Amo mi miseria

Amo mi miseria


De qué te has vestido en la soledad del sueño
sino de pasajero que deshoja la vida,
que abraza las ansias del huerto;
que no llora en su vuelo y acepta
la presencia de las palabras sin canto,
sin la corriente mística
con el sonido que vive en el desierto,
en los siempre no pronunciados.

Amo la miseria
con el amor que renueva y habla,
con el terror cubierto de sabia de infinito,
que destila la tristeza diáfana;
con el fruto maduro que oprime
y escapa en los laberintos humildes
del alma que desea calladamente que germinen.

Amo:
el conjuro de la boca profética,
el pan de diamante dormido
en el mañana con águilas sin alas,
el sol abolido con zapatos en polvo vacío
y la voz libre que llora la muerte
encendida en la memoria.

El dolor que por abrazarte llora todavía
despertando en las breves raíces bajo el agua
como retratos al carbón con el adiós en abandono;
nacido de la matriz del milagro
con momentos nublados.

Las llagas de ausencias con rostro de costumbre,
con misión de impaciencia
plagado de piedras y esperas
celosas del ocaso y el sueño;
distante de las manos que alimentan las lunas en peligro.

La miseria que amortigua las ramas
que devoran,
que renueva los enjambres de las viudas esperanzas
haciendo sangrar las ventanas para que las golondrinas
se bañen en fuego y reflejen en su vuelo
el sonido y el olor de la ceniza.

Amo:
aquel beso no dado, varado
en la escena vencedora,
epiléptico momento en las ruinas
del silencio,
cráter huérfano
con el golpe de la sed abolida
por la espada de la desesperanza.

El odiado cuerpo sin agua
bajo el estéril tigre paciente
que en la montaña se embriagaba
del blanco nombre del cielo;
y, carne trenzaba en su doble filo.

La caída al sufrimiento
tomado con cuchara de aire
y saliva que endulzaba la hora
de las trampas despiertas
con miedo al destino.

A la limosna que vuelve
como mar tranquilo a la arena,
y busca las letras
escritas con piel que brilla
en llamas de combate irreparable.

Amo:
aquel beso no dado, varado
en la escena vencedora,
epiléptico momento en las ruinas
del silencio,
cráter huérfano
con el golpe de la sed abolida
por la espada de la desesperanza.

El odiado cuerpo sin agua
bajo el estéril tigre paciente
que en la montaña se embriagaba
del blanco nombre del cielo;
y, carne trenzaba en su doble filo.

La caída al sufrimiento
tomado con cuchara de aire
y saliva que endulzaba la hora
de las trampas despiertas
con miedo al destino.

A la limosna que vuelve
como mar tranquilo a la arena,
y busca las letras
escritas con piel que brilla
en llamas de combate irreparable.


RICARDO...NUESTRA ESPERA TIENE PREMIO UN POEMA REALMENTE HERMOSO,
UN POEMA ANTOLOGICO, UN ABRAZO MAESTRO, TORI.

Interesante escuchar y leer tu poema....
Ha sido un placer disfrutarlo
Un cordial saludo, Clara

Las llagas de ausencias con rostro de costumbre,
con misión de impaciencia
plagado de piedras y esperas
celosas del ocaso y el sueño;
distante de las manos que alimentan las lunas en peligro.

Maravillosas imágenes, querido
poeta Ricardo...
Bellísimo poema....
Un beso, con cariño
Maria Lua

Sin duda maravilloso mi querido paisano

Le dejo un abrazo, maestro,

Carlos Medina

Ricardo,es un placer y lujo acercarse a tu bellísima palabra.

Un beso.

UN LUJO ESCUCHARTE .. ME LLEVO TU DECLAMADO Y LO PASARÉ CON TU VOZ EN LA RADIO.. BESOS..ELEN

de esplendor y maravilla tus excelentes versos poeta... magistral alimento para los poetas...

mi abrazo austral

Ramiro

Amo:
aquel beso no dado, varado
en la escena vencedora,
epiléptico momento en las ruinas
del silencio,
cráter huérfano
con el golpe de la sed abolida
por la espada de la desesperanza.

El odiado cuerpo sin agua
bajo el estéril tigre paciente
que en la montaña se embriagaba
del blanco nombre del cielo;
y, carne trenzaba en su doble filo.

La caída al sufrimiento
tomado con cuchara de aire
y saliva que endulzaba la hora
de las trampas despiertas
con miedo al destino.

A la limosna que vuelve
como mar tranquilo a la arena,
y busca las letras
escritas con piel que brilla
en llamas de combate irreparable.


RICARDO...NUESTRA ESPERA TIENE PREMIO UN POEMA REALMENTE HERMOSO,
UN POEMA ANTOLOGICO, UN ABRAZO MAESTRO, TORI.

________________________________---


Mil gracias, querido amigo

Un abrazo fuerte

Super lujo disfrutar tu poema con todos los sentidos para profundizar en su belleza y sentimiento.

Te felicito sinceramente

Un abrazo con el cariño de siempre
Marcela

Ricardo : me he quedado sin palabras. Me ocurre cuando una obra de arte me transmuta.
Excepcional, amigo mío. Volveré a su lectura más despacio.

Interesante escuchar y leer tu poema....
Ha sido un placer disfrutarlo
Un cordial saludo, Clara.

----------------------

Mil gracias

Un abrazo fuerte

Es un privilegio, maestro, seguir tu trayectoria literaria que crece con el tiempo. Asombra que conviertas la miseria en paabras tan bien dichas.

Bien vale un abrazo fuerte.

Un Lujo leer y escuchar un hermoso poema un prebilegio disfrutar las letra de un maestro


Un Abrazo
Angel

Maravillosas imágenes, querido
poeta Ricardo...
Bellísimo poema....
Un beso, con cariño
Maria Lua
-------------------

Mil gracias, querida amiga

Un abrazo fuerte

D
e qué te has vestido en la soledad del sueño
sino de pasajero que deshoja la vida,
que abraza las ansias del huerto;
que no llora en su vuelo y acepta
la presencia de las palabras sin canto,
sin la corriente mística
con el sonido que vive en el desierto,
en los siempre no pronunciados.
...............

Amo:
el conjuro de la boca profética,
el pan de diamante dormido
en el mañana con águilas sin alas,
el sol abolido con zapatos en polvo vacío
y la voz libre que llora la muerte
encendida en la memoria.

El dolor que por abrazarte llora todavía
despertando en las breves raíces bajo el agua
como retratos al carbón con el adiós en abandono;
nacido de la matriz del milagro
con momentos nublados.
...............

A la limosna que vuelve
como mar tranquilo a la arena,
y busca las letras
escritas con piel que brilla
en llamas de combate irreparable.

Ricardo Serna G
---------------------------------

FORMIDABLE POEMA
Appreciado Poeta Ricardo Serna
que disfrutamos.
y agradecemos el lujo de poder
tener aquí su hermosa palabra escrita.

Mi gratitud y
un Gran Abrazo.

jose francisco

UN GRAN POEMA TODA UNA CATEDRA GRACIAS MAESTRO POR TANTA ENTREGA.
SALUDOS
CARLOS.

Gracias...Tarde.. pero con aprecio
a:
Mari
Elen
Ramiro
Marcela
Pascual
Álvaro -que en paz descanse-
Ángel
José
Ernesto...
Carlos
Y a la administración por su reconocimiento
en su tiempo


Un abrazo fuerte

Ricardo Serna G escribió:

Amo mi miseria


De qué te has vestido en la soledad del sueño
sino de pasajero que deshoja la vida,
que abraza las ansias del huerto;
que no llora en su vuelo y acepta
la presencia de las palabras sin canto,
sin la corriente mística
con el sonido que vive en el desierto,
en los siempre no pronunciados.

Amo la miseria
con el amor que renueva y habla,
con el terror cubierto de sabia de infinito,
que destila la tristeza diáfana;
con el fruto maduro que oprime
y escapa en los laberintos humildes
del alma que desea calladamente que germinen.

Amo:
el conjuro de la boca profética,
el pan de diamante dormido
en el mañana con águilas sin alas,
el sol abolido con zapatos en polvo vacío
y la voz libre que llora la muerte
                  encendida en la memoria.

El dolor que por abrazarte llora todavía
despertando en las breves raíces bajo el agua
como retratos al carbón con el adiós en abandono;
nacido de la matriz del milagro
con momentos nublados.

Las llagas de ausencias con rostro de costumbre,
con misión de impaciencia
plagado de piedras y esperas
celosas del ocaso y el sueño;
distante de las manos que alimentan las lunas en peligro.

La miseria que amortigua las ramas
                                    que devoran,
que renueva los enjambres de las viudas esperanzas
haciendo sangrar las ventanas para que las golondrinas
se bañen en fuego y reflejen en su vuelo
el sonido y el olor de la ceniza.

Amo:
aquel beso no dado, varado
en la escena vencedora,
epiléptico momento en las ruinas
                    del silencio,
cráter huérfano
con el golpe de la sed abolida
por la espada de la desesperanza.

El odiado cuerpo sin agua
bajo el estéril tigre paciente
que en la montaña se embriagaba
del blanco nombre del cielo;
y, carne trenzaba en su doble filo.

La caída al sufrimiento
tomado con cuchara de aire
y saliva que endulzaba la hora
de las trampas despiertas
con miedo al destino.

A la limosna que vuelve
como mar tranquilo a la arena,
y busca las letras
escritas con piel que brilla
en llamas de combate irreparable.

Bello, profundo y con merecido galardón! Felicitaciones, Ricardo!

INMENSO Maestro!!!! no sé que palabra usar... es una joya tu poema,
bendecido domingo

LILI

Ricardo Serna G escribió:

Amo mi miseria


De qué te has vestido en la soledad del sueño
sino de pasajero que deshoja la vida,
que abraza las ansias del huerto;
que no llora en su vuelo y acepta
la presencia de las palabras sin canto,
sin la corriente mística
con el sonido que vive en el desierto,
en los siempre no pronunciados.

Amo la miseria
con el amor que renueva y habla,
con el terror cubierto de sabia de infinito,
que destila la tristeza diáfana;
con el fruto maduro que oprime
y escapa en los laberintos humildes
del alma que desea calladamente que germinen.

Amo:
el conjuro de la boca profética,
el pan de diamante dormido
en el mañana con águilas sin alas,
el sol abolido con zapatos en polvo vacío
y la voz libre que llora la muerte
                  encendida en la memoria.

El dolor que por abrazarte llora todavía
despertando en las breves raíces bajo el agua
como retratos al carbón con el adiós en abandono;
nacido de la matriz del milagro
con momentos nublados.

Las llagas de ausencias con rostro de costumbre,
con misión de impaciencia
plagado de piedras y esperas
celosas del ocaso y el sueño;
distante de las manos que alimentan las lunas en peligro.

La miseria que amortigua las ramas
                                    que devoran,
que renueva los enjambres de las viudas esperanzas
haciendo sangrar las ventanas para que las golondrinas
se bañen en fuego y reflejen en su vuelo
el sonido y el olor de la ceniza.

Amo:
aquel beso no dado, varado
en la escena vencedora,
epiléptico momento en las ruinas
                    del silencio,
cráter huérfano
con el golpe de la sed abolida
por la espada de la desesperanza.

El odiado cuerpo sin agua
bajo el estéril tigre paciente
que en la montaña se embriagaba
del blanco nombre del cielo;
y, carne trenzaba en su doble filo.

La caída al sufrimiento
tomado con cuchara de aire
y saliva que endulzaba la hora
de las trampas despiertas
con miedo al destino.

A la limosna que vuelve
como mar tranquilo a la arena,
y busca las letras
escritas con piel que brilla
en llamas de combate irreparable.

Te felicito Ricardo
tu poema es "Inmenso-intenso"
creo que has acertado en subir el poema, es un buen' momento.
solo "la maestría" hace cosas tan extraordinarias,y formidables como tu poema. No toda la poesía tiene el privilegio de poder ser declamada (cantada) que pienso que es una de sus intenciones, y finalidad (otras no)
además con un ritmo contextual que me encanta en el derroche de Sensibilidad' de pensamientos, emociones,sentimientos, y recuerdos (intimista-existencialista con capacidad de recapacitación, cambio,y lucha') en metáforas y expresiones poéticas suaves (entendibles) sin rimbombancias
para mi tiene una musicalidad (que tiene su importancia en un poema, no indispensable) intrínseca que para nada le hace falta la rima
un fuerte abrazo Poeta
salud!
suerte
y se feliz
cuidate

Te agradezco, amigo, que lo subieras, ya que es una verdadera joya que se me había pasado en su momento.
Gracias por traerlo, poeta!!!!!!!!!!!!! Es un verdadero lujo!!!!!!!!!!
Cariñosssssssssss desde Buenos Aires

Merecido reconocimiento a tu bello poema, Ricardo. Enhorabuena y un fuerte abrazo amigo.

Pues acertadamente llegó la paloma en su día y acertadamente trajo este poema hoy.
¡Excelente! con buen contenido.
Gracias, poeta, ha sido un placer.
Un fuerte abrazo, Ricardo.

Amo:
aquel beso no dado, varado
en la escena vencedora,
epiléptico momento en las ruinas
del silencio,
cráter huérfano
con el golpe de la sed abolida
por la espada de la desesperanza.


Hermoso poema, Ricardo. ¡Felicidades por la palomita!. Yo diría que eres el más gongorino de todos los compañeros del foro (lo digo como un halago).

Un abrazo.
Pedro

Carlos Justino Caballero escribió:

Ricardo Serna G escribió:

Amo mi miseria


De qué te has vestido en la soledad del sueño
sino de pasajero que deshoja la vida,
que abraza las ansias del huerto;
que no llora en su vuelo y acepta
la presencia de las palabras sin canto,
sin la corriente mística
con el sonido que vive en el desierto,
en los siempre no pronunciados.

Amo la miseria
con el amor que renueva y habla,
con el terror cubierto de sabia de infinito,
que destila la tristeza diáfana;
con el fruto maduro que oprime
y escapa en los laberintos humildes
del alma que desea calladamente que germinen.

Amo:
el conjuro de la boca profética,
el pan de diamante dormido
en el mañana con águilas sin alas,
el sol abolido con zapatos en polvo vacío
y la voz libre que llora la muerte
                  encendida en la memoria.

El dolor que por abrazarte llora todavía
despertando en las breves raíces bajo el agua
como retratos al carbón con el adiós en abandono;
nacido de la matriz del milagro
con momentos nublados.

Las llagas de ausencias con rostro de costumbre,
con misión de impaciencia
plagado de piedras y esperas
celosas del ocaso y el sueño;
distante de las manos que alimentan las lunas en peligro.

La miseria que amortigua las ramas
                                    que devoran,
que renueva los enjambres de las viudas esperanzas
haciendo sangrar las ventanas para que las golondrinas
se bañen en fuego y reflejen en su vuelo
el sonido y el olor de la ceniza.

Amo:
aquel beso no dado, varado
en la escena vencedora,
epiléptico momento en las ruinas
                    del silencio,
cráter huérfano
con el golpe de la sed abolida
por la espada de la desesperanza.

El odiado cuerpo sin agua
bajo el estéril tigre paciente
que en la montaña se embriagaba
del blanco nombre del cielo;
y, carne trenzaba en su doble filo.

La caída al sufrimiento
tomado con cuchara de aire
y saliva que endulzaba la hora
de las trampas despiertas
con miedo al destino.

A la limosna que vuelve
como mar tranquilo a la arena,
y busca las letras
escritas con piel que brilla
en llamas de combate irreparable.

Bello, profundo y con merecido galardón! Felicitaciones, Ricardo!

Gracias amigo


Un abrazo fuerte

Liliana Aiello escribió:INMENSO  Maestro!!!! no sé que palabra usar... es una joya tu poema,
bendecido domingo

LILI

Gracias, amiga

por tus amables palabras


un abrazo fuerte

javier eguílaz escribió:

Ricardo Serna G escribió:

Amo mi miseria


De qué te has vestido en la soledad del sueño
sino de pasajero que deshoja la vida,
que abraza las ansias del huerto;
que no llora en su vuelo y acepta
la presencia de las palabras sin canto,
sin la corriente mística
con el sonido que vive en el desierto,
en los siempre no pronunciados.

Amo la miseria
con el amor que renueva y habla,
con el terror cubierto de sabia de infinito,
que destila la tristeza diáfana;
con el fruto maduro que oprime
y escapa en los laberintos humildes
del alma que desea calladamente que germinen.

Amo:
el conjuro de la boca profética,
el pan de diamante dormido
en el mañana con águilas sin alas,
el sol abolido con zapatos en polvo vacío
y la voz libre que llora la muerte
                  encendida en la memoria.

El dolor que por abrazarte llora todavía
despertando en las breves raíces bajo el agua
como retratos al carbón con el adiós en abandono;
nacido de la matriz del milagro
con momentos nublados.

Las llagas de ausencias con rostro de costumbre,
con misión de impaciencia
plagado de piedras y esperas
celosas del ocaso y el sueño;
distante de las manos que alimentan las lunas en peligro.

La miseria que amortigua las ramas
                                    que devoran,
que renueva los enjambres de las viudas esperanzas
haciendo sangrar las ventanas para que las golondrinas
se bañen en fuego y reflejen en su vuelo
el sonido y el olor de la ceniza.

Amo:
aquel beso no dado, varado
en la escena vencedora,
epiléptico momento en las ruinas
                    del silencio,
cráter huérfano
con el golpe de la sed abolida
por la espada de la desesperanza.

El odiado cuerpo sin agua
bajo el estéril tigre paciente
que en la montaña se embriagaba
del blanco nombre del cielo;
y, carne trenzaba en su doble filo.

La caída al sufrimiento
tomado con cuchara de aire
y saliva que endulzaba la hora
de las trampas despiertas
con miedo al destino.

A la limosna que vuelve
como mar tranquilo a la arena,
y busca las letras
escritas con piel que brilla
en llamas de combate irreparable.

Te felicito Ricardo
tu poema es "Inmenso-intenso"
creo que has acertado en subir el poema, es un buen' momento.
solo "la maestría" hace cosas tan extraordinarias,y formidables como tu poema. No toda la poesía tiene el privilegio de poder ser declamada (cantada) que pienso que es una de sus intenciones, y finalidad (otras no)
además con un ritmo contextual que me encanta en el derroche de Sensibilidad' de pensamientos, emociones,sentimientos, y recuerdos (intimista-existencialista con capacidad de recapacitación, cambio,y lucha') en metáforas y expresiones poéticas suaves (entendibles) sin rimbombancias
para mi tiene una musicalidad (que tiene su importancia en un poema, no indispensable) intrínseca que para nada le hace falta la rima
un fuerte abrazo Poeta
salud!
suerte
y se feliz
cuidate

Gracias amigo
Por tus amables palabras


un abrazo fuerte