A MIS HIJAS

A MIS HIJAS

Estas son las mejores joyas que yo poseo.
(Cornelia , 189 a.c., a una matrona de Campania)

Son reflejos del sol en la alborada,

un guiño al corazón entristecido,

caricias para un alma ilusionada.


Venero singular, oro fundido,

dos rosas sin espinas, perfumadas

que en cuidado jardín han florecido.


Mentes serenas, cumbres veteadas,

anémonas del mar de mi vivero

que destilan amor con sus miradas.


Son ojos de mujer, los que más quiero,

son el placer de un premio sus sonrisas

y en esta lotería voy primero. .


Son obras muy concretas y concisas,

dos joyas, un DESEO, un TROFEO,

dos bellas y adorables pitonisas.

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Parece que en aquellos años se reunían las familias ricas y poderosas y cada señora llevaba las joyas que su marido le había regalado o ella había comprado a lo largo del año.
Este año les tocaba reunirse en casa de Cornelia, hija de Publio Cornelio y Emilia Tercia, mujer muy culta y con gran carácter, que rechazó ser reina para cuidarse de sus hijos. Una de las matronas de Campania, región del sur de Italia le preguntó si no iba a exponer sus joyas y ella, observando que en aquel momento regresaban sus hijos del colegio, los introdujo en el comedor y los presentó a los asistentes diciendo: Éstas son las mejores joyas que yo poseo .

Los hijos, valioso tesoro querido Máximo. Se forman naciéndose dentro de uno, atrapando sus entrañas en la difícil escala de los tactos, aquellos que rozan para siempre el corazón.

Precioso poema, me encantó leerte.
Un saludo.

Muy bello homenaje a nuestras mejores joyas, los hijos.
Muy esclarecedora e interesante la explicación del final.
Cariñosssssssssssss desde Buenos Aires

¿Sabes? Tu manera es adorable.
Tus versos, también son joyas.
Gracias por la explicación, y besos.

Gracias a los hijos entendemos lo que significa
dar, amar, ser en ellos, antes que en uno mismo.

Precioso poema, Máximo.

Un abrazo

Pilar

Maximo...no hay mayor regalo que nuestro hijos...bellos y tiernos versos para ellos...

Un Abrazo
Angel

Tan sólo cabe decir, FELICIDADES y LARGA VIDA, Máximo. Mis saludos

Bello poema, Máximo, ¡felicidades!

Un abrazo.
Pedro

Alicia Moreno escribió:querido Máximo...
realmente un poema adorable...
no hay diamantes más hermosos que los ojos de nuestros hijos
se nos henchida el pecho, cuando los hijos nos miran
o nos abrazan-..
te dejo un abrazo y mi beso poeta... 

Muchas gracias Alicia por tu comentario
Un beso

Max

Pilar Molina escribió:Los hijos, valioso tesoro querido Máximo. Se forman naciéndose dentro de uno, atrapando sus entrañas en la difícil escala de los tactos, aquellos que rozan para siempre el corazón.

Precioso poema, me encantó leerte.
Un saludo.

Valioso tesoro, "las mejores joyas" sobre todo cuando se comportan como verdaderos hijos.
Un beso

Max

Alma Ragatzzi escribió:

Me gustó pasar por tus versos, Máximo.
Sin duda, nuestros mayores tesoros
son nuestros hijos,
los que somos padres lo sabemos bien.
Un abrazo.

Gracias Alma
Un beso

;áx

Pedro Casas Serra escribió:Bello poema, Máximo, ¡felicidades!

Un abrazo.
Pedro

Gracias Pedro

Un abrazo

Max

luis perez escribió:Tan sólo cabe decir, FELICIDADES y LARGA VIDA, Máximo. Mis saludos

Muchas gracias, Luis. Igual te deseo
Un abrazo

Máximo

Angel Salas escribió:Maximo...no hay mayor regalo que nuestro hijos...bellos y tiernos versos para ellos...

Un Abrazo
Angel

Muchas gracias, Angel
Un abrazo

Max

Mª del Pilar Carmona escribió:Gracias a los hijos entendemos lo que significa
dar, amar, ser en ellos, antes que en uno mismo.

Precioso poema, Máximo.

Un abrazo

Pilar

Muchas gracias Mª del PIlar
Un beso

Max

Lluvia Abril escribió:¿Sabes? Tu manera es adorable.
Tus versos, también son joyas.
Gracias por la explicación, y besos.

Tan amable como la lluvia que cae suave.
Un abrazo

Máximo

cecilia gargantini escribió:Muy bello homenaje a nuestras mejores joyas, los hijos.
Muy esclarecedora e interesante la explicación del final.
Cariñosssssssssssss desde Buenos Aires

Hola, Buenos Aires.
Muchas gracias por vuestras palabras
Un abrazo

Máx

Pilar Molina escribió:Los hijos, valioso tesoro querido Máximo. Se forman naciéndose dentro de uno, atrapando sus entrañas en la difícil escala de los tactos, aquellos que rozan para siempre el corazón.

Precioso poema, me encantó leerte.
Un saludo.

Muchas gracias por tus palabras.
Un abrazo

Máx