ODA AL TERREMOTO

ernesto würth escribió:
pARA EL TERREMOTO DEL 27-1-2010 ESCRIBÍ taciturna oda,
quizás angustiada y no rimbombante, porque un evento de
este tipo confieso, es de terror y más terror, sin medias tintas.
A éste sismo de ayer, en  Iquique, le dicen fascineroso, pues
esconde otro sismo inmenso, el sismo de los sismos. Y como
no hay nada que podamos hacer, esperamos con santa
paciencia, que llegue el que sigue....y líbrenos del mal.              





ODA AL TERREMOTO.




Se nos mueve el piso por tres minutos.
El ruido nos angustia
se acrecienta cada vez más,
presentimos la muerte en el aire que llora,
parecen tres horas
se caen los adornos y los cuadros
y se abandona todo en loca carrera.
Impredecible llegó y se marcha
dejando un silencio que nos azota los oídos.
Abajo nos encontramos de pronto reunidos
y la familia se mira desconcertada.
Todo ha pasado, ¿donde está Vodka (nuestra perrita)preguntamos?
es la única que falta y a la hora
aparece moviendo su cola, sus ojitos blancos.
Amanece, entre muchas réplicas, miradas,
sin luz, sin teléfonos, nada sabemos
pienso en el mar allí abajo,
ojalá no se enoje,
y en la radio del auto, sabemos apenas
que es inmenso el territorio
azotado por la furia natural.
Me siento en la fría terraza con olor a gas,
aún desvestido, pensando en mis seres queridos
arriba las estrellas en silencio
nos miran y la luna llena nos abraza
esperando llegue la mañana, la vida
y pienso, es mi séptimo terremoto,
ojalá el último, me tiembla la voz, se quiebra.
Es curioso, somos seres telúricos y oceánicos
pero no deseo pensar más,
estoy cansado, angustiado,
sólo pienso en  regar mis rosas rojas casi negras


REÑACA 2010





... en menor magnitud, querido amigo Ernesto, he pasado eso, y, en esa medida, sé qué es; ese ruido es demoledor y la impotencia terrible, inexpresable; en Chile la Gran Serpiente/Kundalini se mueve desde Asia hasta América; sus efectos exteriores son desvastadores pero la energía positiva que trae e instala en el territorio es insospechada; si de algo sirve en estas horas malas; lindo poema; Orión

Es curioso, somos seres telúricos y oceánicos
pero no deseo pensar más,
estoy cansado, angustiado,
sólo pienso en regar mis rosas rojas casi negras