Besos.
En coordinación con la ASOCIACIÓN CULTURAL FORO AIRES DE LIBERTAD
ENTRAR DESDE AQUÍ
GRUPO METAFORA-EXCLUSIVO PARA SUS MIEMBROS
ENTRAR DESDE AQUÍ
ENTRAR DESDE AQUÍ
REGISTRO Nº 605538 (Madrid - España -28-05-14)
GRUPO METAFORA-EXCLUSIVO PARA SUS MIEMBROS
ENTRAR DESDE AQUÍ
FOROS DE "AIRES DE LIBERTAD"
Estadísticas
Nuestros miembros han publicado un total de 1065118 mensajes en 48375 argumentos.
Tenemos 1587 miembros registrados
El último usuario registrado es José Valverde Yuste
Comenta a tus compañeros
¿Quién está en línea?
En total hay 288 usuarios en línea: 5 Registrados, 1 Ocultos y 282 Invitados :: 2 Motores de búsqueda
clara_fuente, Guadalupe Cisneros Villa, José María, Maria Lua, Ramón Carballal
El record de usuarios en línea fue de 1156 durante el Mar 05 Dic 2023, 20:39
Temas similares
Últimos temas
Conectarse
Comenta a tus compañeros
En coordinación con la ASOCIACIÓN CULTURAL FORO AIRES DE LIBERTAD
ENTRAR DESDE AQUÍ
GRUPO METAFORA-EXCLUSIVO PARA SUS MIEMBROS
ENTRAR DESDE AQUÍ
ENTRAR DESDE AQUÍ
REGISTRO Nº 605538 (Madrid - España -28-05-14)
GRUPO METAFORA-EXCLUSIVO PARA SUS MIEMBROS
ENTRAR DESDE AQUÍ
+2
Pascual Lopez Sanchez
Lluvia Abril
6 participantes
POESÍA SOCIAL X (En la primera página de Poesía Social I hay un índice de autores)
Lluvia Abril- Administrador-Moderador
- Cantidad de envíos : 56900
Fecha de inscripción : 17/04/2011
Edad : 63
Gracias, amigos, nos gusta estar, sentirnos arropados y de camino, Walter, yo te digo que también voy arropando mi ignorancia, que seguro está más deshabitada que la tuya, jeje.
Besos.
Besos.
_________________
“Como siempre; apenas uno pone los pies en la tierra
se acaba la diversión”.
se acaba la diversión”.
"Mafalda"
Lluvia Abril- Administrador-Moderador
- Cantidad de envíos : 56900
Fecha de inscripción : 17/04/2011
Edad : 63
PUERTO RICO
ANGEL ANTONIO RUIZ LABOY
(Ponce, Puerto Rico - 1979 - )
Subway
No es la carne que tiembla bajo el golpe
ni es el golpe sobre la carne temblando.
Tal vez sea el rojo tibetano
que anuda por la paz en tus manos
o sea la paz vestida de castigo
desnudando tus nalgas con mis manos
convirtiéndolas en rojo tibetano.
Cuando es esteril la caricia
cuando la sangre sale a asomarse
al encuentro con el golpe de la piel
entonces yo soy el amo
y tu el amo
y no hay amo.
Un pájaro y otro pájaro
sometidos tiemblan.
ANGEL ANTONIO RUIZ LABOY
(Ponce, Puerto Rico - 1979 - )
Subway
No es la carne que tiembla bajo el golpe
ni es el golpe sobre la carne temblando.
Tal vez sea el rojo tibetano
que anuda por la paz en tus manos
o sea la paz vestida de castigo
desnudando tus nalgas con mis manos
convirtiéndolas en rojo tibetano.
Cuando es esteril la caricia
cuando la sangre sale a asomarse
al encuentro con el golpe de la piel
entonces yo soy el amo
y tu el amo
y no hay amo.
Un pájaro y otro pájaro
sometidos tiemblan.
_________________
“Como siempre; apenas uno pone los pies en la tierra
se acaba la diversión”.
se acaba la diversión”.
"Mafalda"
Lluvia Abril- Administrador-Moderador
- Cantidad de envíos : 56900
Fecha de inscripción : 17/04/2011
Edad : 63
PUERTO RICO
ANGEL ANTONIO RUIZ LABOY
(Ponce, Puerto Rico - 1979 - )
carne catedral
robusta crisálida de carne
hilas desde la baba boca
trapecios de cristal
columnas nacaradas
quién se atreve a descuidar el peso
que cae sobre tu espalda
que abre laberintos por tus piernas
que engulle el sexo de tu ombligo
quién blasfema la sacristía de tu vientre
con mariposas muertas que no vuelan
con ausencia de panes con escamas
quién te niega el pez y la boca
quien te esconde una tarántula
para ahuyentarse el rezo sobre el lomo
cuajado y cristalino de tu espalda
si la hostia ha sido derretida en tus adentros
si se ha vuelto paloma que te nada
los laberintos secretos de la carne
no gimas la palabra ausente
toma mi nombre y enuncia
las piedras que castigan su pecado
carne catedral
toma mi nombre
duéleme las manos abiertas que te buscan
mastícame los dedos con tu vientre
floréceme las yemas
devórame las uñas
vuélveme eco de campanas en tu altar
toma mi nombre
carne catedral.
ANGEL ANTONIO RUIZ LABOY
(Ponce, Puerto Rico - 1979 - )
carne catedral
robusta crisálida de carne
hilas desde la baba boca
trapecios de cristal
columnas nacaradas
quién se atreve a descuidar el peso
que cae sobre tu espalda
que abre laberintos por tus piernas
que engulle el sexo de tu ombligo
quién blasfema la sacristía de tu vientre
con mariposas muertas que no vuelan
con ausencia de panes con escamas
quién te niega el pez y la boca
quien te esconde una tarántula
para ahuyentarse el rezo sobre el lomo
cuajado y cristalino de tu espalda
si la hostia ha sido derretida en tus adentros
si se ha vuelto paloma que te nada
los laberintos secretos de la carne
no gimas la palabra ausente
toma mi nombre y enuncia
las piedras que castigan su pecado
carne catedral
toma mi nombre
duéleme las manos abiertas que te buscan
mastícame los dedos con tu vientre
floréceme las yemas
devórame las uñas
vuélveme eco de campanas en tu altar
toma mi nombre
carne catedral.
_________________
“Como siempre; apenas uno pone los pies en la tierra
se acaba la diversión”.
se acaba la diversión”.
"Mafalda"
Lluvia Abril- Administrador-Moderador
- Cantidad de envíos : 56900
Fecha de inscripción : 17/04/2011
Edad : 63
PUERTO RICO
ANGEL ANTONIO RUIZ LABOY
(Ponce, Puerto Rico - 1979 - )
púrpura fruncido
clavel morado
flor mamífera
como una esquina de carne
como una flor de carne blanda
como un erizo que pulula sed
besos viscosos
guiñadas rígidas
hueco que palpita y tiene hambre
de escamas bañadas en miel salada
en gritos que desangran
en crímenes que empujan la mirada
de los ojos que no ven
de las bocas que no hablan
del esfínter de paloma expuesto sin sus alas
del pájaro que tiembla sobre el nido
la pradera y sus manteles convidada
la boca abierta
la leche amamantada
desde un clavel morado que se frunce
flor mamífera
boca callada.
ANGEL ANTONIO RUIZ LABOY
(Ponce, Puerto Rico - 1979 - )
púrpura fruncido
clavel morado
flor mamífera
como una esquina de carne
como una flor de carne blanda
como un erizo que pulula sed
besos viscosos
guiñadas rígidas
hueco que palpita y tiene hambre
de escamas bañadas en miel salada
en gritos que desangran
en crímenes que empujan la mirada
de los ojos que no ven
de las bocas que no hablan
del esfínter de paloma expuesto sin sus alas
del pájaro que tiembla sobre el nido
la pradera y sus manteles convidada
la boca abierta
la leche amamantada
desde un clavel morado que se frunce
flor mamífera
boca callada.
_________________
“Como siempre; apenas uno pone los pies en la tierra
se acaba la diversión”.
se acaba la diversión”.
"Mafalda"
Lluvia Abril- Administrador-Moderador
- Cantidad de envíos : 56900
Fecha de inscripción : 17/04/2011
Edad : 63
PUERTO RICO
ANGEL ANTONIO RUIZ LABOY
(Ponce, Puerto Rico - 1979 - )
tríptico andaluz
I. azulejada
debajo de ti también he estado
aunque esta sed por el dominio del espíritu
me ha costado los alientos de la carne
sobre mi cuerpo un nuevo cuerpo se construye
sobre tu piel mi piel se amenaza azulejada
somos sólo siendo uno
y uno sólo siendo dos
todo soy tu
todo eres yo
sobre tu cuerpo un otro cuerpo se construye
sobre mi piel tu piel se amenaza azulejada.
II. trinitarias del Guadalquivir
lanzar un puente hasta la tarde
para no ahogarme en el temblor de las hojas
que anidan la fe de ver el mar
cruzar la noche entre las piedras sin estrellas
dormir la liviandad del cielo titilando
a pasos firmes que acompasan luz
todo es tiempo transpirando hacia otro tiempo
desde las venas trinitarias bifurcadas
voy a atirantar los huesos de la tarde
voy a despedir la fe de ver el mar
y lanzar piedras para ahuecar la noche
la brevedad del paso no dicta su firmeza
los puentes son venas
de trinitarias que despiertan hacia el mar.
III. sed hacia Granada
como la sed del algodón purpúreo
muriendo el caudal silenciado del desierto
todo es la distancia de las aguas
el llanto arenado de las piedras amarillas
todo sepultando la ausencia del rayo
todo venerando los cristales desechados por el cielo
que decide darse estéril a sus bocas
ANGEL ANTONIO RUIZ LABOY
(Ponce, Puerto Rico - 1979 - )
tríptico andaluz
I. azulejada
debajo de ti también he estado
aunque esta sed por el dominio del espíritu
me ha costado los alientos de la carne
sobre mi cuerpo un nuevo cuerpo se construye
sobre tu piel mi piel se amenaza azulejada
somos sólo siendo uno
y uno sólo siendo dos
todo soy tu
todo eres yo
sobre tu cuerpo un otro cuerpo se construye
sobre mi piel tu piel se amenaza azulejada.
II. trinitarias del Guadalquivir
lanzar un puente hasta la tarde
para no ahogarme en el temblor de las hojas
que anidan la fe de ver el mar
cruzar la noche entre las piedras sin estrellas
dormir la liviandad del cielo titilando
a pasos firmes que acompasan luz
todo es tiempo transpirando hacia otro tiempo
desde las venas trinitarias bifurcadas
voy a atirantar los huesos de la tarde
voy a despedir la fe de ver el mar
y lanzar piedras para ahuecar la noche
la brevedad del paso no dicta su firmeza
los puentes son venas
de trinitarias que despiertan hacia el mar.
III. sed hacia Granada
como la sed del algodón purpúreo
muriendo el caudal silenciado del desierto
todo es la distancia de las aguas
el llanto arenado de las piedras amarillas
todo sepultando la ausencia del rayo
todo venerando los cristales desechados por el cielo
que decide darse estéril a sus bocas
_________________
“Como siempre; apenas uno pone los pies en la tierra
se acaba la diversión”.
se acaba la diversión”.
"Mafalda"
Lluvia Abril- Administrador-Moderador
- Cantidad de envíos : 56900
Fecha de inscripción : 17/04/2011
Edad : 63
PUERTO RICO
ANGEL ANTONIO RUIZ LABOY
(Ponce, Puerto Rico - 1979 - )
relámpago de agua
déjame advertirte la fragilidad que habita en el silencio
y contarte de su piel de trinitaria anochecida
intacta
como la sed de los recuerdos que se olvidan y se esfuman
previo al llanto de la letra susurrando amaneceres
déjame que te advierta de la furia de los truenos
un látigo de luz se quiebra en la ventana y tu no duermes
hasta ver oscurecer los párpados del viento
que lamen el sudor de los estambres que devienen
en fría hoguera y relámpago de agua derretido
déjame nombrarte la cuenca de tu espalda lastimada
o bautizar la lumbre que oscurece en el esfínter
de la historia sabia de tu piel
de la memoria erizada de tus vellos
de la cicatriz cuajada de otros nombres
créeme la caricia de los dientes
la isla que se yergue bajo el brazo y el abrazo
el puente que se tiende con mi mano y ven a mí
a mí para contarte del silencio de los truenos
a mí para advertirte la furia en piel de trinitarias
a mí para beberte el viento desde el estambre herido
y coronarte cicatriz de todas mis memorias naufragadas
ANGEL ANTONIO RUIZ LABOY
(Ponce, Puerto Rico - 1979 - )
relámpago de agua
déjame advertirte la fragilidad que habita en el silencio
y contarte de su piel de trinitaria anochecida
intacta
como la sed de los recuerdos que se olvidan y se esfuman
previo al llanto de la letra susurrando amaneceres
déjame que te advierta de la furia de los truenos
un látigo de luz se quiebra en la ventana y tu no duermes
hasta ver oscurecer los párpados del viento
que lamen el sudor de los estambres que devienen
en fría hoguera y relámpago de agua derretido
déjame nombrarte la cuenca de tu espalda lastimada
o bautizar la lumbre que oscurece en el esfínter
de la historia sabia de tu piel
de la memoria erizada de tus vellos
de la cicatriz cuajada de otros nombres
créeme la caricia de los dientes
la isla que se yergue bajo el brazo y el abrazo
el puente que se tiende con mi mano y ven a mí
a mí para contarte del silencio de los truenos
a mí para advertirte la furia en piel de trinitarias
a mí para beberte el viento desde el estambre herido
y coronarte cicatriz de todas mis memorias naufragadas
_________________
“Como siempre; apenas uno pone los pies en la tierra
se acaba la diversión”.
se acaba la diversión”.
"Mafalda"
Lluvia Abril- Administrador-Moderador
- Cantidad de envíos : 56900
Fecha de inscripción : 17/04/2011
Edad : 63
PUERTO RICO
ANGEL ANTONIO RUIZ LABOY
(Ponce, Puerto Rico - 1979 - )
el reflejo desigual
para Humberto Manuel
"ahora digo ayer
aunque lastime"
-José María Lima
hombro a hombro cargamos la piel vuelta un relicario
echamos a dormir la fiera de los ojos tristes
que embestía de escarabajos la imagen de la noche
rodando siempre al filo de un eclipse que retorna
sus nombres como una sentencia de manos migratorias
de caricias que revolotean el pasado entre las alas
de olas que se van eternamente y no nos llevan.
hombro a hombro te he sabido la sal de los espejos
el deseo de morder la imagen rota que devuelven
cuando el uno es siempre la mitad de un dos.
yo también he mordido los recuerdos al abrazo
y me he abrazado a los mordiscos cual recuerdo
para recordar los abrazos que nos muerden.
por ello rompo los espejos como a una imagen falsa
mosaico los reflejos desiguales y me encuentro
allí entre los pedazos de tanto hielo tibio, allí multiplicado
esclavo de no verme con los ojos del escarabajo falso
que anunciaba la tristeza de la noche transmigrada.
es tiempo de darse a la mañana y de repetir el sol
es tiempo de decir ayer
aunque lastime caminar por sobre cristales rotos.
ANGEL ANTONIO RUIZ LABOY
(Ponce, Puerto Rico - 1979 - )
el reflejo desigual
para Humberto Manuel
"ahora digo ayer
aunque lastime"
-José María Lima
hombro a hombro cargamos la piel vuelta un relicario
echamos a dormir la fiera de los ojos tristes
que embestía de escarabajos la imagen de la noche
rodando siempre al filo de un eclipse que retorna
sus nombres como una sentencia de manos migratorias
de caricias que revolotean el pasado entre las alas
de olas que se van eternamente y no nos llevan.
hombro a hombro te he sabido la sal de los espejos
el deseo de morder la imagen rota que devuelven
cuando el uno es siempre la mitad de un dos.
yo también he mordido los recuerdos al abrazo
y me he abrazado a los mordiscos cual recuerdo
para recordar los abrazos que nos muerden.
por ello rompo los espejos como a una imagen falsa
mosaico los reflejos desiguales y me encuentro
allí entre los pedazos de tanto hielo tibio, allí multiplicado
esclavo de no verme con los ojos del escarabajo falso
que anunciaba la tristeza de la noche transmigrada.
es tiempo de darse a la mañana y de repetir el sol
es tiempo de decir ayer
aunque lastime caminar por sobre cristales rotos.
_________________
“Como siempre; apenas uno pone los pies en la tierra
se acaba la diversión”.
se acaba la diversión”.
"Mafalda"
Lluvia Abril- Administrador-Moderador
- Cantidad de envíos : 56900
Fecha de inscripción : 17/04/2011
Edad : 63
PUERTO RICO
ANGEL ANTONIO RUIZ LABOY
(Ponce, Puerto Rico - 1979 - )
atraganto
me atraganto en el silencio de esta herida que me nace en la palabra
me vuelvo eco en la mudez de esta impotencia al enunciar
de la renuncia de los nombres en huelga de significantes
pero conjugo este dolor y trinchero desde el margen
deambulo por la estricta armonía de unos versos muertos
que fugan a nombrar las despedidas.
ANGEL ANTONIO RUIZ LABOY
(Ponce, Puerto Rico - 1979 - )
atraganto
me atraganto en el silencio de esta herida que me nace en la palabra
me vuelvo eco en la mudez de esta impotencia al enunciar
de la renuncia de los nombres en huelga de significantes
pero conjugo este dolor y trinchero desde el margen
deambulo por la estricta armonía de unos versos muertos
que fugan a nombrar las despedidas.
_________________
“Como siempre; apenas uno pone los pies en la tierra
se acaba la diversión”.
se acaba la diversión”.
"Mafalda"
Lluvia Abril- Administrador-Moderador
- Cantidad de envíos : 56900
Fecha de inscripción : 17/04/2011
Edad : 63
PUERTO RICO
ANGEL ANTONIO RUIZ LABOY
(Ponce, Puerto Rico - 1979 - )
pandémica y terrestre
A Jaime Gil de Biedma
porque he querido hurgar hasta la sabana de tu voz para verme
dormido y no tocarme desde lejos la piel que no me tengo
hasta hallar la huella dactilar de tu palabra erguida
en medio de mi cama y darme hasta el exceso
y descubrirnos limpios de poesía pero sucios de la vida.
imagina que ahora de hombre a hombre conversamos
sometidos al oscuro secreto de las noches en un bar
imagina cuando asoma la melancolía entre las cejas de los tristes
cuando la comunión del espíritu no se abrace a la botella
cuando el humo ya olvide la desolación dormida entre los ceniceros
cuando se cuele el tema de la vida entre el hielo de este whisky
y el recuerdo parezca una embriaguez inagotable,
imagina entonces que desvisto este corazón infiel
para mostrarte desde mis manos los nidos de los pájaros
que una vez me amaron y que al final de su estación también volaron.
tendré que hablarte de la impaciencia en el orgasmo
de volver al cuerpo carnada en otro anzuelo
de desvestir la pubertad tanta y tantas veces
hasta lograr el cansancio de las canas, la palidez del beso
y que aun así,
sea imposible entrar en unos brazos sin deslumbramiento
sin sentir el mismo temblor –aunque sea por un instante-
que sacudió a mis veinte años la fe de que un amor se perpetúe
en presencia de abrazos obnubilando el sol de la mañana
en todos mis despertares vuelto tatuaje de mi sábana.
para saber del amor, haber estado sólo no es suficiente
tal vez cuatrocientas noches y una más
en cuatrocientos cuerpos y tal vez en uno más
besar bocas que nunca pronuncien al amor
deambular por cuerpos que se sepan pasajeros
prometer una caricia y dolerse en ella como en su propia ausencia
y llorarse solo, después de darse todo hasta el vacío.
el amor siempre es un misterio para el cuerpo en que se lee
pero huye de los besos del que intenta allí aprehenderle.
por eso atesoro el pasado como a una imagen rota
porque me descubrí también buscando ese tendón dolido
en que hundirme a los misterios de las noches
y asomarme la piel hasta las navajas del deseo pasajero.
porque en tantos rostros ajenos y dispersos
y en tantos moteles de una noche y muy ajenos
y en esquinas mojadas de minutos y de nombres
(que el recuerdo no puede construir sin sentir que es uno
uno y sólo uno, el beso que me regaló la muerte)
yo también descubrí la soledad de tanta compañía
descubrí que lo fugaz justifica la existencia de lo eterno
y no al revés, como dicta la sabiduría de la promiscuidad
porque en el amor también es importante el tiempo.
siempre supe que de nada me valdría tanto amor disperso
sin la certeza de ese brazo robando pesadillas en mi noche.
íntegra imagen de mi vida, asomada en tanto rostro de juventud
en tanto beso anónimo firmando el cielo por mi boca
me diste el alma a sorbos diluida en tragos y bohemias
de esas que anteceden las noches memorables que se olvidan.
no hay lujuria que compare a tu silencio si me miras
si me asomo al reflejo del recuerdo de tus manos
ahora que borrosas tus caricias me deliran nuestra historia
febriles como el paso de los años que despojan
lo que fue tanta belleza, tanta fuerza, tanta imagen repetida
que hoy pasea en el recuerdo de los rostros desechados por el tiempo
mientras tú y yo seguimos
juntos
hasta morir en paz
los dos
como dicen que mueren los que se han amado mucho.
ANGEL ANTONIO RUIZ LABOY
(Ponce, Puerto Rico - 1979 - )
pandémica y terrestre
A Jaime Gil de Biedma
porque he querido hurgar hasta la sabana de tu voz para verme
dormido y no tocarme desde lejos la piel que no me tengo
hasta hallar la huella dactilar de tu palabra erguida
en medio de mi cama y darme hasta el exceso
y descubrirnos limpios de poesía pero sucios de la vida.
imagina que ahora de hombre a hombre conversamos
sometidos al oscuro secreto de las noches en un bar
imagina cuando asoma la melancolía entre las cejas de los tristes
cuando la comunión del espíritu no se abrace a la botella
cuando el humo ya olvide la desolación dormida entre los ceniceros
cuando se cuele el tema de la vida entre el hielo de este whisky
y el recuerdo parezca una embriaguez inagotable,
imagina entonces que desvisto este corazón infiel
para mostrarte desde mis manos los nidos de los pájaros
que una vez me amaron y que al final de su estación también volaron.
tendré que hablarte de la impaciencia en el orgasmo
de volver al cuerpo carnada en otro anzuelo
de desvestir la pubertad tanta y tantas veces
hasta lograr el cansancio de las canas, la palidez del beso
y que aun así,
sea imposible entrar en unos brazos sin deslumbramiento
sin sentir el mismo temblor –aunque sea por un instante-
que sacudió a mis veinte años la fe de que un amor se perpetúe
en presencia de abrazos obnubilando el sol de la mañana
en todos mis despertares vuelto tatuaje de mi sábana.
para saber del amor, haber estado sólo no es suficiente
tal vez cuatrocientas noches y una más
en cuatrocientos cuerpos y tal vez en uno más
besar bocas que nunca pronuncien al amor
deambular por cuerpos que se sepan pasajeros
prometer una caricia y dolerse en ella como en su propia ausencia
y llorarse solo, después de darse todo hasta el vacío.
el amor siempre es un misterio para el cuerpo en que se lee
pero huye de los besos del que intenta allí aprehenderle.
por eso atesoro el pasado como a una imagen rota
porque me descubrí también buscando ese tendón dolido
en que hundirme a los misterios de las noches
y asomarme la piel hasta las navajas del deseo pasajero.
porque en tantos rostros ajenos y dispersos
y en tantos moteles de una noche y muy ajenos
y en esquinas mojadas de minutos y de nombres
(que el recuerdo no puede construir sin sentir que es uno
uno y sólo uno, el beso que me regaló la muerte)
yo también descubrí la soledad de tanta compañía
descubrí que lo fugaz justifica la existencia de lo eterno
y no al revés, como dicta la sabiduría de la promiscuidad
porque en el amor también es importante el tiempo.
siempre supe que de nada me valdría tanto amor disperso
sin la certeza de ese brazo robando pesadillas en mi noche.
íntegra imagen de mi vida, asomada en tanto rostro de juventud
en tanto beso anónimo firmando el cielo por mi boca
me diste el alma a sorbos diluida en tragos y bohemias
de esas que anteceden las noches memorables que se olvidan.
no hay lujuria que compare a tu silencio si me miras
si me asomo al reflejo del recuerdo de tus manos
ahora que borrosas tus caricias me deliran nuestra historia
febriles como el paso de los años que despojan
lo que fue tanta belleza, tanta fuerza, tanta imagen repetida
que hoy pasea en el recuerdo de los rostros desechados por el tiempo
mientras tú y yo seguimos
juntos
hasta morir en paz
los dos
como dicen que mueren los que se han amado mucho.
_________________
“Como siempre; apenas uno pone los pies en la tierra
se acaba la diversión”.
se acaba la diversión”.
"Mafalda"
Lluvia Abril- Administrador-Moderador
- Cantidad de envíos : 56900
Fecha de inscripción : 17/04/2011
Edad : 63
PUERTO RICO
ANGEL ANTONIO RUIZ LABOY
(Ponce, Puerto Rico - 1979 - )
carne de caimán
la brea es un caimán desparramado
un colmillo sin bandera merodeando la ciudad
mojándose de vidrios rotos las esquinas
deambulando su cola áspera de piedras
multiplicando su mordida en cada cruce
como una raíz que crea deseos y peligros
como un fusil que huele a sangre y callejones
la brea es el territorio eterno de la sombra
y el gatillo que dispara el viaje de las ruedas
es que el caimán también es la piel de los caminos
y es el campo de batalla de las armas y sus gangas
de niños tatuados de crimen en los ojos
que guardan en su mente un arma letal que no es juguete
que apuntan al paisaje que no existe
porque todo es brea o casquillo iluminado
porque todo es sonido de cañón sin un manual
que advierta la fragilidad de nuestros cuerpos
que nombre la pérdida y el calibre de los llantos
la brea es una bala de bifurcada trayectoria
donde el cielo es una foto al que se apunta
sin herirle los sesos a ninguna religión
y duele ver que la desigualdad puede ser un arma en otra mano
o ser la ausencia de heridas y la cantidad de cigarrillos
y poder gritar no sin sentirnos obligados a creernos enemigos
porque ante el paso del caimán todos migramos
a estantes de botellas muy altas para ser consuelo
a llantos muy frágiles para ser filo de machete
a frutos quebradizos del castigo
duele
duele que tengamos que posar ante el recuerdo con nostalgia
y abrazarnos a fotos de efímeras sonrisas
de aquellos aplastados por los pasos del caimán
que cargan cruces invisibles en el alma
duele que crecer sea jugar otra vez a la ruleta
y aprender sea imitar pecados clásicos
somos carne de caimán
y no parece haber camino de regreso
ANGEL ANTONIO RUIZ LABOY
(Ponce, Puerto Rico - 1979 - )
carne de caimán
la brea es un caimán desparramado
un colmillo sin bandera merodeando la ciudad
mojándose de vidrios rotos las esquinas
deambulando su cola áspera de piedras
multiplicando su mordida en cada cruce
como una raíz que crea deseos y peligros
como un fusil que huele a sangre y callejones
la brea es el territorio eterno de la sombra
y el gatillo que dispara el viaje de las ruedas
es que el caimán también es la piel de los caminos
y es el campo de batalla de las armas y sus gangas
de niños tatuados de crimen en los ojos
que guardan en su mente un arma letal que no es juguete
que apuntan al paisaje que no existe
porque todo es brea o casquillo iluminado
porque todo es sonido de cañón sin un manual
que advierta la fragilidad de nuestros cuerpos
que nombre la pérdida y el calibre de los llantos
la brea es una bala de bifurcada trayectoria
donde el cielo es una foto al que se apunta
sin herirle los sesos a ninguna religión
y duele ver que la desigualdad puede ser un arma en otra mano
o ser la ausencia de heridas y la cantidad de cigarrillos
y poder gritar no sin sentirnos obligados a creernos enemigos
porque ante el paso del caimán todos migramos
a estantes de botellas muy altas para ser consuelo
a llantos muy frágiles para ser filo de machete
a frutos quebradizos del castigo
duele
duele que tengamos que posar ante el recuerdo con nostalgia
y abrazarnos a fotos de efímeras sonrisas
de aquellos aplastados por los pasos del caimán
que cargan cruces invisibles en el alma
duele que crecer sea jugar otra vez a la ruleta
y aprender sea imitar pecados clásicos
somos carne de caimán
y no parece haber camino de regreso
_________________
“Como siempre; apenas uno pone los pies en la tierra
se acaba la diversión”.
se acaba la diversión”.
"Mafalda"
Lluvia Abril- Administrador-Moderador
- Cantidad de envíos : 56900
Fecha de inscripción : 17/04/2011
Edad : 63
PUERTO RICO
ANGEL ANTONIO RUIZ LABOY
(Ponce, Puerto Rico - 1979 - )
Y hasta aquí hemos llegado con la inmensa obra de Ángel Antonio Ruiz Laboy, que personalmente, me ha gustado y desde ya, admiro.
Próximo autor, en este caso, autora: ANA MARÍA FUSTER LAVÍN
ANGEL ANTONIO RUIZ LABOY
(Ponce, Puerto Rico - 1979 - )
La Ley de los excesos reprimidos
Sólo se tenía que parar e insinuar con el más leve de los gestos las dimensiones de su instrumento de trabajo. Alguien de inmediato pararía -no porque ese fuera su propósito al pasar por allí- y sin preguntar el costo, lo invitaría a su auto. De inmediato extendería su mano y estaría dispuesto a pagar el precio que fuera (necesario). Él iría callado, con el brazo izquierdo extendido hacia atrás de la palanca de emergencia y el derecho -en puño- cerca de su sien, aprendiendo, como aprenden las fieras, el camino que le deparaba la noche. Las piernas abiertas y flexionadas ofreciendo el grueso banquete que marcaba su hombría a través de aquel pantalón que usaba para ejercitarse. Su cuello ancho recostado como un tronco cayendo, su piel de madera oscura y textura como el interior de las semillas- semillas como las que se repetían en sus pezones cuando endurecían-, sus pectorales estirando la camisilla y creando un vacío en el seno de su pecho, como su cuerpo todo que insinuaba haber crecido dentro de la misma ropa que ahora no soportaba el embate de su agrandamiento plural y contundente... todo añadía tensión a la escena de respiración profunda y cortada dentro del auto de turno. La música por más ligera que fuera se volvía pesada. La conversación nunca fluía. El aire siempre se sentía frío y el cliente siempre temblaba (caliente). No era mucho el desempeño que Lisandro tenía que hacer para que sus clientes quedaran satisfechos con la idea de que habían tenido la experiencia más alucinante de sus vidas. En la mayoría de los casos se limitaba a dejar que sus clientes lo tocaran mientras él permanecía indiferente pero duro. Una dura indiferencia dicotómica que los enloquecía al ver tanta virilidad expuesta y disponible a su antojo. Con clientes frecuentes, que ya de tanto nadar en esa recia hombría necesitaban algo más que sólo contemplar el cuerpo que se habían aprendido a causa de ejercicios de memoria siempre que el dinero no podía comprar la experiencia real, Lisandro se volvía un animal agresivo, arremetía con toda su fuerza -que no era poca- y desmantelaba, pelo a pelo, gemido a gemido, zarpazo a zarpazo; en fin, una a una cualquier ilusión o fantasía antes tenida para crear una nueva: la esperanza de que se repita el encuentro, la ilusión de que ese toro salvaje sólo quiera descargar su fuerza con ese torero que pinta su piel de rojo a golpe puro. Si algo de toda la ejecución ritual daba placer a Lisandro, era ver que en sus clientes causaba dolor y que los llevaba al límite en donde eran ellos los que, en medio del éxtasis, le pidieran lo que parecía inaudito: detenerse.
El recuerdo de Lisandro quedaba como un escapulario, su imagen descansaba en esos cuerpos de pecho a espalda y el ojal que formaba apresaba la cabeza con las divinas imágenes de pasión y muerte. Saborear su masculinidad era más bien pecado capital (herencia capitalista), no había forma de acercarse a tocarle sin lujuria, ni forma de recordarlo sin cierta mezcla de gula y soberbia, no había forma de disfrutarlo sin caer en los excesos al saborear ese cuerpo de exuberante.
La seguridad de Lisandro en sí y en su fuerza y la conciencia de su hermosura lo hacían carecer del más mínimo de los temores. Nadie arremetería contra aquel rinoceronte de gran cuerno, nadie sería capaz de pensar en perder la oportunidad de volver a compartir tanta belleza. Salía de noche, hacía algunos clientes y con ello cuadraba sus ingresos para cumplir con alguna responsabilidad de esas que no justifican su prostitución pero que la hacen comprensible. Sea cual fuera, sus clientes rogaban -egoístamente- que nunca fuera saciada la necesidad que lo hacía desbordarse por la oscuridad de esas calles y mantener así saciada su esclavitud a ese cuerpo alquilado.
Aquella noche se acercó legalmente por una de esas esquinas que abren el camino de concreto entre La Plaza de Convalecencia y La Universidad el Lcdo. Ceballos Arzuela. No hace mucho había dejado de vivir en el área -claro que en ese entonces lo conocían como ya nadie le conoce, por su nombre- para ejercer su Juris Doctor, para estacionar con menos riesgo su nuevo vehículo -alegado sinónimo de un esfuerzo que lo distancia de otros esfuerzos presuntamente no tan superiores pero evidentemente no tan bien remunerados; para vivir cerca de gente con la que pueda hablar a un nivel profesional pero con la que rara vez interactuaba, para esconder detrás de cierta ropa ciertos manerismos vulgares, para evolucionar entre otras cosas -porque la evolución tiene que ser constatable en materia-. Su salida del recinto de El Recinto no había sido hace mucho, su auto de lujo aún tocaba música de Silvio Rodríguez -hay contradicciones en la vida tan fuertes, yo no sé-. Antes nunca encontró el tiempo ni el interés para conocer el área, ni las áreas que mutan y mutilan según la hora del día o de la noche. El era un hombre escueto, de facciones suaves, de sonrisa perfecta, de vello femenino y aspecto casi impúber, piel rosada, boca rosada, ojos rosados, ano rosado. Tenía el don de la palabra, como buen abogado hallaba siempre la palabra perfecta. Tenía por novia a una compañera de estudios, ahora colega, también rosada, con quien tenía planes a falta de planes, todo parecía perfecto hasta que pasó por la Calle Brumbraugh y montó a Lisandro; comenzó a respirar profundo, padeció frío y tembló, su mirada era constante.
La embriaguez erótica que ahogaba al Lcdo. Ceballos Arzuela no era más que un desdoblamiento de su timidez. Lisandro tomó control de la escena en aquel cuarto de motel al que con frecuencia le dirigía la noche. Como la de un palomo que no ha volado, Lisandro entendió la inexperiencia de su compañía quién dejó la música del auto sonando para no escuchar y que no le escucharan las voces vecinas por el alegado temor a ser reconocido. No era de su oficio tener cuidado ni ser sutil pero este cazador que lo había llevado consigo para su placer ahora no dejaba de temblar y se volvía una presa. Le abrazó y le dijo que no temiera, que estaría bien, que él sabía lo que hacía. Guió con sus manos las de él y las llevó a explorar lo abultado de sus contornos y la gigantez de los espacios que se abrían entre su musculatura. El licenciado perdía toda cordura, Lisandro se sabía el primer hombre y la ingenuidad rosada de aquel hombre nuevo y rosado que temblaba de deseo no le permitió ser indiferente y lo sometió a su fuerza como se disciplina a un niño. No recibió resistencia a su brutalidad cuando su brutalidad estalló y toreó con toda furia embistiendo sin piedad contra este cazador victimizado que lo miraba con ojos cristalizados como se miran las luces cegadoras. Lisandro sintió algo que entendió como al odio pero que no era odio. Vio en este hombre rosado a todos lo hombres rosados que han intercambiado bienes con él y no podía entender que recibiera su rudeza como una bendición, el licenciado no se rendía ante el embate y parecía desearlo a merced del daño, a merced de la sangre que evidentemente vendría y vino. No había más que hacer entre aquellos cuerpos derrotados que continuaban dando la batalla de la embestida. No reconoció la rudeza límite alguno y no hubo agresión o caricia que por venir de tanta hermosura no fuera con beneplácito recibida. El tierno palomo rosado ya desfallecía extasiado y en sus ojos se leía una invitación a ser polvo, polvo enamorado. Lisandro mordía con más fuerza la piel de su carnada que sangraba y le recibía. Lo devoró a pedazos.
El cuerpo del exceso ha consumido al cuerpo de la ley, la ley que en su afán de control ha reconocido el deseo del exceso.
Lisandro salió asustado dejando los restos del cuerpo mordisqueado tendido en piezas sobre la cama. Se montó en el auto aún desnudo, su cuerpo estaba ensalivado, ensangrentado, llevaba dentro y fuera parte de aquel otro cuerpo pero la lluvia se encargó de limpiarlo a medias. La música en el auto aún tocaba, justamente la canción favorita del licenciado.
"...Ojalá se te acabe la mirada constante, la palabra precisa, la sonrisa perfecta. Ojalá pase algo que te borre de pronto, una luz cegadora, un disparo de nieve. Ojalá por lo menos que me lleve la muerte para no verte tanto para no verte siempre en todos los segundos, en todas las visiones. Ojalá que no pueda tocarte ni en canciones. Ojalá pase algo que te borre de pronto..."
Sólo se tenía que parar e insinuar con el más leve de los gestos las dimensiones de su instrumento de trabajo. Alguien de inmediato pararía -no porque ese fuera su propósito al pasar por allí- y sin preguntar el costo, lo invitaría a su auto. De inmediato extendería su mano y estaría dispuesto a pagar el precio que fuera (necesario). Él iría callado, con el brazo izquierdo extendido hacia atrás de la palanca de emergencia y el derecho -en puño- cerca de su sien, aprendiendo, como aprenden las fieras, el camino que le deparaba la noche. Las piernas abiertas y flexionadas ofreciendo el grueso banquete que marcaba su hombría a través de aquel pantalón que usaba para ejercitarse. Su cuello ancho recostado como un tronco cayendo, su piel de madera oscura y textura como el interior de las semillas- semillas como las que se repetían en sus pezones cuando endurecían-, sus pectorales estirando la camisilla y creando un vacío en el seno de su pecho, como su cuerpo todo que insinuaba haber crecido dentro de la misma ropa que ahora no soportaba el embate de su agrandamiento plural y contundente... todo añadía tensión a la escena de respiración profunda y cortada dentro del auto de turno. La música por más ligera que fuera se volvía pesada. La conversación nunca fluía. El aire siempre se sentía frío y el cliente siempre temblaba (caliente). No era mucho el desempeño que Lisandro tenía que hacer para que sus clientes quedaran satisfechos con la idea de que habían tenido la experiencia más alucinante de sus vidas. En la mayoría de los casos se limitaba a dejar que sus clientes lo tocaran mientras él permanecía indiferente pero duro. Una dura indiferencia dicotómica que los enloquecía al ver tanta virilidad expuesta y disponible a su antojo. Con clientes frecuentes, que ya de tanto nadar en esa recia hombría necesitaban algo más que sólo contemplar el cuerpo que se habían aprendido a causa de ejercicios de memoria siempre que el dinero no podía comprar la experiencia real, Lisandro se volvía un animal agresivo, arremetía con toda su fuerza -que no era poca- y desmantelaba, pelo a pelo, gemido a gemido, zarpazo a zarpazo; en fin, una a una cualquier ilusión o fantasía antes tenida para crear una nueva: la esperanza de que se repita el encuentro, la ilusión de que ese toro salvaje sólo quiera descargar su fuerza con ese torero que pinta su piel de rojo a golpe puro. Si algo de toda la ejecución ritual daba placer a Lisandro, era ver que en sus clientes causaba dolor y que los llevaba al límite en donde eran ellos los que, en medio del éxtasis, le pidieran lo que parecía inaudito: detenerse.
El recuerdo de Lisandro quedaba como un escapulario, su imagen descansaba en esos cuerpos de pecho a espalda y el ojal que formaba apresaba la cabeza con las divinas imágenes de pasión y muerte. Saborear su masculinidad era más bien pecado capital (herencia capitalista), no había forma de acercarse a tocarle sin lujuria, ni forma de recordarlo sin cierta mezcla de gula y soberbia, no había forma de disfrutarlo sin caer en los excesos al saborear ese cuerpo de exuberante.
La seguridad de Lisandro en sí y en su fuerza y la conciencia de su hermosura lo hacían carecer del más mínimo de los temores. Nadie arremetería contra aquel rinoceronte de gran cuerno, nadie sería capaz de pensar en perder la oportunidad de volver a compartir tanta belleza. Salía de noche, hacía algunos clientes y con ello cuadraba sus ingresos para cumplir con alguna responsabilidad de esas que no justifican su prostitución pero que la hacen comprensible. Sea cual fuera, sus clientes rogaban -egoístamente- que nunca fuera saciada la necesidad que lo hacía desbordarse por la oscuridad de esas calles y mantener así saciada su esclavitud a ese cuerpo alquilado.
Aquella noche se acercó legalmente por una de esas esquinas que abren el camino de concreto entre La Plaza de Convalecencia y La Universidad el Lcdo. Ceballos Arzuela. No hace mucho había dejado de vivir en el área -claro que en ese entonces lo conocían como ya nadie le conoce, por su nombre- para ejercer su Juris Doctor, para estacionar con menos riesgo su nuevo vehículo -alegado sinónimo de un esfuerzo que lo distancia de otros esfuerzos presuntamente no tan superiores pero evidentemente no tan bien remunerados; para vivir cerca de gente con la que pueda hablar a un nivel profesional pero con la que rara vez interactuaba, para esconder detrás de cierta ropa ciertos manerismos vulgares, para evolucionar entre otras cosas -porque la evolución tiene que ser constatable en materia-. Su salida del recinto de El Recinto no había sido hace mucho, su auto de lujo aún tocaba música de Silvio Rodríguez -hay contradicciones en la vida tan fuertes, yo no sé-. Antes nunca encontró el tiempo ni el interés para conocer el área, ni las áreas que mutan y mutilan según la hora del día o de la noche. El era un hombre escueto, de facciones suaves, de sonrisa perfecta, de vello femenino y aspecto casi impúber, piel rosada, boca rosada, ojos rosados, ano rosado. Tenía el don de la palabra, como buen abogado hallaba siempre la palabra perfecta. Tenía por novia a una compañera de estudios, ahora colega, también rosada, con quien tenía planes a falta de planes, todo parecía perfecto hasta que pasó por la Calle Brumbraugh y montó a Lisandro; comenzó a respirar profundo, padeció frío y tembló, su mirada era constante.
La embriaguez erótica que ahogaba al Lcdo. Ceballos Arzuela no era más que un desdoblamiento de su timidez. Lisandro tomó control de la escena en aquel cuarto de motel al que con frecuencia le dirigía la noche. Como la de un palomo que no ha volado, Lisandro entendió la inexperiencia de su compañía quién dejó la música del auto sonando para no escuchar y que no le escucharan las voces vecinas por el alegado temor a ser reconocido. No era de su oficio tener cuidado ni ser sutil pero este cazador que lo había llevado consigo para su placer ahora no dejaba de temblar y se volvía una presa. Le abrazó y le dijo que no temiera, que estaría bien, que él sabía lo que hacía. Guió con sus manos las de él y las llevó a explorar lo abultado de sus contornos y la gigantez de los espacios que se abrían entre su musculatura. El licenciado perdía toda cordura, Lisandro se sabía el primer hombre y la ingenuidad rosada de aquel hombre nuevo y rosado que temblaba de deseo no le permitió ser indiferente y lo sometió a su fuerza como se disciplina a un niño. No recibió resistencia a su brutalidad cuando su brutalidad estalló y toreó con toda furia embistiendo sin piedad contra este cazador victimizado que lo miraba con ojos cristalizados como se miran las luces cegadoras. Lisandro sintió algo que entendió como al odio pero que no era odio. Vio en este hombre rosado a todos lo hombres rosados que han intercambiado bienes con él y no podía entender que recibiera su rudeza como una bendición, el licenciado no se rendía ante el embate y parecía desearlo a merced del daño, a merced de la sangre que evidentemente vendría y vino. No había más que hacer entre aquellos cuerpos derrotados que continuaban dando la batalla de la embestida. No reconoció la rudeza límite alguno y no hubo agresión o caricia que por venir de tanta hermosura no fuera con beneplácito recibida. El tierno palomo rosado ya desfallecía extasiado y en sus ojos se leía una invitación a ser polvo, polvo enamorado. Lisandro mordía con más fuerza la piel de su carnada que sangraba y le recibía. Lo devoró a pedazos.
El cuerpo del exceso ha consumido al cuerpo de la ley, la ley que en su afán de control ha reconocido el deseo del exceso.
Lisandro salió asustado dejando los restos del cuerpo mordisqueado tendido en piezas sobre la cama. Se montó en el auto aún desnudo, su cuerpo estaba ensalivado, ensangrentado, llevaba dentro y fuera parte de aquel otro cuerpo pero la lluvia se encargó de limpiarlo a medias. La música en el auto aún tocaba, justamente la canción favorita del licenciado.
"...Ojalá se te acabe la mirada constante, la palabra precisa, la sonrisa perfecta. Ojalá pase algo que te borre de pronto, una luz cegadora, un disparo de nieve. Ojalá por lo menos que me lleve la muerte para no verte tanto para no verte siempre en todos los segundos, en todas las visiones. Ojalá que no pueda tocarte ni en canciones. Ojalá pase algo que te borre de pronto..."
Y hasta aquí hemos llegado con la inmensa obra de Ángel Antonio Ruiz Laboy, que personalmente, me ha gustado y desde ya, admiro.
Próximo autor, en este caso, autora: ANA MARÍA FUSTER LAVÍN
_________________
“Como siempre; apenas uno pone los pies en la tierra
se acaba la diversión”.
se acaba la diversión”.
"Mafalda"
Pascual Lopez Sanchez- Administrador-Moderador
- Cantidad de envíos : 91082
Fecha de inscripción : 29/06/2009
Edad : 72
Localización : Murcia / Muchas veces en Mazarrón/ Algunas en Cieza ( amo la ciudad donde nací; amo su río - Río Segura_ y amo sus montes secos llenos de espartizales)
"... la pradera y sus manteles convidada
la boca abierta
la leche amamantada
desde un clavel morado que se frunce
flor mamífera
boca callada." (Ángel Antonio Ruíz Laboy)
Sin Comentario: ante la maestría uno lee, respira profundamente, permite que los versos entren por los poros. ¡Y calla"
Me callo, pues.
Besos.
la boca abierta
la leche amamantada
desde un clavel morado que se frunce
flor mamífera
boca callada." (Ángel Antonio Ruíz Laboy)
Sin Comentario: ante la maestría uno lee, respira profundamente, permite que los versos entren por los poros. ¡Y calla"
Me callo, pues.
Besos.
_________________
"LOS DEMÁS TAMBIÉN EXISTIMOS"
NETANYAHU ASESINO
ISRAEL: ¡GENOCIDA! LA HISTORIA HABRÁ DE LLEVARLOS ANTE LA CORTE PENAL INTERNACIONAL POR CONTINUADOS CRÍMMENES DE GUERRA
Pascual Lopez Sanchez- Administrador-Moderador
- Cantidad de envíos : 91082
Fecha de inscripción : 29/06/2009
Edad : 72
Localización : Murcia / Muchas veces en Mazarrón/ Algunas en Cieza ( amo la ciudad donde nací; amo su río - Río Segura_ y amo sus montes secos llenos de espartizales)
POESÍA SOCIAL. PUERTO RICO
JOSÉ AGUSTÍN BALSEIRO
LA PUREZA CAUTIVA (Poemas de 1927 -1937)
I
SONETOS:
p)
ARTE DE VIDA
Remanso dulce de escondida vena
donde las gracias del amor esquivas:
mi ansiedad se hace mármol, y serena
recogerá tus ondas fugitivas.
Cuando la fuente de cristales plena
se rompa en chorros de canciones vivas,
aprehenderé tus voces de sirena
sin apagar tus músicas lascivas.
Ni un solo acento de calor humano
sabrá de duelo entre las finas redes
si la quietud de mi prisión te toca:
que cada beso de tu amor lozano
hará gemas de luz de las mercedes
y estuche de emoción de cada boca.
JOSÉ AGUSTÍN BALSEIRO
LA PUREZA CAUTIVA (Poemas de 1927 -1937)
I
SONETOS:
p)
ARTE DE VIDA
Remanso dulce de escondida vena
donde las gracias del amor esquivas:
mi ansiedad se hace mármol, y serena
recogerá tus ondas fugitivas.
Cuando la fuente de cristales plena
se rompa en chorros de canciones vivas,
aprehenderé tus voces de sirena
sin apagar tus músicas lascivas.
Ni un solo acento de calor humano
sabrá de duelo entre las finas redes
si la quietud de mi prisión te toca:
que cada beso de tu amor lozano
hará gemas de luz de las mercedes
y estuche de emoción de cada boca.
_________________
"LOS DEMÁS TAMBIÉN EXISTIMOS"
NETANYAHU ASESINO
ISRAEL: ¡GENOCIDA! LA HISTORIA HABRÁ DE LLEVARLOS ANTE LA CORTE PENAL INTERNACIONAL POR CONTINUADOS CRÍMMENES DE GUERRA
Pascual Lopez Sanchez- Administrador-Moderador
- Cantidad de envíos : 91082
Fecha de inscripción : 29/06/2009
Edad : 72
Localización : Murcia / Muchas veces en Mazarrón/ Algunas en Cieza ( amo la ciudad donde nací; amo su río - Río Segura_ y amo sus montes secos llenos de espartizales)
POESÍA SOCIAL. PUERTO RICO
JOSÉ AGUSTÍN BALSEIRO
LA PUREZA CAUTIVA (Poemas de 1927 -1937)
I
SONETOS:
q)
COMO UNA LLAMA
Catador esencial de la hora plena,
el amor fué mi gloria y mi pecado:
que cada instante de placer y pena
fuè la flor de lo mucho que yohe amado.
Bajo la frente de visión serena,
cada afán fué un ardor encadenado:
como en la playa de sedante arena
calma el mar su ansiedad, no su pasado.
Di la vida y la fe, como una llama,
al corazón de la mujer, rendido:
que el amor que se entrega cuando ama
para alumbrar y consumirse a una,
es el único amor que he conocido
para eterno dolor de mi fortuna.
JOSÉ AGUSTÍN BALSEIRO
LA PUREZA CAUTIVA (Poemas de 1927 -1937)
I
SONETOS:
q)
COMO UNA LLAMA
Catador esencial de la hora plena,
el amor fué mi gloria y mi pecado:
que cada instante de placer y pena
fuè la flor de lo mucho que yohe amado.
Bajo la frente de visión serena,
cada afán fué un ardor encadenado:
como en la playa de sedante arena
calma el mar su ansiedad, no su pasado.
Di la vida y la fe, como una llama,
al corazón de la mujer, rendido:
que el amor que se entrega cuando ama
para alumbrar y consumirse a una,
es el único amor que he conocido
para eterno dolor de mi fortuna.
_________________
"LOS DEMÁS TAMBIÉN EXISTIMOS"
NETANYAHU ASESINO
ISRAEL: ¡GENOCIDA! LA HISTORIA HABRÁ DE LLEVARLOS ANTE LA CORTE PENAL INTERNACIONAL POR CONTINUADOS CRÍMMENES DE GUERRA
Pascual Lopez Sanchez- Administrador-Moderador
- Cantidad de envíos : 91082
Fecha de inscripción : 29/06/2009
Edad : 72
Localización : Murcia / Muchas veces en Mazarrón/ Algunas en Cieza ( amo la ciudad donde nací; amo su río - Río Segura_ y amo sus montes secos llenos de espartizales)
POESÍA SOCIAL. PUERTO RICO
JOSÉ AGUSTÍN BALSEIRO
LA PUREZA CAUTIVA (Poemas de 1927 -1937)
I
SONETOS:
r)
ÍNTIMO FUEGO
No sé si en competencia con tu mano
podrán tus ojos conquistar la palma:
aquélla es guía en el sendero humano,
y éstos son lazarillos para mi alma.
Tu Boca es flor en mi jardín profano,
tu frente fruto de madura calma:
era al mismo tiempo cotidiano
tesoro y maravilla que me ensalma.
Tu aire arrogante indiferencia finge
con el misterio oculto de la esfinge
que invita a meditar en su sosiego;
mas bajo el aire de quietud sin pena,
es un caudal de ardores cada vena
desbordada en un mar de íntimo fuego.
JOSÉ AGUSTÍN BALSEIRO
LA PUREZA CAUTIVA (Poemas de 1927 -1937)
I
SONETOS:
r)
ÍNTIMO FUEGO
No sé si en competencia con tu mano
podrán tus ojos conquistar la palma:
aquélla es guía en el sendero humano,
y éstos son lazarillos para mi alma.
Tu Boca es flor en mi jardín profano,
tu frente fruto de madura calma:
era al mismo tiempo cotidiano
tesoro y maravilla que me ensalma.
Tu aire arrogante indiferencia finge
con el misterio oculto de la esfinge
que invita a meditar en su sosiego;
mas bajo el aire de quietud sin pena,
es un caudal de ardores cada vena
desbordada en un mar de íntimo fuego.
_________________
"LOS DEMÁS TAMBIÉN EXISTIMOS"
NETANYAHU ASESINO
ISRAEL: ¡GENOCIDA! LA HISTORIA HABRÁ DE LLEVARLOS ANTE LA CORTE PENAL INTERNACIONAL POR CONTINUADOS CRÍMMENES DE GUERRA
Pascual Lopez Sanchez- Administrador-Moderador
- Cantidad de envíos : 91082
Fecha de inscripción : 29/06/2009
Edad : 72
Localización : Murcia / Muchas veces en Mazarrón/ Algunas en Cieza ( amo la ciudad donde nací; amo su río - Río Segura_ y amo sus montes secos llenos de espartizales)
POESÍA SOCIAL. PUERTO RICO
JOSÉ AGUSTÍN BALSEIRO
LA PUREZA CAUTIVA (Poemas de 1927 -1937)
I
SONETOS:
rr)
LA HORA PRECISA
¿Por qué de Venus el ardor detienes
al iniciar apenas su ventura
cuando de amor las palpitantes sienes
yunques son abrasados de locura?
¿Por qué si amante la caricia tienes,
fresca la boca, fácil la escultura,
te haces de pronto ramo de desdenes
que veda el azahar a mi ternura?.
Oye mi voz ante tu esquivo alarde.
Se enciende en trinos nuevos la mañana
y en volcán de pasión la vida arde.
No dejes transcurrir la hora, cobarde,
sin el tributo de tu prenda humana:
¡porque en amor, "después", siempre fue tarde!
JOSÉ AGUSTÍN BALSEIRO
LA PUREZA CAUTIVA (Poemas de 1927 -1937)
I
SONETOS:
rr)
LA HORA PRECISA
¿Por qué de Venus el ardor detienes
al iniciar apenas su ventura
cuando de amor las palpitantes sienes
yunques son abrasados de locura?
¿Por qué si amante la caricia tienes,
fresca la boca, fácil la escultura,
te haces de pronto ramo de desdenes
que veda el azahar a mi ternura?.
Oye mi voz ante tu esquivo alarde.
Se enciende en trinos nuevos la mañana
y en volcán de pasión la vida arde.
No dejes transcurrir la hora, cobarde,
sin el tributo de tu prenda humana:
¡porque en amor, "después", siempre fue tarde!
_________________
"LOS DEMÁS TAMBIÉN EXISTIMOS"
NETANYAHU ASESINO
ISRAEL: ¡GENOCIDA! LA HISTORIA HABRÁ DE LLEVARLOS ANTE LA CORTE PENAL INTERNACIONAL POR CONTINUADOS CRÍMMENES DE GUERRA
Pascual Lopez Sanchez- Administrador-Moderador
- Cantidad de envíos : 91082
Fecha de inscripción : 29/06/2009
Edad : 72
Localización : Murcia / Muchas veces en Mazarrón/ Algunas en Cieza ( amo la ciudad donde nací; amo su río - Río Segura_ y amo sus montes secos llenos de espartizales)
POESÍA SOCIAL. PUERTO RICO
JOSÉ AGUSTÍN BALSEIRO
LA PUREZA CAUTIVA (Poemas de 1927 -1937)
I
SONETOS:
s)
AUSENTE
Lastimada de amor está mi vida
sin que la alivien tus preciosas manos:
restañar sólo tú puedes la herida
hecha latido en márgenes arcanos.
Una voz de esperar estremecida
saturará los cálices lontanos
para dar a mi ruta perseguida
licor de abril en los quemantes llanos.
Mi día es noche en el logrado empeño
de a cada paso del vivir soñarte;
y en la sombra eres luz para ese sueño
que tiene siempre mi memoria llena,
pues para aquel que del amor se parte
nada es más dulce que aliviar su pena.
JOSÉ AGUSTÍN BALSEIRO
LA PUREZA CAUTIVA (Poemas de 1927 -1937)
I
SONETOS:
s)
AUSENTE
Lastimada de amor está mi vida
sin que la alivien tus preciosas manos:
restañar sólo tú puedes la herida
hecha latido en márgenes arcanos.
Una voz de esperar estremecida
saturará los cálices lontanos
para dar a mi ruta perseguida
licor de abril en los quemantes llanos.
Mi día es noche en el logrado empeño
de a cada paso del vivir soñarte;
y en la sombra eres luz para ese sueño
que tiene siempre mi memoria llena,
pues para aquel que del amor se parte
nada es más dulce que aliviar su pena.
_________________
"LOS DEMÁS TAMBIÉN EXISTIMOS"
NETANYAHU ASESINO
ISRAEL: ¡GENOCIDA! LA HISTORIA HABRÁ DE LLEVARLOS ANTE LA CORTE PENAL INTERNACIONAL POR CONTINUADOS CRÍMMENES DE GUERRA
Pascual Lopez Sanchez- Administrador-Moderador
- Cantidad de envíos : 91082
Fecha de inscripción : 29/06/2009
Edad : 72
Localización : Murcia / Muchas veces en Mazarrón/ Algunas en Cieza ( amo la ciudad donde nací; amo su río - Río Segura_ y amo sus montes secos llenos de espartizales)
POESÍA SOCIAL. PUERTO RICO
JOSÉ AGUSTÍN BALSEIRO
LA PUREZA CAUTIVA (Poemas de 1927 -1937)
II
SENSACIONES DE PATRIA
1.- LLUVIA
Lluvia recién caída
lavó las montañas.
¡Qué olor a tierra mojada!
De pronto, el alma
se llena toda de patria.
En el maizal, con el alba,
canta la moza tan clara
como el agua
que ha lavado las montañas.
(El paisaje, azul y niño,
se amamanta en la mañana.)
El arroyo jugando
barranco abajo
con la luz de los plátanos
y los naranjos.
La moza cantaba un canto
como el agüita del fresco.
A mi ladito la traje:
¡nos sobró tanto sendero!
El sol daba besos de oro
al fondo del agua.
(Más hondos fueron mis besos
que le llegaron al alma.)
El sol jugó con la arena
haciendo estrellitas áureas.
(Tembló más luz en sus ojos
dorados de amor y lágrimas.)
Bebió esencias el jilguero
entre las flores.
(No lo envidié: bebí besos
en sus labios pobres.)
El aire se embalsamó
de nísperos y ciruelas.
(Yo
con la fruta de su mano
leve, tímida y morena.)
Tarde puertorriqueña
- cielo dormido - miel y esmalte,
tierra que espera.
Hora de siesta,
brisas marinas.
Los cafetales
cuajando néctar
para mi isla.
En el panal de los valles
se vuelve azúcar mi tierra.
La noche despliega
el manto
de su misterio:
fiesta de astros,
ojos sin sueño.
Una décima a lo lejos:
suspirito de los campos.
Distancia...
Olor a tierra mojada.
¡De pronto, el alma
se llena toda de patria!
JOSÉ AGUSTÍN BALSEIRO
LA PUREZA CAUTIVA (Poemas de 1927 -1937)
II
SENSACIONES DE PATRIA
1.- LLUVIA
Lluvia recién caída
lavó las montañas.
¡Qué olor a tierra mojada!
De pronto, el alma
se llena toda de patria.
En el maizal, con el alba,
canta la moza tan clara
como el agua
que ha lavado las montañas.
(El paisaje, azul y niño,
se amamanta en la mañana.)
El arroyo jugando
barranco abajo
con la luz de los plátanos
y los naranjos.
La moza cantaba un canto
como el agüita del fresco.
A mi ladito la traje:
¡nos sobró tanto sendero!
El sol daba besos de oro
al fondo del agua.
(Más hondos fueron mis besos
que le llegaron al alma.)
El sol jugó con la arena
haciendo estrellitas áureas.
(Tembló más luz en sus ojos
dorados de amor y lágrimas.)
Bebió esencias el jilguero
entre las flores.
(No lo envidié: bebí besos
en sus labios pobres.)
El aire se embalsamó
de nísperos y ciruelas.
(Yo
con la fruta de su mano
leve, tímida y morena.)
Tarde puertorriqueña
- cielo dormido - miel y esmalte,
tierra que espera.
Hora de siesta,
brisas marinas.
Los cafetales
cuajando néctar
para mi isla.
En el panal de los valles
se vuelve azúcar mi tierra.
La noche despliega
el manto
de su misterio:
fiesta de astros,
ojos sin sueño.
Una décima a lo lejos:
suspirito de los campos.
Distancia...
Olor a tierra mojada.
¡De pronto, el alma
se llena toda de patria!
_________________
"LOS DEMÁS TAMBIÉN EXISTIMOS"
NETANYAHU ASESINO
ISRAEL: ¡GENOCIDA! LA HISTORIA HABRÁ DE LLEVARLOS ANTE LA CORTE PENAL INTERNACIONAL POR CONTINUADOS CRÍMMENES DE GUERRA
Pascual Lopez Sanchez- Administrador-Moderador
- Cantidad de envíos : 91082
Fecha de inscripción : 29/06/2009
Edad : 72
Localización : Murcia / Muchas veces en Mazarrón/ Algunas en Cieza ( amo la ciudad donde nací; amo su río - Río Segura_ y amo sus montes secos llenos de espartizales)
POESÍA SOCIAL. PUERTO RICO
JOSÉ AGUSTÍN BALSEIRO
LA PUREZA CAUTIVA (Poemas de 1927 -1937)
II
SENSACIONES DE PATRIA (*)
(*) Una última anotación esta mañana.
Los poemas de LA PUREZA CAUTIVA los estoy obteniendo de diferentes fuentes.. Creo que los sonetos están todos. Dudo, sin embargo, poder conseguir todos los poemas de Sensaciones Patrias.
Insisto en que no he encontrado ninguna fuente digitalizada de donde poder copiar y pegar. Todos los poemas, uno a uno, son resultado de la Labor de copiar a mano y luego pasar al Foro. Este , nuestro FORO, será después la mayor fuente de información de poesía hispanoamericana. Lluvia y yo damos fe de ello... Y nuestros nuevos colaboradores también.
JOSÉ AGUSTÍN BALSEIRO
LA PUREZA CAUTIVA (Poemas de 1927 -1937)
II
SENSACIONES DE PATRIA (*)
(*) Una última anotación esta mañana.
Los poemas de LA PUREZA CAUTIVA los estoy obteniendo de diferentes fuentes.. Creo que los sonetos están todos. Dudo, sin embargo, poder conseguir todos los poemas de Sensaciones Patrias.
Insisto en que no he encontrado ninguna fuente digitalizada de donde poder copiar y pegar. Todos los poemas, uno a uno, son resultado de la Labor de copiar a mano y luego pasar al Foro. Este , nuestro FORO, será después la mayor fuente de información de poesía hispanoamericana. Lluvia y yo damos fe de ello... Y nuestros nuevos colaboradores también.
_________________
"LOS DEMÁS TAMBIÉN EXISTIMOS"
NETANYAHU ASESINO
ISRAEL: ¡GENOCIDA! LA HISTORIA HABRÁ DE LLEVARLOS ANTE LA CORTE PENAL INTERNACIONAL POR CONTINUADOS CRÍMMENES DE GUERRA
Angel Salas- Baneado
- Cantidad de envíos : 20415
Fecha de inscripción : 29/09/2009
Edad : 70
Localización : Santiago - Chile
POESÍA SOCIAL. PUERTO RICO
Felipe N. Arana
— Regreso del jíbaro —
¡Tierra del morador de la montaña
que la avaricia sedujera un día,
y desahuciando al ñame y la yautía
cerró el atrecho y te sembró de caña!
¡Tierra que profanó la telaraña
que traza el “Caterpillar”! ¡Tierra mía!
¡Tierra-Cristo, que el déspota exprimía
para extraer riquezas de tu entraña!
¡Tierra del panapén, tierra del guano,
volverás a sentir la noble mano
del campesino montaraz y adusto
devolviendo caricias por tus mieses
y lograrás estar. como otras veces,
llena de amor, y parirás a gusto!
¡Tierra del abra honda y la maleza,
tierra del batatal y del repecho,
ofrece la tibieza de tu pecho
al jíbaro exilado que regresa!
¡Vuelve a llevar verduras a su mesa
que a ese preciado bien tiene derecho,
y pronto vas a oír, en tu provecho,
las coplas que disipen tu tristeza!
Ya el boricua dejó de ser esclavo
del oprobioso y pertinaz centavo.
Hará que todo el mundo te respete,
al extremo, que si te ve ultrajada,
echando a un lado la prudente azada,
defenderá tu honor con el machete.
Angel Salas- Baneado
- Cantidad de envíos : 20415
Fecha de inscripción : 29/09/2009
Edad : 70
Localización : Santiago - Chile
POESÍA SOCIAL. PUERTO RICO
Felipe N. Arana
— Seña Chencha —
Es negra, descendiente de rollizos.
Teje esteras y sombreros de paja.
Lee los viernes la suerte en la baraja,
pega ventosas y prepara hechizos.
Su cabeza la oculta roja faja.
Trenzas y polizón lleva postizos,
y le vende a los novios primerizos
sus recetas. Cosa de gente baja.
Aunque es vieja le quedan todavía,
dos colmillos en la inferior encía.
Siempre por distraída que se vea,
si en la conversación que alguien enhebra
oye mentar la bíblica culebra
se apresura a decir: "Lagarto sea".
Felipe N. Arana
— Seña Chencha —
Es negra, descendiente de rollizos.
Teje esteras y sombreros de paja.
Lee los viernes la suerte en la baraja,
pega ventosas y prepara hechizos.
Su cabeza la oculta roja faja.
Trenzas y polizón lleva postizos,
y le vende a los novios primerizos
sus recetas. Cosa de gente baja.
Aunque es vieja le quedan todavía,
dos colmillos en la inferior encía.
Siempre por distraída que se vea,
si en la conversación que alguien enhebra
oye mentar la bíblica culebra
se apresura a decir: "Lagarto sea".
Samara Acosta- Cantidad de envíos : 3488
Fecha de inscripción : 10/01/2011
Localización : Madrid
Poesía Puerto Rico
Alejandrina Benítez de Gautier
El cable submarino
Volvedme el arpa que en mejores días
Corporizó mis gratas impresiones,
y huyan por siempre pálidas, sombrías,
de la inercia, fatídicas visiones.
¡Volvedme el arpa: y vuele el pensamiento
tras la estela divina que lo encanta.
Brote libre el sublime sentimiento
que murmura en mi seno, canta, canta!
Jamás en los arcanos del destino
vi tan bella, magnífica primeza:
ya no eres Patria, ilota peregrino,
tu vida intelectual desde hoy empieza.
Ondina de los mares de occidente,
desplega el manto que bordó Pomona.
Levanta al cielo tu virgínea frente,
ciñe de palmas eternal corona.
Y saluda al progreso que en tu arena
posó su egregia, su creadora planta,
que de Morse el invento te encadena
al siglo, que a los siglos adelanta.
Ya no eres tú la virgen solitaria
de agreste monte en áspero recodo,
eres de un porvenir depositaria,
parte viviente de un inmenso todo.
Las ciencias y las artes en tu seno
Ansían ya deponer rica simiente,
el comercio y la industria campo ameno
dar a tu ociosa juventud valiente.
Corre en pos de los triunfos generosos
que conquista inmortal el pensamiento,
no hay en el mundo timbres más gloriosos
que los timbres insignes del talento.
Cubre del tiempo el polvo aborrecido
de los héroes invictos la victoria,
y no pasa los lindes del olvido
del monarca mayor la humana gloria.
Pero aquellos que grandes consagraron
a lo útil, a lo bello su existencia,
el olvido y la muerte dominaron
en alas de su excelsa inteligencia.
Aún sueña el alma en éxtasis divino
ver ondear las banderas españolas,
y contempla asombrada al Gran Marino
que hizo surgir un mundo de olas.
Aún escucha anhelante mi deseo
entre el rumor de muchedumbre aleve,
cual repite impasible Galileo:
“Es la tierra no más la que se mueve.”
Y miro al inmortal americano
levantar a los cielos su cabeza
y señalar al rayo con su mano
oscura tumba a su fatal grandeza.
Y en transporte de amor y de entusiasmo
sigo de Guttenberg el movimiento,
que rompe para siempre el frío marasmo
que la ignorancia impuso al pensamiento.
Y veo radiante cual luz febea
vertiendo aroma, encanto y armonía,
esos reyes divinos de la idea,
los hijos del amor y la poesía.
Verdi, Mozart, y Calderón y el Tasso,
de los siglos magníficas estrellas.
vosotros no tendréis jamás ocaso,
no borrará la muerte vuestras huellas.
Ni la vuestra, pintores inspirados,
que atesoráis gigantes concepciones:
no mueren los que fueron señalados
para copiar de Dios bellas creaciones.
Y tú, Morse, que mundos encadenas
con vínculos de amor y movimiento,
que las leyes de Dios rápido llenas
y agrandas el humano pensamiento:
¡tú vivirás en tanto que profundo
circule el mar al universo entero:
has grabado tu nombre en todo el mundo
y eres entre los grandes el primero!
Alejandrina Benítez de Gautier
El cable submarino
Volvedme el arpa que en mejores días
Corporizó mis gratas impresiones,
y huyan por siempre pálidas, sombrías,
de la inercia, fatídicas visiones.
¡Volvedme el arpa: y vuele el pensamiento
tras la estela divina que lo encanta.
Brote libre el sublime sentimiento
que murmura en mi seno, canta, canta!
Jamás en los arcanos del destino
vi tan bella, magnífica primeza:
ya no eres Patria, ilota peregrino,
tu vida intelectual desde hoy empieza.
Ondina de los mares de occidente,
desplega el manto que bordó Pomona.
Levanta al cielo tu virgínea frente,
ciñe de palmas eternal corona.
Y saluda al progreso que en tu arena
posó su egregia, su creadora planta,
que de Morse el invento te encadena
al siglo, que a los siglos adelanta.
Ya no eres tú la virgen solitaria
de agreste monte en áspero recodo,
eres de un porvenir depositaria,
parte viviente de un inmenso todo.
Las ciencias y las artes en tu seno
Ansían ya deponer rica simiente,
el comercio y la industria campo ameno
dar a tu ociosa juventud valiente.
Corre en pos de los triunfos generosos
que conquista inmortal el pensamiento,
no hay en el mundo timbres más gloriosos
que los timbres insignes del talento.
Cubre del tiempo el polvo aborrecido
de los héroes invictos la victoria,
y no pasa los lindes del olvido
del monarca mayor la humana gloria.
Pero aquellos que grandes consagraron
a lo útil, a lo bello su existencia,
el olvido y la muerte dominaron
en alas de su excelsa inteligencia.
Aún sueña el alma en éxtasis divino
ver ondear las banderas españolas,
y contempla asombrada al Gran Marino
que hizo surgir un mundo de olas.
Aún escucha anhelante mi deseo
entre el rumor de muchedumbre aleve,
cual repite impasible Galileo:
“Es la tierra no más la que se mueve.”
Y miro al inmortal americano
levantar a los cielos su cabeza
y señalar al rayo con su mano
oscura tumba a su fatal grandeza.
Y en transporte de amor y de entusiasmo
sigo de Guttenberg el movimiento,
que rompe para siempre el frío marasmo
que la ignorancia impuso al pensamiento.
Y veo radiante cual luz febea
vertiendo aroma, encanto y armonía,
esos reyes divinos de la idea,
los hijos del amor y la poesía.
Verdi, Mozart, y Calderón y el Tasso,
de los siglos magníficas estrellas.
vosotros no tendréis jamás ocaso,
no borrará la muerte vuestras huellas.
Ni la vuestra, pintores inspirados,
que atesoráis gigantes concepciones:
no mueren los que fueron señalados
para copiar de Dios bellas creaciones.
Y tú, Morse, que mundos encadenas
con vínculos de amor y movimiento,
que las leyes de Dios rápido llenas
y agrandas el humano pensamiento:
¡tú vivirás en tanto que profundo
circule el mar al universo entero:
has grabado tu nombre en todo el mundo
y eres entre los grandes el primero!
Samara Acosta- Cantidad de envíos : 3488
Fecha de inscripción : 10/01/2011
Localización : Madrid
Poesía Puerto Rico
Alejandrina Benítez de Gautier
Buscando a Dios
Dó se oculta ese Ser omnipotente
que rige de los mundos la armonía?
Le busca en todo con ardor mi mente;
Le busca en todo ansiosa el alma mía:
Le busca en el bramar de la tormenta;
del Océano en las olas encrespadas;
de la tarde en la luz amarillenta;
del torrente en las aguas desatadas:
Le busca al relucir un bello día;
de la luna en los rayos tembladores;
del viento en la silvestre melodía;
y en el perfume de las puras flores:
Le busca entre las dudas horrorosas,
que agitan sin cesar mi pensamiento:
¡en mis noches de insomnio dolorosas
le llamo con profundo desaliento!
Lloré y gemí: mi voz enronquecida
en los ecos del templo resonaba;
¡ pero el Autor eterno de la vida
Sola conmigo misma me dejaba!
Recorrí delirante las llanuras;
a la cumbre, subí de alta montaña;
y allí, imploré al Señor de las alturas:
al que consuela siempre y nunca engaña.
¡Sólo vi el huracán!, raudo, iracundo,
bajar el rayo en giros turbulentos;
en sus ejes temblar medrosa el mundo
y en combate infernal los elementos.
Perdióse el cielo entre la bruma oscura
que encapotaba al tenebroso día;
llegó la negra noche y su pavura
dobló del huracán la furia impía.
Y, de ese caos en el horror sublime,
medité, con el ánimo sereno,
cuando parece que la tierra gime
al retumbar lejano el sordo trueno.
Y fresca, sonrosada y apacible
cual doncella de puro pensamiento,
salió la Aurora, y me encontró impasible
como estuve impasible al recio viento:
Que era más fuerte el delirar insano,
que atormentaba el pensamiento mío;
¡del alma, que a su Dios buscaba en vano,
más profundo y cruel el desvarió!
Si te imploré, Señor, a cada instante;
si no negué piedad al mal ajeno:
si en perdonar agravios fuí constante,
¿por qué en mi cáliz encontré veneno?
¿Por qué falto el encanto de mi vida?
¿Por qué en tinieblas densas me dejaste?
¿Por qué tan crudamente he sido herida?
¡Por qué, por qué, mi Dios, me abandonaste!
Cuando tu Sol se eleva en el oriente;
cuando toca al cenit su carro de oro;
cuando en el mar esconde se alma frente,
en soledad profunda triste lloro;
naturaleza ofrece a mi mirada
de su libro inmortal las bellas hojas;
con su grandeza mido, exasperada,
de mi dolor las míseras congojas;
comparo de ese mar la inmensa fuerza;
de eso mundos el mágico concierto
y de esos astros la eternal belleza
con este corazón mustio y desierto:
Y te imploro, Señor, en mi demencia,
¡por qué mi fe se pierde en un abismo,
al contemplar tan pobre la existencia
del Ser que hiciste a imagen de ti mismo!
Descienda sobre mí tu sacro aliento;
sienta que existe el Dios a quien adoro:
Ven y rige mi propio pensamiento;
ven y recibe mi angustioso lloro.
Este amargo y continuo pensamiento
va secando las fuentes de mi vida:
¡El que no tiene paz, ni halla contento,
es planta por los vientos combatida!
Sólo que puede ampararla el Infinito;
El que es de amor eterno manantial;
¡Dios de bondad, escucha Tú mi grito,
Ábreme ya tu seno paternal!
Ya te siento venir… rasgóse el velo,
que puso a mi razón hado enemigo…
Ya te siento venir… se abrió tu cielo:
¡Señor del universo, te bendigo!
Alejandrina Benítez de Gautier
Buscando a Dios
Dó se oculta ese Ser omnipotente
que rige de los mundos la armonía?
Le busca en todo con ardor mi mente;
Le busca en todo ansiosa el alma mía:
Le busca en el bramar de la tormenta;
del Océano en las olas encrespadas;
de la tarde en la luz amarillenta;
del torrente en las aguas desatadas:
Le busca al relucir un bello día;
de la luna en los rayos tembladores;
del viento en la silvestre melodía;
y en el perfume de las puras flores:
Le busca entre las dudas horrorosas,
que agitan sin cesar mi pensamiento:
¡en mis noches de insomnio dolorosas
le llamo con profundo desaliento!
Lloré y gemí: mi voz enronquecida
en los ecos del templo resonaba;
¡ pero el Autor eterno de la vida
Sola conmigo misma me dejaba!
Recorrí delirante las llanuras;
a la cumbre, subí de alta montaña;
y allí, imploré al Señor de las alturas:
al que consuela siempre y nunca engaña.
¡Sólo vi el huracán!, raudo, iracundo,
bajar el rayo en giros turbulentos;
en sus ejes temblar medrosa el mundo
y en combate infernal los elementos.
Perdióse el cielo entre la bruma oscura
que encapotaba al tenebroso día;
llegó la negra noche y su pavura
dobló del huracán la furia impía.
Y, de ese caos en el horror sublime,
medité, con el ánimo sereno,
cuando parece que la tierra gime
al retumbar lejano el sordo trueno.
Y fresca, sonrosada y apacible
cual doncella de puro pensamiento,
salió la Aurora, y me encontró impasible
como estuve impasible al recio viento:
Que era más fuerte el delirar insano,
que atormentaba el pensamiento mío;
¡del alma, que a su Dios buscaba en vano,
más profundo y cruel el desvarió!
Si te imploré, Señor, a cada instante;
si no negué piedad al mal ajeno:
si en perdonar agravios fuí constante,
¿por qué en mi cáliz encontré veneno?
¿Por qué falto el encanto de mi vida?
¿Por qué en tinieblas densas me dejaste?
¿Por qué tan crudamente he sido herida?
¡Por qué, por qué, mi Dios, me abandonaste!
Cuando tu Sol se eleva en el oriente;
cuando toca al cenit su carro de oro;
cuando en el mar esconde se alma frente,
en soledad profunda triste lloro;
naturaleza ofrece a mi mirada
de su libro inmortal las bellas hojas;
con su grandeza mido, exasperada,
de mi dolor las míseras congojas;
comparo de ese mar la inmensa fuerza;
de eso mundos el mágico concierto
y de esos astros la eternal belleza
con este corazón mustio y desierto:
Y te imploro, Señor, en mi demencia,
¡por qué mi fe se pierde en un abismo,
al contemplar tan pobre la existencia
del Ser que hiciste a imagen de ti mismo!
Descienda sobre mí tu sacro aliento;
sienta que existe el Dios a quien adoro:
Ven y rige mi propio pensamiento;
ven y recibe mi angustioso lloro.
Este amargo y continuo pensamiento
va secando las fuentes de mi vida:
¡El que no tiene paz, ni halla contento,
es planta por los vientos combatida!
Sólo que puede ampararla el Infinito;
El que es de amor eterno manantial;
¡Dios de bondad, escucha Tú mi grito,
Ábreme ya tu seno paternal!
Ya te siento venir… rasgóse el velo,
que puso a mi razón hado enemigo…
Ya te siento venir… se abrió tu cielo:
¡Señor del universo, te bendigo!
Samara Acosta- Cantidad de envíos : 3488
Fecha de inscripción : 10/01/2011
Localización : Madrid
Querido Pascual, gracias por tus palabras. Ya me gustaría tener tiempo para participar mucho más de lo que lo hago, que es nada. También os felicito a Ti y a Lluvia por vuestro trabajo. Un abrazote para los dos
Walter Faila- Fundador del Foro
- Cantidad de envíos : 20790
Fecha de inscripción : 12/04/2009
Edad : 62
Localización : Santiago Del Estero
Con todo agradecimiento pero creo que se desvirtúa un poco el trabajo que vengo leyendo, un autor, su biografia sus poemas y despues saltar al otro, pero eso lo maneja Pascual y Lluvia, veo que se entreveran poetas sin saber de el.-
Sería bueno la colaboración a continuación del poeta tratado. Abrazos
Sería bueno la colaboración a continuación del poeta tratado. Abrazos
_________________
Samara Acosta- Cantidad de envíos : 3488
Fecha de inscripción : 10/01/2011
Localización : Madrid
Poesía Puerto Rico
Alejandrina Benítez de Gautier
Hasta donde se sabe este fue su primer poema, fue publicado en Aguinaldo Porto-riqueño en 1843. Donde solo se incluyeron escritos de dos mujeres, la segunda fue Benecia Aguayo .
Mis ilusiones
Ilusiones lisonjeras
que yo juzgaba perdidas
¿volveréis más encendidas
a hechizar mi corazón?
Dejadme mi triste calma
y mi reposo de muerte
que no quiero de la suerte
ser juguete ni baldón.
Cuando os siento encantadoras
conmover mi fantasía
se estremece el alma mía
a un recuerdo de dolor.
A una memoria funesta
que es la corona de espina
que así a la tumba me inclina
una memoria de amor.
¡Ay! malograda esperanza
que tan pronto te perdiera.
¿Pero es acaso existencia la vida
que me ha quedado?
¡Es solo débil traslado de lo que
Llaman morir!
Impotente el pensamiento
para sacudir su pena
y de tedio el alma llena
vegeto sin sensación.
Que es la vida un arenal
para el que llega a entenderla
y es una dicha perderla
al perder una ilusión.
Cuando quebranta el destino
un sentimiento sublime
cuando la razón oprime
con su odiosa realidad.
Y la vida se parece, sin
placeres, sin encantos
el alma no tiene llantos
se acoge a la eternidad.
Y se marchita la frente
que nos cuenta veinte abriles
que no investiguen la causa
de este duro sufrimiento
es hijo del pensamiento
es un golpe a la suerte.
Dejen la victima triste
que camine lentamente
a la tumba que inclemente
la abrió la fatalidad.
Ornen su pálida frente
con diadema de amaranto
y suene en su huesa el canto
de compasiva amistad.
¡Amistad! dulce ilusión
de alma pura y sincera
¡cuán bella, cuán hechicera
mi mente te comprendió.
En los cálidos ensueños
de mi adolescencia hermosa
deidad santa y misteriosa
mi corazón te entendió.
¡Y vi la vida tan bella
reposándose en tus brazos!
y también hizo pedazos
el destino esta ilusión.
¡Oh! Benditos sean mis males
y bendita esta inquietud;
Que la vida y la salud fueran una maldición.
Alejandrina Benítez de Gautier
Hasta donde se sabe este fue su primer poema, fue publicado en Aguinaldo Porto-riqueño en 1843. Donde solo se incluyeron escritos de dos mujeres, la segunda fue Benecia Aguayo .
Mis ilusiones
Ilusiones lisonjeras
que yo juzgaba perdidas
¿volveréis más encendidas
a hechizar mi corazón?
Dejadme mi triste calma
y mi reposo de muerte
que no quiero de la suerte
ser juguete ni baldón.
Cuando os siento encantadoras
conmover mi fantasía
se estremece el alma mía
a un recuerdo de dolor.
A una memoria funesta
que es la corona de espina
que así a la tumba me inclina
una memoria de amor.
¡Ay! malograda esperanza
que tan pronto te perdiera.
¿Pero es acaso existencia la vida
que me ha quedado?
¡Es solo débil traslado de lo que
Llaman morir!
Impotente el pensamiento
para sacudir su pena
y de tedio el alma llena
vegeto sin sensación.
Que es la vida un arenal
para el que llega a entenderla
y es una dicha perderla
al perder una ilusión.
Cuando quebranta el destino
un sentimiento sublime
cuando la razón oprime
con su odiosa realidad.
Y la vida se parece, sin
placeres, sin encantos
el alma no tiene llantos
se acoge a la eternidad.
Y se marchita la frente
que nos cuenta veinte abriles
que no investiguen la causa
de este duro sufrimiento
es hijo del pensamiento
es un golpe a la suerte.
Dejen la victima triste
que camine lentamente
a la tumba que inclemente
la abrió la fatalidad.
Ornen su pálida frente
con diadema de amaranto
y suene en su huesa el canto
de compasiva amistad.
¡Amistad! dulce ilusión
de alma pura y sincera
¡cuán bella, cuán hechicera
mi mente te comprendió.
En los cálidos ensueños
de mi adolescencia hermosa
deidad santa y misteriosa
mi corazón te entendió.
¡Y vi la vida tan bella
reposándose en tus brazos!
y también hizo pedazos
el destino esta ilusión.
¡Oh! Benditos sean mis males
y bendita esta inquietud;
Que la vida y la salud fueran una maldición.
Samara Acosta- Cantidad de envíos : 3488
Fecha de inscripción : 10/01/2011
Localización : Madrid
Los poetas más conocidos ya están prácticamente en este foro, los sugeridos para mi son algo complicados, hay poetas de Puerto Rico que ni siquiera está su biografía en las redes, penoso, pero así es. Después de mucho buscar encontré este ultimo hasta ahora de Alejandrina Benítez y he tenido que copiarlo a mano pues no se puede copiar y pegar. Me ha encantado hacerlo pues me llega más así. Tienes razón Walter, si no hay seguimiento rompe la magia.
Intentaré buscar los dos poemas que faltan de Alejandrina para ponerlos seguidos y así haya continuidad. Gracias
Intentaré buscar los dos poemas que faltan de Alejandrina para ponerlos seguidos y así haya continuidad. Gracias
Pascual Lopez Sanchez- Administrador-Moderador
- Cantidad de envíos : 91082
Fecha de inscripción : 29/06/2009
Edad : 72
Localización : Murcia / Muchas veces en Mazarrón/ Algunas en Cieza ( amo la ciudad donde nací; amo su río - Río Segura_ y amo sus montes secos llenos de espartizales)
Veamos: la mayor parte de los trabajos tienen sus complejidades.
Obviando el trabajo hecho en POESÍA SOCIAL hasta ahora (España; México Nicaragua; Costa Rica; Honduras...), al llegar a PUERTO RICO , Lluvia y yo nos encontramos con un listado de 19 autores: Desde José de Diego y Benítez a Lourdes Vázquez. Sumamos después 2 más (Juan Antº. Corretjer y Clemente Soto Velázquez.) Finalmente hubo un listado más de otros 19 poetas ( desde Xavier Valcárcel a Rubén Ramos). Todo lo que hemos venido haciendo Lluvia y yo ha sido: . un autor cada uno.
Exposición biográfica.
Poemas.
Entrevistas; Artículos críticos; poética... según hemos creído que sean de más o menos interés. En eso llevamos libertad: aunque nuestra comunicación por c.e. es diaria con opiniones, intercambio de fuentes, etc.
Puesto en contacto con la Academia de las letras hispanas de Puerto Rico; nos ofrecen un nuevo listado. En ese listado están los 40 autores que nosotros ya habíamos encontrado -digamos los más conocidos- y otros 70 más. Digo 70 por no decir un número mayor ( me asusté y no quise contar...simplemente, me puse trabajar como una hormiga...).
Ángel y Samara nos han pedido participar... El trabajo es ingente: bienvenido sean. Por pura organización: el trabajo lo distribuyo yo ( aunque a fuerza de ser sincero aleatoriamente). Hay autores a los que es muy difícil sacar rendimiento. A veces, lo más fácil, es tirar la toalla. Por ejemplo
J. Agustín Balseiro : una muy amplia biografía. Pero a la hora de encontrar poemas... "El boricua ausente", repetido hasta la saciedad en todas las fuentes, como si no hubiera otra cosa... Página, tras página, tras página... hasta la desesperación. ¡Por amor de Dios, me decía, un escritor que se ha carteado con Marcelino Menéndez Pidal, debe tener más. Y finalmente encuentro un libro, aunque no me permite copiar y pegar... ¡Como una hormiga...! Y comienzo a transcribir y si os fijáis el material que llevo, se induce fácilmente que hubiera sido imperdonable no poner más que El boricua ausente.
Os pido: paciencia, tenacidad... Nuestro FORO merece nuestro empeño: HAREMOS DE ÉL LA MAYOR FUENTE DE POESÍA DE TODOS LOS TIEMPOS... Paciencia, tenacidad. Y honestidad: Las fuentes, cuando sea posible, hay que citarlas. Si no es posible: fuente desconocida ( o trabajo propio).
Gracias.
Obviando el trabajo hecho en POESÍA SOCIAL hasta ahora (España; México Nicaragua; Costa Rica; Honduras...), al llegar a PUERTO RICO , Lluvia y yo nos encontramos con un listado de 19 autores: Desde José de Diego y Benítez a Lourdes Vázquez. Sumamos después 2 más (Juan Antº. Corretjer y Clemente Soto Velázquez.) Finalmente hubo un listado más de otros 19 poetas ( desde Xavier Valcárcel a Rubén Ramos). Todo lo que hemos venido haciendo Lluvia y yo ha sido: . un autor cada uno.
Exposición biográfica.
Poemas.
Entrevistas; Artículos críticos; poética... según hemos creído que sean de más o menos interés. En eso llevamos libertad: aunque nuestra comunicación por c.e. es diaria con opiniones, intercambio de fuentes, etc.
Puesto en contacto con la Academia de las letras hispanas de Puerto Rico; nos ofrecen un nuevo listado. En ese listado están los 40 autores que nosotros ya habíamos encontrado -digamos los más conocidos- y otros 70 más. Digo 70 por no decir un número mayor ( me asusté y no quise contar...simplemente, me puse trabajar como una hormiga...).
Ángel y Samara nos han pedido participar... El trabajo es ingente: bienvenido sean. Por pura organización: el trabajo lo distribuyo yo ( aunque a fuerza de ser sincero aleatoriamente). Hay autores a los que es muy difícil sacar rendimiento. A veces, lo más fácil, es tirar la toalla. Por ejemplo
J. Agustín Balseiro : una muy amplia biografía. Pero a la hora de encontrar poemas... "El boricua ausente", repetido hasta la saciedad en todas las fuentes, como si no hubiera otra cosa... Página, tras página, tras página... hasta la desesperación. ¡Por amor de Dios, me decía, un escritor que se ha carteado con Marcelino Menéndez Pidal, debe tener más. Y finalmente encuentro un libro, aunque no me permite copiar y pegar... ¡Como una hormiga...! Y comienzo a transcribir y si os fijáis el material que llevo, se induce fácilmente que hubiera sido imperdonable no poner más que El boricua ausente.
Os pido: paciencia, tenacidad... Nuestro FORO merece nuestro empeño: HAREMOS DE ÉL LA MAYOR FUENTE DE POESÍA DE TODOS LOS TIEMPOS... Paciencia, tenacidad. Y honestidad: Las fuentes, cuando sea posible, hay que citarlas. Si no es posible: fuente desconocida ( o trabajo propio).
Gracias.
_________________
"LOS DEMÁS TAMBIÉN EXISTIMOS"
NETANYAHU ASESINO
ISRAEL: ¡GENOCIDA! LA HISTORIA HABRÁ DE LLEVARLOS ANTE LA CORTE PENAL INTERNACIONAL POR CONTINUADOS CRÍMMENES DE GUERRA
Pascual Lopez Sanchez- Administrador-Moderador
- Cantidad de envíos : 91082
Fecha de inscripción : 29/06/2009
Edad : 72
Localización : Murcia / Muchas veces en Mazarrón/ Algunas en Cieza ( amo la ciudad donde nací; amo su río - Río Segura_ y amo sus montes secos llenos de espartizales)
Te felicito Ángel...en
"Seña Chencha —
Es negra, descendiente de rollizos.
Teje esteras y sombreros de paja.
Lee los viernes la suerte en la baraja,
pega ventosas y prepara hechizos...."
tenemos un claro exponente de lo que se conoce como poesía "afro antillana" o "poesía negra" a la que nos hemos referido en varias ocasiones, y a la que tendremos que dedicarle un tiempo en su momento.
Mi gratitud. Un abrazo.
"Seña Chencha —
Es negra, descendiente de rollizos.
Teje esteras y sombreros de paja.
Lee los viernes la suerte en la baraja,
pega ventosas y prepara hechizos...."
tenemos un claro exponente de lo que se conoce como poesía "afro antillana" o "poesía negra" a la que nos hemos referido en varias ocasiones, y a la que tendremos que dedicarle un tiempo en su momento.
Mi gratitud. Un abrazo.
_________________
"LOS DEMÁS TAMBIÉN EXISTIMOS"
NETANYAHU ASESINO
ISRAEL: ¡GENOCIDA! LA HISTORIA HABRÁ DE LLEVARLOS ANTE LA CORTE PENAL INTERNACIONAL POR CONTINUADOS CRÍMMENES DE GUERRA
Walter Faila- Fundador del Foro
- Cantidad de envíos : 20790
Fecha de inscripción : 12/04/2009
Edad : 62
Localización : Santiago Del Estero
Gracias Pascual, todos pueden participar y ayudar en esta titánica labor vuestra, solo pido que se continúe con los poetas que entan tratando hasta que tu o Lluvia cambien de autor.
Ejemplo: Poeta x, iniciado y sin concluir, la colaboraciones deberían seguir siendo sobre el poeta x, hasta que tu o Lluvia lo hayan cerrado.
Digo porque se ve lindo cuando hay biografia, entrevistas y poemas de corrido y del mismo autor, sin que se corte intercalando otros autores en el medio. Es solo mi punto de vista. Desde ya mi agradecimiento a ustedes y tambien a Samara y Angel y a todos los que participen siguiendo el esquema por ti diseñado. Abrazos y gracias de nuevo a todos
Ejemplo: Poeta x, iniciado y sin concluir, la colaboraciones deberían seguir siendo sobre el poeta x, hasta que tu o Lluvia lo hayan cerrado.
Digo porque se ve lindo cuando hay biografia, entrevistas y poemas de corrido y del mismo autor, sin que se corte intercalando otros autores en el medio. Es solo mi punto de vista. Desde ya mi agradecimiento a ustedes y tambien a Samara y Angel y a todos los que participen siguiendo el esquema por ti diseñado. Abrazos y gracias de nuevo a todos
_________________
Contenido patrocinado
Hoy a las 13:47 por Maria Lua
» CECILIA MEIRELES ( POETA BRASILEÑA)
Hoy a las 13:41 por Maria Lua
» MARIO QUINTANA ( Brasil: 30/07/1906 -05/05/1994)
Hoy a las 13:40 por Maria Lua
» CARLOS DRUMMOND DE ANDRADE (Brasil, 31/10/ 1902 – 17/08/ 1987)
Hoy a las 13:38 por Maria Lua
» Stéphan Mallarmé (1842-1897)
Hoy a las 13:36 por Maria Lua
» Luís Vaz de Camões (c.1524-1580)
Hoy a las 13:33 por Maria Lua
» VICTOR HUGO (1802-1885)
Hoy a las 13:31 por Maria Lua
» Rabindranath Tagore (1861-1941)
Hoy a las 12:37 por Maria Lua
» Khalil Gibran (1883-1931)
Hoy a las 12:33 por Maria Lua
» Yalal ad-Din Muhammad Rumi (1207-1273)
Hoy a las 12:28 por Maria Lua