver este vínculo]

    Contenido patrocinado


    JOSÉ HIERRO (1922-2002) - Página 3 Empty Re: JOSÉ HIERRO (1922-2002)

    Mensaje por Contenido patrocinado


      Fecha y hora actual: Sáb 07 Sep 2024, 21:17