POESÍA SOCIAL XI (En la primera página de Poesía Social I hay un índice de autores)

PUERTO RICO

LA POESÍA DE JULIO CÉSAR LOPEZ

ESTACIONES DE LA VIGILIA
(ESCALAS DE LA SEMILLA)



PARTE I: ORFANDAD DE RAÍCES


NACIMIENTO

Escuchar el teléfono derribando
la puerta de los sueños.
Quebrar en sobresalto
las sombras del silencio,
inyectándole el sismo
de impudorosa lámpara.
Atropellar losetas
con pantuflas de espanto.
Arribar como ola encrespada
a las arenas negras del audífono
y detener allí la oreja estremecida
y que el funesto viento
capitule anunciando
que no partió la anciana moribunda
y que en las blancas aguas
llega la alondra de una niña.

PUERTO RICO

JULIO CÉSAR LÓPEZ

ESTACIONES DE LA VIGILIA
(ESCALA DE LA SEMILLA)

SONETO SOLITARIO

Quise escuchar tu amado llanto
para sentir tu peregrina vida.
En lágrima resplandeció tu herida
y te pedí que no murieras tanto.

Fue tanto lo que gimió el lucero
cuando prendió la sombra de tu llanto
que me quemó la nieve de tu encanto
en torrente de amor callado y fiero.

Me sacia aún el agua del “te quiero”
manantial del recuerdo siempre ileso
murmurando angustioso “yo te espero”

Se requedó en el tiempo entristecida
la sangre de tu palabra herida
y el lucero vibrante de aquel beso.

PUERTO RICO

JULIO CÉSAR LÓPEZ

ESTACIONES DE LA VIGILIA
(ESCALA DE LA SEMILLA)




DESTINO

Este poema nace en el cielo,
rompiendo cascarones de nubes,
instalando coronas de miradas
en ventanas fugitivas de la tarde.

Hay un cielo para cada canto.
Cada poema va padeciendo altura.
Cada palabra mide su vibración
en la pared siniestra de la vida.

Muerde cáscaras del viento con su hélice.
Desmantela los elevados nudos de la niebla.
Y cincela indefinibles lagos de la angustia
en el vientre macizo de la tarde.

El poema perfora los postreros corales:
migajas de horizontes que las alas cancelan.
Y las ruedas ocultas del poema
preparan el aterrizaje de la noche.

PUERTO RICO

JULIO CÉSAR LÓPEZ

ESTACIONES DE LA VIGILIA
(ESCALA DE LA SEMILLA)



PARTIDA

…………….La muerte demora su paso para que la
…………….patria corone en el tierno sonido de
…………….voces inocentes el rostro del padre
…………….emocionado en el último instante de
…………….su luz.

Te despediste del mundo
con la poesía y el patriotismo
en las manos y en los oídos
porque ya tus ojos no se abrían.
(Sus tambores el corazón rendía)

Voces de niños se alzaron
en tu última frontera
para cantar Preciosa
y tus manos varios días inertes
despegaron de las sábanas
lentamente en conato de aplauso
que sólo el silencio juntaba
en diez cuerdas de voces abolidas:
los finos hilanderos de tus gruesos dedos
en el telar de niebla de la vida.

(Tu memoria redescubrió las piedras
de otro tiempo sonoro de auroras:
tú ibas diciéndole al mundo
una canción de puño y de bandera,
de flor y de martillo,
de lágrima y espada.
Visión de bandas guerrilleras
para salvar la Patria
como si la arruga
nunca hubiera visitado tu piel.)

Pero ahora están las voces infantiles
cayendo sobre la blancura de tu lecho
en los costados de tu cuerpo inmóvil.
Y la sangre como un nuevo rocío
retorna tus manos como pétalos.
Y sólo despierta nuevamente
una de ellas para elevarse
con plomo hacia la frente
y allí fraguar militarmente
el saludo final
que el himno de la Patria,
ya no canción patriótica,
(La Borinqueña en los tempranos labios)
dictaba al corazón en su crepúsculo.

Después la mano quedó
sobre el pecho desnudo
en un sueño sin aire.
Fue tu despedida.

PUERTO RICO

JULIO CÉSAR LÓPEZ

ESTACIONES DE LA VIGILIA
(ESCALA DE LA SEMILLA)




UN FRUTO

A medida que voy
mordiendo el día
van chillando
los pájaros
su oscura melodía.



SOLIDARIDAD

Los ojos se fugaban
donde los otros ojos
ya no tienen miradas.

Las manos se juntaban
donde las otras manos
ya estaban desatadas.

Y eran ojos y manos
donde la luz y el viento
jamás se rechazaban.

PUERTO RICO

JULIO CÉSAR LÓPEZ

ESTACIONES DE LA VIGILIA
(ESCALA DE LA SEMILLA)



CAUTIVERIO

Sombra que flota en las esquinas
como espuma de misterioso tránsito.

Savia que agita nocturnos vientos
desflecando adoquines del recuerdo.

La muralla creciendo. Espigando la piedra.
El mar despedazando la espalda de la piedra.

Y entre la mar y el mundo
(halo salobre, corona pétrea).

Un asedio de pátina y salitre
astillando el rostro peregrino.

Oscuro círculo de vértigo
en el tránsito amargo de la vida.

PUERTO RICO

JULIO CÉSAR LÓPEZ

ESTACIONES DE LA VIGILIA
(ESCALA DE LA SEMILLA)


CELADA

Yo pongo a chocar mi tristeza
contra las copas de los árboles.
La veo caer como la fruta
que el pájaro oscuro picotea en la tarde.
Cuando le busco la semilla
me deslizo para caer de nuevo
a través de un largo túnel
que internamente levanta sus colmillos.

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JULIO CÉSAR LÓPEZ

ESTACIONES DE LA VIGILIA
(ESCALA DE LA SEMILLA)



CENOTE SAGRADO

…………A Ruth, Monsita
………..y Noemis, en la
…………tierra maya
…………de Chichén-Itzá,

Se demoró el agua de tu viaje
en el extraño círculo de una vieja morada.
La blanca harina y el verde desafiante de tu abismo
fundaron el recinto del silencio.

Cenote del enigma maya,
girando quieto en la linfa
de unas venas muradas por el tiempo,
¿te encadenan las manos redivivas
de las almas danzantes
en el mágico esplendor
de tus profundidades?

Tú sonríes, Cenote,
en el vuelo de indescifrables pájaros,
fabricando nerviosas estaciones
en la corteza impalpable de tu enigma,
tremolando banderas del misterio
en el color viajero de sus alas.

¿Tiembla en ellos, Cenote,
la pregunta postrera
de unas oscuras princesas diluidas
en la implacable boca del verano
para agitar la voluntad del dios antiguo,
derrochando la savia de la lluvia
en la tostada piel de la ancha tierra?

Cenote: de la selva de mi vida
vengo a tu selva también sobrevolando
el pozo de mis sueños
-¡oh cuenca alucinada!-
con colores que el tiempo ya derrite
en el silencio oscuro de tu entraña
y en el mapa sin pliegues de tu tiempo.

PUERTO RICO

JULIO CÉSAR LÓPEZ

ESTACIONES DE LA VIGILIA
(ESCALA DE LA SEMILLA)


NOCHE EN UXMAL

………….Viajando bajo el frenesí
…………..de oscura lluvia
…………..en la inmensa planicie
…………..yucateca.

En Uxmal se estremece la noche
y fulgores feroces coronan
cabezas mutiladas de los viejos dioses
que la selva en la planicie insólita
venera en el rito ancestral de las plantas
a la eternidad de la piedra.

En Uxmal la piedra erguida
acapara el silencio de la noche
y el viento y el cocuyo de las espigas
desposan claridades y rumores y sombras,
dispersan las estrellas y los hongos,
concilian a las hojas y a los muros
y claman por la lluvia y por los días
y por el rocío que inaugura la fecundidad de las cosas.

Transeúnte de riberas misteriosas,
yo naufragué también entre los brazos,
los ojos y las voces
en la noche definitiva que la sequía impuso
para expiar la indefinible culpa de la vida.

En Uxmal los dioses levantaron el trono
de la noche, los vientos y la lluvia
sobre el asombro pétreo de mis ojos.
Era mi sed saliendo de las ruinas.

PUERTO RICO

JULIO CÉSAR LÓPEZ

ESTACIONES DE LA VIGILIA
(ESCALA DE LA SEMILLA)



ESPEJOS

Danza el rostro del amor
en el espejo circular
de la vida.

La luz de otros litorales
surcó en el rostro
las nuevas sales.

Y nacieron hoteles
con espejos cuadrados
como la muerte.

PUERTO RICO

JULIO CÉSAR LÓPEZ

ESTACIONES DE LA VIGILIA
(ESCALA DE LA SEMILLA)


PRIMAVERA

Las sábanas que cubren nuestros cuerpos
tienen la delicada piel de un amor infinito.

Ellas fueron mortaja, no de nosotros,
sino del tiempo que quiso desnudarnos
en la inmensidad implacable de la noche.

La sábana de la noche tiene todo el sublime olor
de los poros torrenciales de tu alma
ahogando tiernamente la locura de sal
de los veranos.

Amor, ¡que primavera viertes
en la sábana estremecida de los cuerpos
sobre el valle de la noche larga del verano!.

PUERTO RICO

JULIO CÉSAR LÓPEZ

ESTACIONES DE LA VIGILIA
(ESCALA DE LA SEMILLA)


OTRA AURORA

Mujer sin dentadura,
yo conocí tu boca
junto a la primavera.

Mujer de encías desarmadas,
yo conocí las lanzas
de tu pecho florido.

Mujer de cintura arruinada,
yo conocí en juvenil esquina
el resplandor redondo de tu alba.

Mujer de noche desgreñada,
quiero decir:
yo conocí el aroma
de tu clara mañana.

O por decirlo recordando destellos:
Mujer de grieta en la mirada,
yo conocí los primeros fulgores
de tu espada.

O si mis manos vuelan
hacia un calor fugado:
Mujer de cadera ya gastada,
yo conocí los nácares tempranos
de tus lejanos poros.

Pero el tiempo me instala
en sus cambiantes torres
y ahora digo:
Mujer de soledad comprada,
yo he conocido hoy
tu soledad final
entre las multitudes.
Tu mano levantada
desde la ruin morada
de tus huesos,
en la loseta fría
de los grandes mercados,
tiembla en el agrio aíre
de pasillos repletos de soberbia
como un tizón extraño
al astro de otros tiempos.

Mujer para los dientes
insaciables del mundo,
mujer aprisionada
en oscuras encías,
mujer de soledad,
rosa agrietada,
el capullo harapiento
que hoy cuelga de tu mano
pudo haber sido mi corazón viajero.

Con los escombros
de tu piel manchada
quiero reconstruir, mujer,
la vena de todos los naufragios,
la transparencia de una vieja ternura
y transportar en ella
la ceniza, la lágrima
y la sangre de los desposeídos
en un furor de tránsito
hacia una luz futura.

Mujer sin dientes,
sin frescura,
seca semilla
ovillada en el espectro
de tu hundida mejilla,
vuelve a la primavera,
retorna al esplendor
de tu dulzura,
reconcilia cristales de amargura
con la luz de tu hijo
que hoy se vierte
en un fiero torrente
para limpiar tus manchas
en un fulgor azul
de un mundo nuevo.

PUERTO RICO

JULIO CÉSAR LÓPEZ

ESTACIONES DE LA VIGILIA
(ESCALA DE LA SEMILLA)



¿UN SOLO DÍA?

---------A María, en el día escarlata de
---------los enamorados.

Para el amor no basta un día.
No basta un día para los latidos.
No arde el corazón en noche fría.
No basta un día para sus sonidos.

El árbol del amor vibra en gemido
que no tiene reloj en su espesura.
Porque el amor es una fragua pura
que a la vida otorga su sentido.

La solitaria lágrima no funda llanto.
No funda mar la arena que levanto
como espuma del sueño de la vida.

No es la alegría un grano de sonrisa.
Es más de un aire lo que va en la brisa
cuando el amor lo tiñe con su herida.

PUERTO RICO

JULIO CÉSAR LÓPEZ

ESTACIONES DE LA VIGILIA
(ESCALA DE LA SEMILLA)



PREFERENCIA

No he venido a ver el sol
para quemarme.
He venido a ver la luz
para incendiar la sombra
del follaje.
Sin que el follaje muera
o muera la belleza
de su sombra.
La luz que permanece
respetará la sombra
en sus raíces:
Voy a buscar la luz.
Me quedo con la sombra.

PUERTO RICO

JULIO CÉSAR LÓPEZ

ESTACIONES DE LA VIGILIA
(ESCALA DE LA SEMILLA)


EL VÉRTIGO TAMBIÉN

Soy del vértigo el hijo no maduro
que desprende una corteza
siniestra en su camino,
pero en mi corazón
late un futuro,
donde la luz,
la rosa y la cereza
elevan la transparencia
de un destino:
el sosiego de un tronco
en su certeza.

¡El vértigo también
culmina en trino!.

PUERTO RICO

JULIO CÉSAR LÓPEZ

ESTACIONES DE LA VIGILIA
(ESCALA DE LA SEMILLA)



PARTE II:  DELIRIO DE HORMIGAS
Pensamientos poéticos


1

 Enhebra aros de humo con su cigarrillo.

Fabrica castillos en el aire con su imaginación.
 Convierte el agua de los ríos en sangre de sus
venas.

 Transforma el polvo de las estrellas en un manantial
de lágrimas.

 Los árboles salmodian enigmas en la torre del
viento.

 Los pobres del mundo se abrazan bajo el clamor
de un bosque de espadas.
 
Ve a los corazones formando collares sobre el
pecho silencioso de la noche.

 Se entrelazan los cuerpos en la danza universal
del amor.

 La poesía va girando como un globo que para
cada cual tiene su color y su onda.

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JULIO CÉSAR LÓPEZ

ESTACIONES DE LA VIGILIA
(ESCALA DE LA SEMILLA)



PARTE II:  DELIRIO DE HORMIGAS
Pensamientos poéticos


2

Un calendario azteca, un florerito de madera
chilena con incrustaciones de paja teñida y un
pequeño rondador ecuatoriano: triángulo de recuer-
dos en la viajera geometría del alma.

3

Yo paso por muchos versos de poetas ajenos
como por sobre árboles y montes que desfilaron en
viajes irrepetibles.

4

Mis palabras, mujer, rodean tu cintura como una
muralla sólo abierta en tu ombligo.

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JULIO CÉSAR LÓPEZ

ESTACIONES DE LA VIGILIA
(ESCALA DE LA SEMILLA)



PARTE II: DELIRIO DE HORMIGAS
Pensamientos poéticos



5

Poeta, mi túnica tiene cadillos y barro. No te re
procho, sin embargo, la alada blancura de la tuya,
colectora implacable de una luz de estrella.

6

Mis ojos fabrican nerviosas culebritas que termi-
nan naufragando en misteriosos cristales.

7

El pájaro se burla de la interpretación que
hacemos de su vuelo.

8

La noche deja en los parpados una espuma que en la
madrugada va secando.

9

Hay tanto cielo azul en el cielo de noviembre que las
nubes están implorando migajas.

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JULIO CÉSAR LÓPEZ

ESTACIONES DE LA VIGILIA
(ESCALA DE LA SEMILLA)



PARTE II: DELIRIO DE HORMIGAS
Pensamientos poéticos


10

El poeta le cambia al historiador la edad de piedra
por la piedra de la edad.

11

La rosa se columpia, mujer, en el cuerno de tu
buscanovio.

12

Los instrumentos de viento incitan al pájaro. Los
instrumentos de cuerda incitan al equilibrista. Pero el
pájaro también sabe de equilibrios…

13

¡Si la sangre corriera por mi corazón como la
lágrima por tu mejilla!

14

Al poeta muerto lo sorprenden embalsamando
rosas.

PUERTO RICO

JULIO CÉSAR LÓPEZ

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(ESCALA DE LA SEMILLA)



PARTE II: DELIRIO DE HORMIGAS
Pensamientos poéticos



15

Las abejas en enjambre hacia la morada de la
miel.
Los peces en cardumen hacia la comarca de las
sales.
Las estrellas en constelaciones hacia el recinto de
la luz.
Las palomas en bandadas hacia el techo de la ter-
nura.
Enjambre, cardumen, constelación, bandada.
Estaciones donde la secreta solidaridad de la
naturaleza renueva sus ímpetus, adopta sus ver-
siones y deja sus semillas.

16

El asaltante de la poesía siempre recibe balazos en el
pecho.

17

Cada camino edifica su aurora

18

Enamórate de la realidad como los niños: juega
con ella.

19

La nieta despeina el tiempo cuando peina las
canas del abuelo.

PUERTO RICO

JULIO CÉSAR LÓPEZ

ESTACIONES DE LA VIGILIA
(ESCALA DE LA SEMILLA)



PARTE II: DELIRIO DE HORMIGAS
Pensamientos poéticos



20

Te abrí mi corazón en esa clausura de la palabra
que es el beso.

21

El duende define al poeta: “ A las cuatro de
la mañana le ve el fondo a la taza de café y descubre la
amargura del azúcar.”

22

Nubes: viajeras del cielo.
Veleros: viajeros del agua.
Autos: viajeros de la tierra.
Sombras: nubes, veleros, autos.

Quedaste abandonada por unas semanas, pero tu trabajo es inmenso, gracias Lluvia, ya volverá el compañero, seguramente feliz y lleno de vitalidad y poesía. Besos

Pues no veas como se agradece el abrigo de tu compañía, querido Walter. Seguro que nuestro amigo y compañero Pascual llega recargado y como bien dices, con mucha poesía en la mochila.
Feliz yo de poder estar aquí, aprendiendo a la vez que disfrutando de tanta y tan buena literatura.

Besitos para ti.

PUERTO RICO

JULIO CÉSAR LÓPEZ

ESTACIONES DE LA VIGILIA
(ESCALA DE LA SEMILLA)



PARTE II: DELIRIO DE HORMIGAS
Pensamientos poéticos






23

Los poderosos resienten al poeta porque lo saben
enemigo invencible por su desprendimiento y sus
sorpresas: ¡el triunfo humano sobre el cálculo!.

24

Me consuela pensar que tu amor deja en mi vida
una melodía como el viento que se queda simulando
entre los árboles el rumor de la lluvia fugitiva.

25

Los farolitos con luces amarillas semejan maripo-
sas del alba madrugadoras.

26

Lee poesía como si fueras el perpetuo cautivo del
Génesis y edificarás el más firme de los universos.

27

Mi niñez gustaba de los viajes por la inmersión
silenciosas en la luz de los ríos lejanos que la altura
permitía contemplar a través de los árboles.

PUERTO RICO

JULIO CÉSAR LÓPEZ

ESTACIONES DE LA VIGILIA
(ESCALA DE LA SEMILLA)



PARTE II: DELIRIO DE HORMIGAS
Pensamientos poéticos



28

Me froto las yerbas en los labios para comunicarte el
secreto de la tierra.

29

¡Qué sosiego elocuente muestran las montañas
después de la lluvia!

30

Cuando la Razón logra viajar en primera en el tren
de la poesía, hay un horrible descarrilamiento.

31

Las hojas secas forman una constelación de ancianas.

32

Si no siembras árboles en tu conciencia, la vida te
será una erosión constante.

PUERTO RICO

JULIO CÉSAR LÓPEZ

ESTACIONES DE LA VIGILIA
(ESCALA DE LA SEMILLA)



PARTE II: DELIRIO DE HORMIGAS
Pensamientos poéticos


33

Cuando el viento juega con los cabellos de una
mujer es porque piensa que ella sigue siendo una
muñeca.



***
El sol se despide del día
diseñando en las nubes las más
caprichosas catedrales que la
crueldad nocturna amortaja
clausurando una misa de colores.


***
La torre y la calle no confligen en
materia poética. ¿Qué dónde debe
estar el creador? Pues, unas veces
en la torre y otras veces en la calle.
¿Acaso no es hombre? No hay
conflicto. El conflicto lo inventan
quienes pretenden estar sólo
en la torre o sólo en la calle.


***
Hermosa aspiración: heredar
la sonrisa de todos los niños.

PUERTO RICO

JULIO CÉSAR LÓPEZ

ESTACIONES DE LA VIGILIA
(ESCALA DE LA SEMILLA)



PARTE II: DELIRIO DE HORMIGAS
Pensamientos poéticos




***
Mientras, afuera, la lluvia cae,
siento, por dentro, los ríos que
se me van formando.


***
¡Qué hermoso espejo forma
la lágrima detenida en tus ojos!


***
Me dijo: "Te envío la primera
rosa que he dibujado.
Las espinas no van; se quedan
conmigo". ¡Y pensar que yo sólo
podía obsequiarle unas hojitas
de amapola que el silencio
secaba!


***
Me refugio con frecuencia en las
imágenes que despierta el conjuro
de estas nominaciones para flores
que parecen engarzar aires del
tiempo, fervor religioso, idealización
de la mujer: dama de noche,
amantes del viento, lirio de cala,
vara de San José, Manto de la Virgen.


Y bien, querido Pascual, habiendo concluido este trabajo sobre Julio Cesar López, que tú habías comenzado y por el que te doy las gracias, porque ha sido muy fructífero para mí, espero ya a que tú llegues(ya queda muy poquito) para continuar con los tantos autores que aún nos quedan. ¡Maravilla!
Gracias.

Gracias, querida amiga. Pronto te acompaño en esta inmensa tarea.

Bienvenido de nuevo Pascual, espero estén muy bien y felices, que hayan disfrutado mucho de lo que querías hace tanto. Un sueño más cumplido. Abrazos a ti y Josefina y a Lluvia que disfruta y nos enseña, como tu, con tanto amor de los autores y la poesía. Gracias amigos

Pues que bien, querido Pascual, que ya estés por este lugar de nuevo.
Gracias Walter, por empujar a seguir teniendo ganas de seguir aprendiendo y disfrutando a la vez.
Besos para ambos dos, jeje.