769.- Ana Cuadra Hernández, Suecia
Souvenir empedrados
Es tarde en mis lunas.
Es alba en el contorno de los campos Eliseos
Siento aún el agua que besó mis pies en los Jardines de Monet
Me golpea la brisa del Sena, y un puñado de lágrimas saltan
en medio de Notre Dame.
el redondel arcoíris que viste la Tour Eiffel...
te busco entre los transeúntes pasajeros
nadie se atreve a hablar de ti
sigo cabalgando con el ánima de tu silueta.
Unos que otros sonríen con sarcasmos,
ante mi miedo
de observar desde la cima del coloso destellante,
iluminado en la sombra de la noche.
Poeta… pido perdón a tus dolores, tantas fueron tus heridas
¡quiero clonarme en ti!
“a mi pecho que acabe, al que bien, que venga,
Y quiero desgraciarme;
descúbrome la frente impersonal hasta tocar
el vaso de sangre”
Es tarde ya, la noche comienza en contrapuntos Víctor Hugo
Y Los Miserables posan ante mis ojos taciturnos
“Qué hacer dónde ponerme; corro, escribo aplaudo
lloro, atisbo, destrozo, apagan…”
Son y fueron tuyos estos versos,
que nacieron en medio de cadáver
en la cuna del catolicismo,
Dios salvó al Rey y a Federico ni la Casada Infiel
La garúa vino de prisa yo… pensando siempre en ti,
quiero tomar un boleto
en el Winnipeg a la tierra de arauco,
Neruda no tiene tiempo para mi inquietud
me envía los versos más tristes esa noche…
Camino, camino, busco a Georgette
soy su espía en mi vuelo a la cúspide
de las tres Marías y un lucero
tiende su mano me lleva en danza medieval entre difuntos
en mis piernas procrea la tierra un tsunami en haz de luz
quiero llegar pronto al derrotero
que ella me susurra al oído,
enciendo un cirio vuelan mis pesares
hay espinas en mi garganta…
ahí estoy frente a “una piedra negra sobre una piedra blanca”
Es otoño y la garúa saluda mi tristeza
escucho nuevamente la agonía de tus versos
Me sonríe forzoso el ánima de la silueta
de César Vallejo.
Intento abrazar el aire que un día X bañó el cielo de pesares
Descubro el camino a la Torre de Eiffel…
asomo con el dedo índice de brújula extasiada
intento trepar la maravilla del mundo sin un centavo
en mi mochila deseo la noche parisina.
“abajo mi cadáver y sollozo”
tu grito despavorido,
un cuadro vale más que mil vidas humanas
obras de arte no cobraron vidas
parió la insensatez eliminando seres en la guerra
la Guerra Civil …
Ahogan mis ojos en el pantano tanta crueldad
hago una reverencia pausada “ha tenido que nevar...”
Tuvo la muerte el tiempo necesario,
vertiginoso para llamarte a su cuna.
Peinaron años ante de conocerte casi la mitad
de mis lunas violetas
fueron tantas las estrellas que alumbraron
el camino para que mi pluma temblorosa
tuviera la osadía de cantarte... pasé años ausente
una ausencia no premeditada ante tus lágrimas
hoy miro el espejo del campo santo en Monteparnasse
Descansa Vallejo…
mientras tus letras pasean entre literatos y humildes
que conquistarán las ciudades con todas sus piedras,
asiento de los humilde de la tierra.
Poeta de lo humano y premonitorio destino,
me he enamorado de tu canto
Estoy frente a tu tumba, pienso en monte grande,
en Gabriela.
No hace falta que te baje del “nicho helado”
estás en la tierra húmeda como tus ojos siempre de otoño
Tus huesos nadie podrá disputarlos...
iré sembrando ya no tu agonía perpetua
que tu existencia vivida
Iré cavando la tierra para que emerjan
siempre tus letras como el bálsamo que despierte conciencias.
talvez ahi me ponga mi traje de consuelo!!
Souvenir empedrados
Es tarde en mis lunas.
Es alba en el contorno de los campos Eliseos
Siento aún el agua que besó mis pies en los Jardines de Monet
Me golpea la brisa del Sena, y un puñado de lágrimas saltan
en medio de Notre Dame.
el redondel arcoíris que viste la Tour Eiffel...
te busco entre los transeúntes pasajeros
nadie se atreve a hablar de ti
sigo cabalgando con el ánima de tu silueta.
Unos que otros sonríen con sarcasmos,
ante mi miedo
de observar desde la cima del coloso destellante,
iluminado en la sombra de la noche.
Poeta… pido perdón a tus dolores, tantas fueron tus heridas
¡quiero clonarme en ti!
“a mi pecho que acabe, al que bien, que venga,
Y quiero desgraciarme;
descúbrome la frente impersonal hasta tocar
el vaso de sangre”
Es tarde ya, la noche comienza en contrapuntos Víctor Hugo
Y Los Miserables posan ante mis ojos taciturnos
“Qué hacer dónde ponerme; corro, escribo aplaudo
lloro, atisbo, destrozo, apagan…”
Son y fueron tuyos estos versos,
que nacieron en medio de cadáver
en la cuna del catolicismo,
Dios salvó al Rey y a Federico ni la Casada Infiel
La garúa vino de prisa yo… pensando siempre en ti,
quiero tomar un boleto
en el Winnipeg a la tierra de arauco,
Neruda no tiene tiempo para mi inquietud
me envía los versos más tristes esa noche…
Camino, camino, busco a Georgette
soy su espía en mi vuelo a la cúspide
de las tres Marías y un lucero
tiende su mano me lleva en danza medieval entre difuntos
en mis piernas procrea la tierra un tsunami en haz de luz
quiero llegar pronto al derrotero
que ella me susurra al oído,
enciendo un cirio vuelan mis pesares
hay espinas en mi garganta…
ahí estoy frente a “una piedra negra sobre una piedra blanca”
Es otoño y la garúa saluda mi tristeza
escucho nuevamente la agonía de tus versos
Me sonríe forzoso el ánima de la silueta
de César Vallejo.
Intento abrazar el aire que un día X bañó el cielo de pesares
Descubro el camino a la Torre de Eiffel…
asomo con el dedo índice de brújula extasiada
intento trepar la maravilla del mundo sin un centavo
en mi mochila deseo la noche parisina.
“abajo mi cadáver y sollozo”
tu grito despavorido,
un cuadro vale más que mil vidas humanas
obras de arte no cobraron vidas
parió la insensatez eliminando seres en la guerra
la Guerra Civil …
Ahogan mis ojos en el pantano tanta crueldad
hago una reverencia pausada “ha tenido que nevar...”
Tuvo la muerte el tiempo necesario,
vertiginoso para llamarte a su cuna.
Peinaron años ante de conocerte casi la mitad
de mis lunas violetas
fueron tantas las estrellas que alumbraron
el camino para que mi pluma temblorosa
tuviera la osadía de cantarte... pasé años ausente
una ausencia no premeditada ante tus lágrimas
hoy miro el espejo del campo santo en Monteparnasse
Descansa Vallejo…
mientras tus letras pasean entre literatos y humildes
que conquistarán las ciudades con todas sus piedras,
asiento de los humilde de la tierra.
Poeta de lo humano y premonitorio destino,
me he enamorado de tu canto
Estoy frente a tu tumba, pienso en monte grande,
en Gabriela.
No hace falta que te baje del “nicho helado”
estás en la tierra húmeda como tus ojos siempre de otoño
Tus huesos nadie podrá disputarlos...
iré sembrando ya no tu agonía perpetua
que tu existencia vivida
Iré cavando la tierra para que emerjan
siempre tus letras como el bálsamo que despierte conciencias.
talvez ahi me ponga mi traje de consuelo!!
Hoy a las 15:16 por cecilia gargantini
» LA LITERATURA BRASILEÑA
Hoy a las 15:10 por Maria Lua
» Ángel Rupérez (1953-
Hoy a las 14:54 por Pedro Casas Serra
» 2021-08-17 a 2021-11-24 APOCALIPSIS, 21: 8: MARIANO CUBÍ, FRENÓLOGO
Hoy a las 14:35 por cecilia gargantini
» Luis Antonio de Villena (1951-
Hoy a las 14:28 por Pedro Casas Serra
» Jaime Siles (1951-
Hoy a las 14:16 por Pedro Casas Serra
» Chantal Maillard (1951-
Hoy a las 14:04 por Pedro Casas Serra
» Vladimir Herrera (1950-
Hoy a las 13:48 por Pedro Casas Serra
» Olvido García Valdés (1950-
Hoy a las 13:34 por Pedro Casas Serra
» Daniel Samoilovich (1949-
Hoy a las 13:22 por Pedro Casas Serra