La hora de la estrella
En coordinación con la ASOCIACIÓN CULTURAL FORO AIRES DE LIBERTAD
ENTRAR DESDE AQUÍ
GRUPO METAFORA-EXCLUSIVO PARA SUS MIEMBROS
ENTRAR DESDE AQUÍ
ENTRAR DESDE AQUÍ
REGISTRO Nº 605538 (Madrid - España -28-05-14)
GRUPO METAFORA-EXCLUSIVO PARA SUS MIEMBROS
ENTRAR DESDE AQUÍ
FOROS DE "AIRES DE LIBERTAD"
Estadísticas
Nuestros miembros han publicado un total de 1065288 mensajes en 48380 argumentos.
Tenemos 1587 miembros registrados
El último usuario registrado es José Valverde Yuste
Comenta a tus compañeros
¿Quién está en línea?
En total hay 211 usuarios en línea: 5 Registrados, 0 Ocultos y 206 Invitados :: 3 Motores de búsqueda
cecilia gargantini, clara_fuente, Luty Molins, RafaelaDeroy, Ramón Carballal
El record de usuarios en línea fue de 1156 durante el Mar 05 Dic 2023, 16:39
Temas similares
Últimos temas
Conectarse
Comenta a tus compañeros
En coordinación con la ASOCIACIÓN CULTURAL FORO AIRES DE LIBERTAD
ENTRAR DESDE AQUÍ
GRUPO METAFORA-EXCLUSIVO PARA SUS MIEMBROS
ENTRAR DESDE AQUÍ
ENTRAR DESDE AQUÍ
REGISTRO Nº 605538 (Madrid - España -28-05-14)
GRUPO METAFORA-EXCLUSIVO PARA SUS MIEMBROS
ENTRAR DESDE AQUÍ
+5
Juan Martín
Lluvia Abril
Evangelina Valdez
Pascual Lopez Sanchez
Maria Lua
9 participantes
CLARICE LISPECTOR I ( ESCRITORA BRASILEÑA)
Maria Lua- Administrador-Moderador
- Cantidad de envíos : 76735
Fecha de inscripción : 12/04/2009
Localización : Nova Friburgo / RJ / Brasil
- Mensaje n°661
Re: CLARICE LISPECTOR I ( ESCRITORA BRASILEÑA)
Escribo porque no tengo nada que hacer en el mundo: estoy de sobra y no hay lugar para mí en la tierra de los hombres. Escribo por mi desesperación y mi cansancio, ya no soporto la rutina de ser yo, y si no existiese la novedad continua que es escribir, me moriría simbólicamente todos los días. Pero estoy preparado para salir con discreción por la puerta trasera. He experimentado casi todo, aun la pasión y su desesperanza. Ahora sólo querría tener lo que hubiera sido y no fui.
La hora de la estrella
La hora de la estrella
_________________
"Ser como un verso volando
o un ciego soñando
y en ese vuelo y en ese sueño
compartir contigo sol y luna,
siendo guardián en tu cielo
y tren de tus ilusiones."
(Hánjel)
o un ciego soñando
y en ese vuelo y en ese sueño
compartir contigo sol y luna,
siendo guardián en tu cielo
y tren de tus ilusiones."
(Hánjel)
[Tienes que estar registrado y conectado para ver esa imagen]
Maria Lua- Administrador-Moderador
- Cantidad de envíos : 76735
Fecha de inscripción : 12/04/2009
Localización : Nova Friburgo / RJ / Brasil
- Mensaje n°662
Re: CLARICE LISPECTOR I ( ESCRITORA BRASILEÑA)
Estaba profundamente derrotado por el mundo en que vivía. Y se había separado de las personas por su derrota y por sentir que los otros también eran derrotados. Él no quería formar parte de un mundo donde, por ejemplo, el rico devoraba al pobre. Como el suyo sólo le parecía un movimiento romántico, si se agregaba a los que luchaban contra el aplastamiento de la vida tal como era, entonces se cerró en una individualización que, si no tenía cuidado, podía transformarse en soledad histérica o meramente contemplativa. Mientras no llegara algo mejor, buscaba relacionarse con los otros derrotados por intermedio de una especie de amor torcido, que alcanzaba tanto a los otros como, de algún modo, a sí mismo.
Descubrimientos
Descubrimientos
_________________
"Ser como un verso volando
o un ciego soñando
y en ese vuelo y en ese sueño
compartir contigo sol y luna,
siendo guardián en tu cielo
y tren de tus ilusiones."
(Hánjel)
o un ciego soñando
y en ese vuelo y en ese sueño
compartir contigo sol y luna,
siendo guardián en tu cielo
y tren de tus ilusiones."
(Hánjel)
[Tienes que estar registrado y conectado para ver esa imagen]
Maria Lua- Administrador-Moderador
- Cantidad de envíos : 76735
Fecha de inscripción : 12/04/2009
Localización : Nova Friburgo / RJ / Brasil
- Mensaje n°663
Re: CLARICE LISPECTOR I ( ESCRITORA BRASILEÑA)
[Tienes que estar registrado y conectado para ver esa imagen]
Laços de familia / Lazos de familia
Relatos , 1960
ROCCO
A los diecinueve años, Clarice Lispector ya había publicado su primera novela: Cerca del corazón salvaje. Cuando apareció Lazos de familia tenía treinta y cinco años y cuatro libros más en su haber. A lo largo de su vida, jamás dejaría de escribir. "Yo escribo como quien sueña", había dicho. "Ahora estoy escribiendo. He muerto. Vamos a ver si renazco de nuevo", confesó en una entrevista. Si hubiera que elegir una única palabra para definirla, la elección debería recaer necesariamente en ésta: un genio. Un genio que, finalmente, ha devenido mito. Dotada de un estilo peculiar, que confiere a sus textos una mezcla de sugestión, humor y misterio, Lispector retuerce la sintaxis para mostrarnos lo esencial de las cosas. Con ella, el descubrimiento de lo cotidiano, tan próximo que no solemos advertirlo, es una aventura posible, capaz de abrir caminos hacia mundos nuevos.
_________________
"Ser como un verso volando
o un ciego soñando
y en ese vuelo y en ese sueño
compartir contigo sol y luna,
siendo guardián en tu cielo
y tren de tus ilusiones."
(Hánjel)
o un ciego soñando
y en ese vuelo y en ese sueño
compartir contigo sol y luna,
siendo guardián en tu cielo
y tren de tus ilusiones."
(Hánjel)
[Tienes que estar registrado y conectado para ver esa imagen]
Maria Lua- Administrador-Moderador
- Cantidad de envíos : 76735
Fecha de inscripción : 12/04/2009
Localización : Nova Friburgo / RJ / Brasil
- Mensaje n°664
Re: CLARICE LISPECTOR I ( ESCRITORA BRASILEÑA)
[Tienes que estar registrado y conectado para ver esa imagen]
Felicidade clandestina / Felicidad clandestina
Relatos , 1971
ROCCO
"...Fingía que no tenía el libro, sólo para después tener el sobresalto de tenerlo. Horas después lo abrí, leí algunas frases maravillosas, lo cerré de nuevo, fui a dar vueltas por la casa, demoré todavía más yendo a comer pan con manteca, fingía que no sabía dónde había guardado el libro, lo encontraba, lo abría durante unos segundos. Creaba las más falsas dificultades para aquella cosa clandestina que era la felicidad. La felicidad siempre iba a ser clandestina para mí. Parece que ya lo presentía. ¡Cuánto tardé! Vivía en el aire Había orgullo y pudor en mí. Yo era una reina delicada.
A veces me sentaba en la hamaca, meciéndome con el libro abierto en el regazo, sin tocarlo, en un éxtasis purísimo.
Ya no era una niña con un libro: era una mujer con su amante."
Incluye los relatos: Felicidad clandestina, Una amistad sincera, Miopía progresiva, Restos del carnaval, El gran paseo, Come, hijo mío, Perdonar a Dios, Tentación, El huevo y la gallina, Cien años de perdón, La legión extranjera, Los obedientes, El reparto de los panes, Una esperanza, Monos, Los desastres de Sofía, La criada, El mensaje, Boceto de niño a mano alzada, Historia de un gran amor, Las aguas del mundo, La quinta historia, Encarnación involuntaria, Dos historias a mi modo y El primer beso.
[Tienes que estar registrado y conectado para ver este vínculo]
_________________
"Ser como un verso volando
o un ciego soñando
y en ese vuelo y en ese sueño
compartir contigo sol y luna,
siendo guardián en tu cielo
y tren de tus ilusiones."
(Hánjel)
o un ciego soñando
y en ese vuelo y en ese sueño
compartir contigo sol y luna,
siendo guardián en tu cielo
y tren de tus ilusiones."
(Hánjel)
[Tienes que estar registrado y conectado para ver esa imagen]
Maria Lua- Administrador-Moderador
- Cantidad de envíos : 76735
Fecha de inscripción : 12/04/2009
Localización : Nova Friburgo / RJ / Brasil
- Mensaje n°665
Re: CLARICE LISPECTOR I ( ESCRITORA BRASILEÑA)
Desvanecimiento
[Cuento - Texto completo.]
Clarice Lispector
No es que fuéramos amigos desde hacía mucho tiempo. Nos conocimos solo en el último año de la escuela. Desde ese momento, estábamos juntos a cualquier hora. Hacía tanto tiempo que los dos necesitábamos de un amigo que no había nada que no confiásemos el uno al otro. Llegamos a un punto de amistad tal, que no podíamos guardarnos un pensamiento: uno telefoneaba al otro, conveníamos enseguida una cita. Después de la conversación nos sentíamos tan contentos como si nos hubiésemos presentado a nosotros mismos. Ese estado de comunicación continua llegó a tal exaltación que el día en que nada teníamos que contarnos, buscábamos con aflicción un tema. Solo que el tema tenía que ser grave, pues con cualquiera no podría ejercitarse la vehemencia de una sinceridad experimentada por primera vez.
Ya en ese tiempo aparecieron las primeras señales de perturbación entre nosotros. A veces uno telefoneaba, nos encontrábamos y no teníamos nada que decirnos. Éramos muy jóvenes y no sabíamos quedarnos callados. Al principio, cuando empezó a faltar tema, intentamos hablar de la gente. Pero bien sabíamos que ya estábamos adulterando el núcleo de la amistad. Intentar hablar de nuestras respectivas novias también estaba fuera de cuestión, pues un hombre no habla de sus amores. Tratamos de permanecer callados, pero nos inquietábamos, después de separarnos.
Mi soledad, al regreso de esos encuentros, era grande y árida. Llegué a leer libros solo para poder hablar de ellos. Pero una amistad sincera quería la sinceridad más pura. En busca de esta, comencé a sentirme vacío. Nuestros encuentros eran cada vez más decepcionantes. Mi sincera pobreza se revelaba lentamente. También él, yo lo sabía, llegaba al límite de sí mismo.
Fue cuando, habiéndose mi familia mudado a Sao Paulo, y viviendo él solo, pues su familia era de Piauí, lo convidé a vivir en nuestro apartamento, que quedaba bajo mi cuidado. Qué agitación en el alma. Radiantes, arrastrábamos nuestros libros y discos, preparábamos un ambiente perfecto para la amistad. Cuando todo estuvo listo, nos encontramos dentro de la casa, con los brazos caídos, mudos, llenos solo de amistad.
Queríamos tanto salvarnos uno al otro. La amistad es materia de salvación.
Pero todos los problemas ya habían sido tocados, todas las posibilidades estudiadas. Teníamos solo esa cosa que habíamos buscado sedientos hasta entonces, y al fin encontrado: una amistad sincera. Único modo, lo sabíamos, y con qué amargura lo sabíamos, de salir de la soledad que un espíritu tiene en el cuerpo.
Pero qué sintética se nos revelaba la amistad. Como si quisiéramos esparcir en un largo discurso una verdad que una palabra agotaría. Nuestra amistad era tan insoluble como la suma de dos números: inútil intentar desenvolver por más de un instante la certeza de que dos y tres son cinco.
Intentamos organizar algunas fiestas en el apartamento, pero no solo los vecinos protestaron, sino que además, no sirvió de nada.
Si al menos hubiéramos podido hacernos favores el uno al otro. Pero no había oportunidad, ni creíamos en una amistad que necesitara pruebas. Lo más que podíamos hacer era lo que hacíamos: saber que éramos amigos. Lo que no alcanzaba para llenar los días, sobre todo durante las largas vacaciones.
Comienza con esas vacaciones la verdadera aflicción.
Él, a quien yo nada podía dar, salvo mi sinceridad, él pasó a ser una acusación de mi pobreza. Además, la soledad de uno al lado de otro, escuchando música o leyendo, era mucho mayor que cuando estábamos solos. Y más que mayor, incómoda. No había paz. Cada uno se iba para su cuarto, con alivio de no tener que mirarnos.
Es verdad que hubo una pausa en el curso de los acontecimientos, una tregua que nos dio más esperanzas de las que en realidad había. Fue cuando mi amigo tuvo un pequeño problema con la Prefectura. No era grave, pero lo exageramos para usarlo mejor. Porque entonces ya habíamos caído en la facilidad de hacernos favores. Recorrí entusiasmado los despachos de los conocidos de mi familia buscando enchufes para mi amigo. Y cuando comenzó la etapa de sellar papeles, corrí por toda la ciudad: puedo decir en conciencia que no hubo firma reconocida que no pasara por mi mano.
En esa época nos encontrábamos a la noche en casa, exhaustos y animados: nos contábamos las hazañas del día, planeábamos los ataques siguientes. No profundizábamos mucho en lo que estaba ocurriendo, bastaba con que todo tuviera el sello de la amistad. Me pareció comprender por qué los novios se presentían, por qué el marido intenta dar comodidades a la esposa, y esta le prepara afanada el alimento, por qué la madre exagera los cuidados del hijo. Fue entonces, cuando, con algún sacrificio, le regalé un pequeño broche de oro a la que hoy es mi esposa. Solo mucho después iba a comprender que estar también es dar.
Concluida la cuestión con la Prefectura —todo sea dicho, con victoria nuestra—, continuamos uno al lado del otro, sin encontrar aquella palabra que cediera el alma. ¿Cediera el alma? Pero, a fin de cuentas, ¿quién quería ceder el alma? ¡Dónde vamos a parar!
Pero, al fin, ¿qué queríamos? Nada. Estábamos fatigados, desilusionados.
Con el pretexto de las vacaciones de mi familia, nos separamos. Además, él también iba a Piauí. Un apretón de manos conmovido fue nuestro adiós en el aeropuerto. Sabíamos que no nos íbamos a ver más, salvo por azar. Sabíamos más: que no queríamos volver a vernos. Y sabíamos también que éramos amigos. Amigos sinceros.
[Cuento - Texto completo.]
Clarice Lispector
No es que fuéramos amigos desde hacía mucho tiempo. Nos conocimos solo en el último año de la escuela. Desde ese momento, estábamos juntos a cualquier hora. Hacía tanto tiempo que los dos necesitábamos de un amigo que no había nada que no confiásemos el uno al otro. Llegamos a un punto de amistad tal, que no podíamos guardarnos un pensamiento: uno telefoneaba al otro, conveníamos enseguida una cita. Después de la conversación nos sentíamos tan contentos como si nos hubiésemos presentado a nosotros mismos. Ese estado de comunicación continua llegó a tal exaltación que el día en que nada teníamos que contarnos, buscábamos con aflicción un tema. Solo que el tema tenía que ser grave, pues con cualquiera no podría ejercitarse la vehemencia de una sinceridad experimentada por primera vez.
Ya en ese tiempo aparecieron las primeras señales de perturbación entre nosotros. A veces uno telefoneaba, nos encontrábamos y no teníamos nada que decirnos. Éramos muy jóvenes y no sabíamos quedarnos callados. Al principio, cuando empezó a faltar tema, intentamos hablar de la gente. Pero bien sabíamos que ya estábamos adulterando el núcleo de la amistad. Intentar hablar de nuestras respectivas novias también estaba fuera de cuestión, pues un hombre no habla de sus amores. Tratamos de permanecer callados, pero nos inquietábamos, después de separarnos.
Mi soledad, al regreso de esos encuentros, era grande y árida. Llegué a leer libros solo para poder hablar de ellos. Pero una amistad sincera quería la sinceridad más pura. En busca de esta, comencé a sentirme vacío. Nuestros encuentros eran cada vez más decepcionantes. Mi sincera pobreza se revelaba lentamente. También él, yo lo sabía, llegaba al límite de sí mismo.
Fue cuando, habiéndose mi familia mudado a Sao Paulo, y viviendo él solo, pues su familia era de Piauí, lo convidé a vivir en nuestro apartamento, que quedaba bajo mi cuidado. Qué agitación en el alma. Radiantes, arrastrábamos nuestros libros y discos, preparábamos un ambiente perfecto para la amistad. Cuando todo estuvo listo, nos encontramos dentro de la casa, con los brazos caídos, mudos, llenos solo de amistad.
Queríamos tanto salvarnos uno al otro. La amistad es materia de salvación.
Pero todos los problemas ya habían sido tocados, todas las posibilidades estudiadas. Teníamos solo esa cosa que habíamos buscado sedientos hasta entonces, y al fin encontrado: una amistad sincera. Único modo, lo sabíamos, y con qué amargura lo sabíamos, de salir de la soledad que un espíritu tiene en el cuerpo.
Pero qué sintética se nos revelaba la amistad. Como si quisiéramos esparcir en un largo discurso una verdad que una palabra agotaría. Nuestra amistad era tan insoluble como la suma de dos números: inútil intentar desenvolver por más de un instante la certeza de que dos y tres son cinco.
Intentamos organizar algunas fiestas en el apartamento, pero no solo los vecinos protestaron, sino que además, no sirvió de nada.
Si al menos hubiéramos podido hacernos favores el uno al otro. Pero no había oportunidad, ni creíamos en una amistad que necesitara pruebas. Lo más que podíamos hacer era lo que hacíamos: saber que éramos amigos. Lo que no alcanzaba para llenar los días, sobre todo durante las largas vacaciones.
Comienza con esas vacaciones la verdadera aflicción.
Él, a quien yo nada podía dar, salvo mi sinceridad, él pasó a ser una acusación de mi pobreza. Además, la soledad de uno al lado de otro, escuchando música o leyendo, era mucho mayor que cuando estábamos solos. Y más que mayor, incómoda. No había paz. Cada uno se iba para su cuarto, con alivio de no tener que mirarnos.
Es verdad que hubo una pausa en el curso de los acontecimientos, una tregua que nos dio más esperanzas de las que en realidad había. Fue cuando mi amigo tuvo un pequeño problema con la Prefectura. No era grave, pero lo exageramos para usarlo mejor. Porque entonces ya habíamos caído en la facilidad de hacernos favores. Recorrí entusiasmado los despachos de los conocidos de mi familia buscando enchufes para mi amigo. Y cuando comenzó la etapa de sellar papeles, corrí por toda la ciudad: puedo decir en conciencia que no hubo firma reconocida que no pasara por mi mano.
En esa época nos encontrábamos a la noche en casa, exhaustos y animados: nos contábamos las hazañas del día, planeábamos los ataques siguientes. No profundizábamos mucho en lo que estaba ocurriendo, bastaba con que todo tuviera el sello de la amistad. Me pareció comprender por qué los novios se presentían, por qué el marido intenta dar comodidades a la esposa, y esta le prepara afanada el alimento, por qué la madre exagera los cuidados del hijo. Fue entonces, cuando, con algún sacrificio, le regalé un pequeño broche de oro a la que hoy es mi esposa. Solo mucho después iba a comprender que estar también es dar.
Concluida la cuestión con la Prefectura —todo sea dicho, con victoria nuestra—, continuamos uno al lado del otro, sin encontrar aquella palabra que cediera el alma. ¿Cediera el alma? Pero, a fin de cuentas, ¿quién quería ceder el alma? ¡Dónde vamos a parar!
Pero, al fin, ¿qué queríamos? Nada. Estábamos fatigados, desilusionados.
Con el pretexto de las vacaciones de mi familia, nos separamos. Además, él también iba a Piauí. Un apretón de manos conmovido fue nuestro adiós en el aeropuerto. Sabíamos que no nos íbamos a ver más, salvo por azar. Sabíamos más: que no queríamos volver a vernos. Y sabíamos también que éramos amigos. Amigos sinceros.
_________________
"Ser como un verso volando
o un ciego soñando
y en ese vuelo y en ese sueño
compartir contigo sol y luna,
siendo guardián en tu cielo
y tren de tus ilusiones."
(Hánjel)
o un ciego soñando
y en ese vuelo y en ese sueño
compartir contigo sol y luna,
siendo guardián en tu cielo
y tren de tus ilusiones."
(Hánjel)
[Tienes que estar registrado y conectado para ver esa imagen]
Maria Lua- Administrador-Moderador
- Cantidad de envíos : 76735
Fecha de inscripción : 12/04/2009
Localización : Nova Friburgo / RJ / Brasil
- Mensaje n°666
Re: CLARICE LISPECTOR I ( ESCRITORA BRASILEÑA)
[Tienes que estar registrado y conectado para ver esa imagen]
A mulher que matou os peixes / La mujer que mató a los peces y otros cuentos
Narrativa juvenil / infantil , 1966
ROCCO
Infantil
¿Alguna vez has pensado sobre la misteriosa existencia de los conejos?, ¿sobre lo que piensan las gallinas cuando están a punto de acabar en un plato de mole?, ¿o sobre lo que hacemos los humanos para acabar con nuestra mascota favorita sin que haya sido nuestra intención? Clarice Lispector nos lleva a descubrir el pensamiento de algunos animales a través de un inteligente monólogo.
_________________
"Ser como un verso volando
o un ciego soñando
y en ese vuelo y en ese sueño
compartir contigo sol y luna,
siendo guardián en tu cielo
y tren de tus ilusiones."
(Hánjel)
o un ciego soñando
y en ese vuelo y en ese sueño
compartir contigo sol y luna,
siendo guardián en tu cielo
y tren de tus ilusiones."
(Hánjel)
[Tienes que estar registrado y conectado para ver esa imagen]
Maria Lua- Administrador-Moderador
- Cantidad de envíos : 76735
Fecha de inscripción : 12/04/2009
Localización : Nova Friburgo / RJ / Brasil
- Mensaje n°667
Re: CLARICE LISPECTOR I ( ESCRITORA BRASILEÑA)
_________________
"Ser como un verso volando
o un ciego soñando
y en ese vuelo y en ese sueño
compartir contigo sol y luna,
siendo guardián en tu cielo
y tren de tus ilusiones."
(Hánjel)
o un ciego soñando
y en ese vuelo y en ese sueño
compartir contigo sol y luna,
siendo guardián en tu cielo
y tren de tus ilusiones."
(Hánjel)
[Tienes que estar registrado y conectado para ver esa imagen]
Maria Lua- Administrador-Moderador
- Cantidad de envíos : 76735
Fecha de inscripción : 12/04/2009
Localización : Nova Friburgo / RJ / Brasil
- Mensaje n°668
Re: CLARICE LISPECTOR I ( ESCRITORA BRASILEÑA)
_________________
"Ser como un verso volando
o un ciego soñando
y en ese vuelo y en ese sueño
compartir contigo sol y luna,
siendo guardián en tu cielo
y tren de tus ilusiones."
(Hánjel)
o un ciego soñando
y en ese vuelo y en ese sueño
compartir contigo sol y luna,
siendo guardián en tu cielo
y tren de tus ilusiones."
(Hánjel)
[Tienes que estar registrado y conectado para ver esa imagen]
Maria Lua- Administrador-Moderador
- Cantidad de envíos : 76735
Fecha de inscripción : 12/04/2009
Localización : Nova Friburgo / RJ / Brasil
- Mensaje n°669
Re: CLARICE LISPECTOR I ( ESCRITORA BRASILEÑA)
Sin la compañía de la madre, había recuperado el modo decidido de caminar: sola, le era más fácil. Algunos hombres la miraban, ella era dulce, un poco pesada de cuerpo. Caminaba serena, moderna en los trajes, los cabellos cortos, teñidos de color caoba. Y de tal manera se habían dispuestos las cosas que el amor doloroso le pareció la felicidad —todo estaba tan vivo y tierno a su alrededor, la calle sucia, los viejos tranvías, cascaras de naranja—: la fuerza fluía y refluía en su corazón con pesada riqueza. Estaba muy bonita en ese momento, tan elegante; integrada en su época y en la ciudad en donde había nacido como si la hubiese elegido. En los ojos bizcos cualquier persona adivinaría el gusto que tenía esa mujer por las cosas del mundo Miraba a las personas con insistencia, procurando fijar en aquellas figuras mutables su placer todavía húmedo de lágrimas por la madre. Se desvió de los carros, consiguió aproximarse al bus burlando la cola, mirando con ironía; nada impedía que esa pequeña mujer, que andaba bamboleando los cuadriles, subiese otro misterioso peldaño en sus días.
Lazos de familia
(fragmento del cuento)
Lazos de familia
(fragmento del cuento)
_________________
"Ser como un verso volando
o un ciego soñando
y en ese vuelo y en ese sueño
compartir contigo sol y luna,
siendo guardián en tu cielo
y tren de tus ilusiones."
(Hánjel)
o un ciego soñando
y en ese vuelo y en ese sueño
compartir contigo sol y luna,
siendo guardián en tu cielo
y tren de tus ilusiones."
(Hánjel)
[Tienes que estar registrado y conectado para ver esa imagen]
Maria Lua- Administrador-Moderador
- Cantidad de envíos : 76735
Fecha de inscripción : 12/04/2009
Localización : Nova Friburgo / RJ / Brasil
- Mensaje n°670
Re: CLARICE LISPECTOR I ( ESCRITORA BRASILEÑA)
Angustia puede ser no tener esperanza en la esperanza. O conformarse sin resignarse. O no confesarse ni consigo mismo. O no ser lo que realmente se es, y nunca se es. Angustia puede ser el desamparo de estar vivo. Puede ser también no tener coraje de tener angustia —y la fuga es otra angustia. Pero la angustia forma parte: lo que está vivo, por ser vivo, se contrae.
Descubrimientos
Descubrimientos
_________________
"Ser como un verso volando
o un ciego soñando
y en ese vuelo y en ese sueño
compartir contigo sol y luna,
siendo guardián en tu cielo
y tren de tus ilusiones."
(Hánjel)
o un ciego soñando
y en ese vuelo y en ese sueño
compartir contigo sol y luna,
siendo guardián en tu cielo
y tren de tus ilusiones."
(Hánjel)
[Tienes que estar registrado y conectado para ver esa imagen]
Maria Lua- Administrador-Moderador
- Cantidad de envíos : 76735
Fecha de inscripción : 12/04/2009
Localización : Nova Friburgo / RJ / Brasil
- Mensaje n°671
Re: CLARICE LISPECTOR I ( ESCRITORA BRASILEÑA)
Es curioso cómo no sé decir quién soy. Es decir, lo sé muy bien, pero no lo puedo decir. Sobre todo tengo miedo de decirlo, porque en el momentoen que intento hablar, no solo no expreso lo que siento, sino que lo que siento se transfoma lentamene en lo que digo. O al menos lo que me hace actuar no es lo que siento, sino lo que digo.
Cerca del corazón salvaje.
Cerca del corazón salvaje.
_________________
"Ser como un verso volando
o un ciego soñando
y en ese vuelo y en ese sueño
compartir contigo sol y luna,
siendo guardián en tu cielo
y tren de tus ilusiones."
(Hánjel)
o un ciego soñando
y en ese vuelo y en ese sueño
compartir contigo sol y luna,
siendo guardián en tu cielo
y tren de tus ilusiones."
(Hánjel)
[Tienes que estar registrado y conectado para ver esa imagen]
Maria Lua- Administrador-Moderador
- Cantidad de envíos : 76735
Fecha de inscripción : 12/04/2009
Localización : Nova Friburgo / RJ / Brasil
- Mensaje n°672
Re: CLARICE LISPECTOR I ( ESCRITORA BRASILEÑA)
Lo que la joven veía en su sueño le entreabría los sentidos como se abre la casa al amanecer. El silencio era funeral, tranquilo, una alarma lenta imposible de ser arpresada. Éste era el sueño: estar alarmada y lenta. Y también mirar las cosas grandes que salían de lo alto de los edificios como cuando se veía diferente en el espejo de los otros: torcida en una expresión pasiva, monstruosa.
La ciudad sitiada.
La ciudad sitiada.
_________________
"Ser como un verso volando
o un ciego soñando
y en ese vuelo y en ese sueño
compartir contigo sol y luna,
siendo guardián en tu cielo
y tren de tus ilusiones."
(Hánjel)
o un ciego soñando
y en ese vuelo y en ese sueño
compartir contigo sol y luna,
siendo guardián en tu cielo
y tren de tus ilusiones."
(Hánjel)
[Tienes que estar registrado y conectado para ver esa imagen]
Maria Lua- Administrador-Moderador
- Cantidad de envíos : 76735
Fecha de inscripción : 12/04/2009
Localización : Nova Friburgo / RJ / Brasil
- Mensaje n°673
Re: CLARICE LISPECTOR I ( ESCRITORA BRASILEÑA)
El ritmo de las plantas es lento: crece con paciencia y amor. Entrar en el Jardín Botánico es como si fuéramos trasladados a un nuevo reino. Aquel amontonamiento de seres libres. El aire que se respira es verde. Y húmedo. Es la savia que nos embriaga levemente:
millares de plantas llenas de la savia vital. Al viento las voces traslúcidas de las hojas de las plantas nos envuelven en
una suavísima maraña de sonidos irreconocibles. Sentada allí en un banco, la gente no hace nada: sólo se queda sentada dejando al mundo ser.
Descubrimientos.
millares de plantas llenas de la savia vital. Al viento las voces traslúcidas de las hojas de las plantas nos envuelven en
una suavísima maraña de sonidos irreconocibles. Sentada allí en un banco, la gente no hace nada: sólo se queda sentada dejando al mundo ser.
Descubrimientos.
_________________
"Ser como un verso volando
o un ciego soñando
y en ese vuelo y en ese sueño
compartir contigo sol y luna,
siendo guardián en tu cielo
y tren de tus ilusiones."
(Hánjel)
o un ciego soñando
y en ese vuelo y en ese sueño
compartir contigo sol y luna,
siendo guardián en tu cielo
y tren de tus ilusiones."
(Hánjel)
[Tienes que estar registrado y conectado para ver esa imagen]
Maria Lua- Administrador-Moderador
- Cantidad de envíos : 76735
Fecha de inscripción : 12/04/2009
Localización : Nova Friburgo / RJ / Brasil
- Mensaje n°674
Re: CLARICE LISPECTOR I ( ESCRITORA BRASILEÑA)
—¿Cómo se siente durante el acto de
escribir? Y después de escrito el libro,
¿se preocupa por el destino que tuvo?
—Cuando escribo, lo bueno es que
no doy muestras de la gran excitación de
la que a veces soy presa. Y por más
difícil que sea el trabajo, siento una
felicidad dolorosa pues, con los nervios
todos aguzados, me quedo sin la
protección de lo cotidiano banal. Y
después de que el libro está listo,
abandonado al editor, puedo decir como
Julio Cortázar: tensa el arco al máximo
mientras escribes y después suéltalo de
un solo golpe y ve a beber vino con los
amigos. La flecha ya anda por el aire, y
se clavará o no se clavará en el blanco;
Descubrimientos
escribir? Y después de escrito el libro,
¿se preocupa por el destino que tuvo?
—Cuando escribo, lo bueno es que
no doy muestras de la gran excitación de
la que a veces soy presa. Y por más
difícil que sea el trabajo, siento una
felicidad dolorosa pues, con los nervios
todos aguzados, me quedo sin la
protección de lo cotidiano banal. Y
después de que el libro está listo,
abandonado al editor, puedo decir como
Julio Cortázar: tensa el arco al máximo
mientras escribes y después suéltalo de
un solo golpe y ve a beber vino con los
amigos. La flecha ya anda por el aire, y
se clavará o no se clavará en el blanco;
Descubrimientos
_________________
"Ser como un verso volando
o un ciego soñando
y en ese vuelo y en ese sueño
compartir contigo sol y luna,
siendo guardián en tu cielo
y tren de tus ilusiones."
(Hánjel)
o un ciego soñando
y en ese vuelo y en ese sueño
compartir contigo sol y luna,
siendo guardián en tu cielo
y tren de tus ilusiones."
(Hánjel)
[Tienes que estar registrado y conectado para ver esa imagen]
Maria Lua- Administrador-Moderador
- Cantidad de envíos : 76735
Fecha de inscripción : 12/04/2009
Localización : Nova Friburgo / RJ / Brasil
- Mensaje n°675
Re: CLARICE LISPECTOR I ( ESCRITORA BRASILEÑA)
Pero cuántas veces el insomnio es un don. De repente despertar en medio de la noche y tener esa cosa rara: soledad. Casi ningún ruido. Sólo el de las olas del mar golpeando en la playa. Y bebo café con gusto, toda sola en el mundo. Nadie me interrumpe la nada. Es una nada a un mismo tiempo vacía y rica. Y el teléfono mudo, sin ese toque súbito que sobresalta. Después va amaneciendo. Las nubes aclarándose bajo un sol a veces pálido como una luna, a veces de fuego puro. Voy a la terraza y tal vez soy la primera del día en ver la espuma blanca del mar. El mar es mío, el sol es mío, la tierra es mía. Y me siento feliz por nada, por todo. Hasta que, como el sol que sube, la casa se va despertando y está el reencuentro con mis hijos soñolientos.
Descubrimientos.
Descubrimientos.
_________________
"Ser como un verso volando
o un ciego soñando
y en ese vuelo y en ese sueño
compartir contigo sol y luna,
siendo guardián en tu cielo
y tren de tus ilusiones."
(Hánjel)
o un ciego soñando
y en ese vuelo y en ese sueño
compartir contigo sol y luna,
siendo guardián en tu cielo
y tren de tus ilusiones."
(Hánjel)
[Tienes que estar registrado y conectado para ver esa imagen]
Maria Lua- Administrador-Moderador
- Cantidad de envíos : 76735
Fecha de inscripción : 12/04/2009
Localización : Nova Friburgo / RJ / Brasil
- Mensaje n°676
Re: CLARICE LISPECTOR I ( ESCRITORA BRASILEÑA)
¿QUÉ NOMBRE DAR A LA
ESPERANZA?
Pero si a través de todo corre la esperanza, entonces la cosa se alcanza. Sin embargo la esperanza no es para mañana.
La esperanza es este instante. Es necesario dar otro nombre a cierto tipo de esperanza porque esta palabra significa sobre todo espera. Y la esperanza es ya. Debe haber una palabra
que signifique lo que quiero decir.
Descubrimientos.
ESPERANZA?
Pero si a través de todo corre la esperanza, entonces la cosa se alcanza. Sin embargo la esperanza no es para mañana.
La esperanza es este instante. Es necesario dar otro nombre a cierto tipo de esperanza porque esta palabra significa sobre todo espera. Y la esperanza es ya. Debe haber una palabra
que signifique lo que quiero decir.
Descubrimientos.
_________________
"Ser como un verso volando
o un ciego soñando
y en ese vuelo y en ese sueño
compartir contigo sol y luna,
siendo guardián en tu cielo
y tren de tus ilusiones."
(Hánjel)
o un ciego soñando
y en ese vuelo y en ese sueño
compartir contigo sol y luna,
siendo guardián en tu cielo
y tren de tus ilusiones."
(Hánjel)
[Tienes que estar registrado y conectado para ver esa imagen]
Maria Lua- Administrador-Moderador
- Cantidad de envíos : 76735
Fecha de inscripción : 12/04/2009
Localización : Nova Friburgo / RJ / Brasil
- Mensaje n°677
Re: CLARICE LISPECTOR I ( ESCRITORA BRASILEÑA)
El teléfono sonó, yo atendí, preguntaron por mí. Generalmente
pregunto quién es porque no siempre estoy dispuesta a que me molesten. Pero esta vez algo en la voz, dulce y tímida, me hizo decir que era yo misma quien había atendido. Entonces la voz dijo: soy una lectora suya y quiero que usted sea feliz. Le pregunté: ¿cuál es tu nombre? Respondió: una lectora. Dije: pero quiero saber tu nombre para poder decirlo al desearte que seas feliz. Pero fue inútil, ella no tenía siquiera ganas de
mostrarse ante mí como la persona que era. Era el anonimato completo. Pero para ti, de quien ni siquiera sé el nombre, quiero que tengas alegrías y que, si no estás casada, encuentres al hombre de tu vida. Pido también que no leas todo lo que escribo porque muchas veces soy áspera y no
quiero que recibas mi aspereza.
Revelación de un mundo.
pregunto quién es porque no siempre estoy dispuesta a que me molesten. Pero esta vez algo en la voz, dulce y tímida, me hizo decir que era yo misma quien había atendido. Entonces la voz dijo: soy una lectora suya y quiero que usted sea feliz. Le pregunté: ¿cuál es tu nombre? Respondió: una lectora. Dije: pero quiero saber tu nombre para poder decirlo al desearte que seas feliz. Pero fue inútil, ella no tenía siquiera ganas de
mostrarse ante mí como la persona que era. Era el anonimato completo. Pero para ti, de quien ni siquiera sé el nombre, quiero que tengas alegrías y que, si no estás casada, encuentres al hombre de tu vida. Pido también que no leas todo lo que escribo porque muchas veces soy áspera y no
quiero que recibas mi aspereza.
Revelación de un mundo.
_________________
"Ser como un verso volando
o un ciego soñando
y en ese vuelo y en ese sueño
compartir contigo sol y luna,
siendo guardián en tu cielo
y tren de tus ilusiones."
(Hánjel)
o un ciego soñando
y en ese vuelo y en ese sueño
compartir contigo sol y luna,
siendo guardián en tu cielo
y tren de tus ilusiones."
(Hánjel)
[Tienes que estar registrado y conectado para ver esa imagen]
Maria Lua- Administrador-Moderador
- Cantidad de envíos : 76735
Fecha de inscripción : 12/04/2009
Localización : Nova Friburgo / RJ / Brasil
- Mensaje n°678
Re: CLARICE LISPECTOR I ( ESCRITORA BRASILEÑA)
Milagros, no. Sino coincidencias. Vivía de coincidencias, vivía de líneas que incidían y se cruzaban y, en el cruce, formaban un leve e instantáneo punto, tan leve e instantáneo que era hecho de secreto. A poco que hablara de las coincidencia, ya estaría hablando de nada.
Aprendizaje o el libro de los placeres
Aprendizaje o el libro de los placeres
_________________
"Ser como un verso volando
o un ciego soñando
y en ese vuelo y en ese sueño
compartir contigo sol y luna,
siendo guardián en tu cielo
y tren de tus ilusiones."
(Hánjel)
o un ciego soñando
y en ese vuelo y en ese sueño
compartir contigo sol y luna,
siendo guardián en tu cielo
y tren de tus ilusiones."
(Hánjel)
[Tienes que estar registrado y conectado para ver esa imagen]
Maria Lua- Administrador-Moderador
- Cantidad de envíos : 76735
Fecha de inscripción : 12/04/2009
Localización : Nova Friburgo / RJ / Brasil
- Mensaje n°679
Re: CLARICE LISPECTOR I ( ESCRITORA BRASILEÑA)
Quero possuir os átomos do tempo. E quero capturar o presente que pela sua própria natureza me é interdito: o presente me foge, a atualidade me escapa, a atualidade sou eu sempre no já. Só no ato do amor - pela límpida abstração de estrela do que se sente—capta-se a incógnita do instante que é duramente cristalina e vibrante no ar e a vida é esse instante incontável, maior que o acontecimento em si: no amor o instante de impessoal jóia refulge no ar, glória estranha de corpo, matéria sensibilizada pelo arrepio dos instantes - e o que se sente é ao mesmo tempo que imaterial tão objetivo que acontece como fora do corpo, faiscante no alto, alegria, alegria é matéria de tempo e é por excelência o instante. E no instante está o é dele mesmo. Quero captar o meu é. E canto aleluia para o ar assim como faz o pássaro. E meu canto é de ninguém. Mas não há paixão sofrida em dor e amor a que não se siga uma aleluia.
Quiero poseer los átomos del tiempo. Y quiero capturar el presente que, por su propia naturaleza, me está prohibido; el presente se me escapa, la actualidad huye, la actualidad soy yo siempre en presente. Sólo en el acto del amor –por la nítida abstracción de estrella de lo que se siente– se capta la incógnita del instante, que es duramente cristalina y vibra en el aire, y la vida es ese instante incontable, más grande que el acontecimiento en sí; en el amor el instante de júbilo impersonal refulge en el aire, gloria extraña del cuerpo, materia sensibilizada por el escalofrío de los instantes, y lo que se siente es al mismo tiempo inmaterial y tan objetivo que sucede como fuera del cuerpo, brillando en lo alto; alegría, la alegría es la materia del tiempo y es por excelencia el instante. Y en el instante está el es de sí mismo. Quiero captar mi es. Y canto un aleluya al aire como lo hace el pájaro. Y mi canto no es de nadie. Pero no hay pasión sufrida en el dolor y en el amor a la que no le siga un aleluya.
Quiero poseer los átomos del tiempo. Y quiero capturar el presente que, por su propia naturaleza, me está prohibido; el presente se me escapa, la actualidad huye, la actualidad soy yo siempre en presente. Sólo en el acto del amor –por la nítida abstracción de estrella de lo que se siente– se capta la incógnita del instante, que es duramente cristalina y vibra en el aire, y la vida es ese instante incontable, más grande que el acontecimiento en sí; en el amor el instante de júbilo impersonal refulge en el aire, gloria extraña del cuerpo, materia sensibilizada por el escalofrío de los instantes, y lo que se siente es al mismo tiempo inmaterial y tan objetivo que sucede como fuera del cuerpo, brillando en lo alto; alegría, la alegría es la materia del tiempo y es por excelencia el instante. Y en el instante está el es de sí mismo. Quiero captar mi es. Y canto un aleluya al aire como lo hace el pájaro. Y mi canto no es de nadie. Pero no hay pasión sufrida en el dolor y en el amor a la que no le siga un aleluya.
_________________
"Ser como un verso volando
o un ciego soñando
y en ese vuelo y en ese sueño
compartir contigo sol y luna,
siendo guardián en tu cielo
y tren de tus ilusiones."
(Hánjel)
o un ciego soñando
y en ese vuelo y en ese sueño
compartir contigo sol y luna,
siendo guardián en tu cielo
y tren de tus ilusiones."
(Hánjel)
[Tienes que estar registrado y conectado para ver esa imagen]
Maria Lua- Administrador-Moderador
- Cantidad de envíos : 76735
Fecha de inscripción : 12/04/2009
Localización : Nova Friburgo / RJ / Brasil
- Mensaje n°680
Re: CLARICE LISPECTOR I ( ESCRITORA BRASILEÑA)
"Este libro se pidió una libertad mayor que tuve miedo de dar. Está muy por encima de mí. Humildemente intenté escribirlo. Yo soy más fuerte que yo"
"Era cruel lo que hacía consigo misma: aprovechar que estaba en carne viva para conocerse mejor, ya que la herida estaba abierta..."
"Como si una manada de gacelas transparentes se trasladacen en el aire del mundo al crepúsculo...
Se había vuelto más habilidosa: como si de a poco se estuviese
acostumbrando a la Tierra, a la Luna, al Sol, y extrañamente a Marte sobre todo. Estaba en una plataforma terrestre de donde por milésimas de segundos parecía ver la supra-realidad de lo que es verdaderamente real. Pero real...cuando ella a su manera le contó a él, el casi no acontecimiento-más real que la realidad.
y ella era más lunar que solar (...)
Aprendizaje o el libro de los placeres
"Era cruel lo que hacía consigo misma: aprovechar que estaba en carne viva para conocerse mejor, ya que la herida estaba abierta..."
"Como si una manada de gacelas transparentes se trasladacen en el aire del mundo al crepúsculo...
Se había vuelto más habilidosa: como si de a poco se estuviese
acostumbrando a la Tierra, a la Luna, al Sol, y extrañamente a Marte sobre todo. Estaba en una plataforma terrestre de donde por milésimas de segundos parecía ver la supra-realidad de lo que es verdaderamente real. Pero real...cuando ella a su manera le contó a él, el casi no acontecimiento-más real que la realidad.
y ella era más lunar que solar (...)
Aprendizaje o el libro de los placeres
_________________
"Ser como un verso volando
o un ciego soñando
y en ese vuelo y en ese sueño
compartir contigo sol y luna,
siendo guardián en tu cielo
y tren de tus ilusiones."
(Hánjel)
o un ciego soñando
y en ese vuelo y en ese sueño
compartir contigo sol y luna,
siendo guardián en tu cielo
y tren de tus ilusiones."
(Hánjel)
[Tienes que estar registrado y conectado para ver esa imagen]
Maria Lua- Administrador-Moderador
- Cantidad de envíos : 76735
Fecha de inscripción : 12/04/2009
Localización : Nova Friburgo / RJ / Brasil
- Mensaje n°681
Re: CLARICE LISPECTOR I ( ESCRITORA BRASILEÑA)
Luminiscencia
"La necesidad más urgente de un ser humano era la de transformarse en un ser humano"
"Estaría en realidad luchando contra su propia voluntad intensa de acercarse a lo imposible de otro ser humano?
"A pesar de sentirse demasiado humilde de ahí paradojalmente venía su altivez de persona. Es que su altivez -que se reflejaba en el modo flexible y tranquilo de andar-su altivez surgía de la certeza oscura de que sus raíces eran sólidas, y que su humildad no era sólo humildad humana; es que cualquier raíz era sólida, y su humildad surgía de la certeza oscura de que todas las raíces eran humildes,terrosas y llenas de húmedo vigor en su modestia nudosa de raíz.
Claramente todo esto no era pensado: era vivido, con uno que otro fugaz haz de luz de reflector que iluminando el cielo por la noche por una fracción de segundo ilumina con su pensamiento la oscuridad.
(...)
Aprendizaje o el libro de los placeres
"La necesidad más urgente de un ser humano era la de transformarse en un ser humano"
"Estaría en realidad luchando contra su propia voluntad intensa de acercarse a lo imposible de otro ser humano?
"A pesar de sentirse demasiado humilde de ahí paradojalmente venía su altivez de persona. Es que su altivez -que se reflejaba en el modo flexible y tranquilo de andar-su altivez surgía de la certeza oscura de que sus raíces eran sólidas, y que su humildad no era sólo humildad humana; es que cualquier raíz era sólida, y su humildad surgía de la certeza oscura de que todas las raíces eran humildes,terrosas y llenas de húmedo vigor en su modestia nudosa de raíz.
Claramente todo esto no era pensado: era vivido, con uno que otro fugaz haz de luz de reflector que iluminando el cielo por la noche por una fracción de segundo ilumina con su pensamiento la oscuridad.
(...)
Aprendizaje o el libro de los placeres
_________________
"Ser como un verso volando
o un ciego soñando
y en ese vuelo y en ese sueño
compartir contigo sol y luna,
siendo guardián en tu cielo
y tren de tus ilusiones."
(Hánjel)
o un ciego soñando
y en ese vuelo y en ese sueño
compartir contigo sol y luna,
siendo guardián en tu cielo
y tren de tus ilusiones."
(Hánjel)
[Tienes que estar registrado y conectado para ver esa imagen]
Maria Lua- Administrador-Moderador
- Cantidad de envíos : 76735
Fecha de inscripción : 12/04/2009
Localización : Nova Friburgo / RJ / Brasil
- Mensaje n°682
Re: CLARICE LISPECTOR I ( ESCRITORA BRASILEÑA)
"Y estaba bien. "No entender" era tan vasto que sobrepasaba cualquier entender-entender era siempre limitado. Pero no entender no tenía fronteras y llevaba al infinito, a Dios. No era un no entender como el de un sencillo de espíritu. Lo bueno era tener inteligencia y no entender. Era una bendición extraña como la de tener locura sin que fuera nociva. Era un desinterés manso en relación con las cosas dichas del intelecto, una dulzura de estupidez.
Pero de vez en cuando surgía la agitación insoportable: quería entender lo suficiente para por lo menos tener más conciencia de eso que no entendía. Aunque en el fondo no quisiese comprender. Sabía que eso era imposible y todas las veces que había pensado que sí había comprendido era por haber comprendido mal. Comprender era siempre un error - prefería la holgura tan amplia y libre y libre de errores que era no entender. No estaba bien, pero por lo menos se sabía que se estaba en plena condición humana.
Sin embargo a veces adivinaba..."
Al día siguiente intentó pacientemente de nuevo el crepúsculo. estaba a la espera. Con los sentidos afilados por el mundo que la rodeaba como si entrase en las tierras desconocidas de Venus. No pasó nada."
Aprendizaje o el libro de los placeres
Pero de vez en cuando surgía la agitación insoportable: quería entender lo suficiente para por lo menos tener más conciencia de eso que no entendía. Aunque en el fondo no quisiese comprender. Sabía que eso era imposible y todas las veces que había pensado que sí había comprendido era por haber comprendido mal. Comprender era siempre un error - prefería la holgura tan amplia y libre y libre de errores que era no entender. No estaba bien, pero por lo menos se sabía que se estaba en plena condición humana.
Sin embargo a veces adivinaba..."
Al día siguiente intentó pacientemente de nuevo el crepúsculo. estaba a la espera. Con los sentidos afilados por el mundo que la rodeaba como si entrase en las tierras desconocidas de Venus. No pasó nada."
Aprendizaje o el libro de los placeres
_________________
"Ser como un verso volando
o un ciego soñando
y en ese vuelo y en ese sueño
compartir contigo sol y luna,
siendo guardián en tu cielo
y tren de tus ilusiones."
(Hánjel)
o un ciego soñando
y en ese vuelo y en ese sueño
compartir contigo sol y luna,
siendo guardián en tu cielo
y tren de tus ilusiones."
(Hánjel)
[Tienes que estar registrado y conectado para ver esa imagen]
Maria Lua- Administrador-Moderador
- Cantidad de envíos : 76735
Fecha de inscripción : 12/04/2009
Localización : Nova Friburgo / RJ / Brasil
- Mensaje n°683
Re: CLARICE LISPECTOR I ( ESCRITORA BRASILEÑA)
Un siglo de Clarice, la mujer que revolucionó la literatura en Brasil
11 diciembre, 2020| FEUP | Es noticia
Río de Janeiro, 10 dic (EFE).- Hermética, enigmática y tajante, Clarice Lispector, nacida un 10 de diciembre, hace exactamente 100 años, marcó un antes y un después en la literatura brasileña. En las letras, encontró su verdadera libertad y desdeñó los rótulos que la etiquetaron de exitosa y popular.
«Yo nací para escribir», aseguraba en sus textos y con voz enérgica, esta mujer de origen judío que se convirtió en una de las voces literarias más importantes del siglo XX en un país al que llegó con su familia, huyendo del antisemitismo de la Rusia soviética, cuando solo tenía dos años de edad.
Autora de novelas, cuentos, crónicas, poemas y libros infantiles, Lispector vivía y respiraba por las letras, un oficio del que nunca se vio como experta y por el que siempre se sintió amateur.
«Profesional es el que tiene la obligación consigo mismo de escribir. Yo no soy profesional para mantener mi libertad», dijo de forma tajante en 1977 para la TV Cultura de Brasil, en la única entrevista que dio para televisión, bajo la condición de que saliera al aire tras su muerte, lo que ocurrió ese mismo año, diez meses después.
No en vano se ganó la fama de hermética. Fumadora empedernida, de mirada adusta, parcas palabras y prolongados silencios, la escritora ponía una barrera difícil de traspasar, la misma que se podía sentir en algunas de sus obras y que solo quien quisiera conocerla podía llegar a descifrar.
Ella escribía «desde las entrañas», sobre las cosas simples -el mar, la timidez, un huevo, el barrio, el carnaval, los amigos- y lo hacía a la velocidad del pensamiento, inmersa en un universo de sensaciones bajo el mando de la inspiración.
La ausencia de su madre, que murió cuando era apenas una niña, y las carencias económicas que enfrentó durante su infancia marcaron buena parte de su narrativa, en especial las crónicas que escribió cuando trabajó como periodista en el Jornal do Brasil.
Y es que Lispector escribió sus primeros cuentos a los siete años. Desde entonces, nunca más paró.
«Cerca del corazón salvaje» (1943), su primera novela, publicada cuando tenía solo 23 años de edad, revolucionó por su estilo introspectivo y se llevó los aplausos de la crítica que comparó su narrativa con la de Virgina Woolf y James Joyce, autores que Lispector no había leído hasta entonces.
Muchos de sus textos -en especial sus primeras novelas- son considerados «rebuscados e inaccesibles», como explicaría en una entrevista a EFE la profesora Teresa Montero, una de sus biógrafas, algo que la misma Lispector ratificaría: «Tocan o no tocan».
Tal vez la autora se acerca de forma más directa al público con sus cuentos y crónicas, que reflejan en frases contundentes su angustia existencial, sus intensas ganas de vivir y lo más profundo de su condición humana a través de la cotidianeidad.
Así se puede ver en «Miedo a la eternidad», una de sus crónicas, publicada en el Jornal do Brasil en 1970 y que comienza así:
«Jamás olvidaré mí angustioso y dramático contacto con la eternidad. Cuando era muy pequeña todavía no había probado los chicles y en Recife casi no se hablaba de ellos. Yo ignoraba qué clase de caramelos o bombones eran. Ni el dinero que tenía alcanzaba para comprarlos: con la misma plata podía conseguir no sé cuántos caramelos».
Quienes conocen a profundidad su obra encuentran en «La hora de la estrella» (1977), su última novela publicada en vida -y también la más famosa-, el momento más filosófico de Lispector.
En la obra, la escritora «abandona esa especie de espiral mental, emocional y sensible», como explicó esta semana en una entrevista a EFE su amiga y también escritora Nélida Piñon, para «aterrizar en la tierra y verse como una brasileña humilde».
UNA VIDA DE PELÍCULA
Esta mujer tuvo una vida intensa. Desde su natal Chechelnyk, en Ucrania, desembarcó casi de brazos en la nordestina Maceió y de ahí pasó a Recife donde vivió buena parte de su infancia y su juventud, para años después trasladarse a Río de Janeiro donde hizo sus estudios universitarios y trabajó como periodista.
Estudió derecho y también fue profesora y traductora antes de desempeñarse en varios diarios de Brasil.
En 1943, en el año en que publicó su primera novela, se casó con un diplomático, matrimonio del que nacieron dos hijos y que hizo que buena parte de su vida transcurriera entre Europa y Estados Unidos hasta divorciarse y volver a la que consideraba su tierra.
Escritora desde siempre, pero por sobre todo madre, Lispector amó profundamente a sus hijos y expandió su público escribiendo libros infantiles, género que le servía como «vía de escape», como ella misma afirmaba.
Lispector, como mujer y escritora, revolucionó la literatura en Brasil, pero nunca se consideró feminista. Aunque fue aplaudida y exitosa en el país que la adoptó, no conoció en vida la inmensa fama que le dieron sus textos y hoy sus contundentes frases son todo un fenómeno en las redes sociales.
A los 56 años, un cáncer de ovario le quitó la vida un 9 de diciembre de 1977, justo un día antes del que hubiese sido su 57 cumpleaños.
UNA CELEBRACIÓN DIEZMADA POR LA PANDEMIA
En un año en el que se esperaba que Brasil fuese a conmemorar por todo lo alto el centenario de nacimiento de Clarice Lispector, la pandemia del coronavirus llegó y, salvo algunos homenajes, muchas conferencias, exposiciones, documentales y obras de teatro tuvieron que cancelar o ser aplazadas hasta el 2021.
Este jueves fue abierto el site [Tienes que estar registrado y conectado para ver este vínculo] un portal bilingüe sobre la escritora que reúne miles de piezas, entre fotos, cartas, libros, cuentos, frases, textos críticos y entrevistas en diversos formatos, creado por el Instituto Moreira Salles (IMS), que tiene la custodia de buena parte del acervo de la autora.
Los manuscritos de «Cerca del corazón salvaje» y «Un soplo de vida», la última novela de la escritora, publicada un año después de su muerte el 9 de diciembre de 1977 pueden encontrarse en la página.
También cientos de fotografías que evidencian su seductora belleza, para muchos semejante a la de Sofía Loren, y una sección con todos sus libros, así como cuadernos poco conocidos o inéditos y decenas de cartas enviadas a lo largo de su vida.
Otra iniciativa surgió de la editora Rocco que, bajo el proyecto «Voces de Clarice», reeditó la colección de la escritora con detalles de las pinturas de Lispector en las carátulas de los libros, que se pueden encontrar impresos, en digital y en audio.
María Angélica Troncoso
Fuente: elDiario.es
[Tienes que estar registrado y conectado para ver este vínculo]
11 diciembre, 2020| FEUP | Es noticia
Río de Janeiro, 10 dic (EFE).- Hermética, enigmática y tajante, Clarice Lispector, nacida un 10 de diciembre, hace exactamente 100 años, marcó un antes y un después en la literatura brasileña. En las letras, encontró su verdadera libertad y desdeñó los rótulos que la etiquetaron de exitosa y popular.
«Yo nací para escribir», aseguraba en sus textos y con voz enérgica, esta mujer de origen judío que se convirtió en una de las voces literarias más importantes del siglo XX en un país al que llegó con su familia, huyendo del antisemitismo de la Rusia soviética, cuando solo tenía dos años de edad.
Autora de novelas, cuentos, crónicas, poemas y libros infantiles, Lispector vivía y respiraba por las letras, un oficio del que nunca se vio como experta y por el que siempre se sintió amateur.
«Profesional es el que tiene la obligación consigo mismo de escribir. Yo no soy profesional para mantener mi libertad», dijo de forma tajante en 1977 para la TV Cultura de Brasil, en la única entrevista que dio para televisión, bajo la condición de que saliera al aire tras su muerte, lo que ocurrió ese mismo año, diez meses después.
No en vano se ganó la fama de hermética. Fumadora empedernida, de mirada adusta, parcas palabras y prolongados silencios, la escritora ponía una barrera difícil de traspasar, la misma que se podía sentir en algunas de sus obras y que solo quien quisiera conocerla podía llegar a descifrar.
Ella escribía «desde las entrañas», sobre las cosas simples -el mar, la timidez, un huevo, el barrio, el carnaval, los amigos- y lo hacía a la velocidad del pensamiento, inmersa en un universo de sensaciones bajo el mando de la inspiración.
La ausencia de su madre, que murió cuando era apenas una niña, y las carencias económicas que enfrentó durante su infancia marcaron buena parte de su narrativa, en especial las crónicas que escribió cuando trabajó como periodista en el Jornal do Brasil.
Y es que Lispector escribió sus primeros cuentos a los siete años. Desde entonces, nunca más paró.
«Cerca del corazón salvaje» (1943), su primera novela, publicada cuando tenía solo 23 años de edad, revolucionó por su estilo introspectivo y se llevó los aplausos de la crítica que comparó su narrativa con la de Virgina Woolf y James Joyce, autores que Lispector no había leído hasta entonces.
Muchos de sus textos -en especial sus primeras novelas- son considerados «rebuscados e inaccesibles», como explicaría en una entrevista a EFE la profesora Teresa Montero, una de sus biógrafas, algo que la misma Lispector ratificaría: «Tocan o no tocan».
Tal vez la autora se acerca de forma más directa al público con sus cuentos y crónicas, que reflejan en frases contundentes su angustia existencial, sus intensas ganas de vivir y lo más profundo de su condición humana a través de la cotidianeidad.
Así se puede ver en «Miedo a la eternidad», una de sus crónicas, publicada en el Jornal do Brasil en 1970 y que comienza así:
«Jamás olvidaré mí angustioso y dramático contacto con la eternidad. Cuando era muy pequeña todavía no había probado los chicles y en Recife casi no se hablaba de ellos. Yo ignoraba qué clase de caramelos o bombones eran. Ni el dinero que tenía alcanzaba para comprarlos: con la misma plata podía conseguir no sé cuántos caramelos».
Quienes conocen a profundidad su obra encuentran en «La hora de la estrella» (1977), su última novela publicada en vida -y también la más famosa-, el momento más filosófico de Lispector.
En la obra, la escritora «abandona esa especie de espiral mental, emocional y sensible», como explicó esta semana en una entrevista a EFE su amiga y también escritora Nélida Piñon, para «aterrizar en la tierra y verse como una brasileña humilde».
UNA VIDA DE PELÍCULA
Esta mujer tuvo una vida intensa. Desde su natal Chechelnyk, en Ucrania, desembarcó casi de brazos en la nordestina Maceió y de ahí pasó a Recife donde vivió buena parte de su infancia y su juventud, para años después trasladarse a Río de Janeiro donde hizo sus estudios universitarios y trabajó como periodista.
Estudió derecho y también fue profesora y traductora antes de desempeñarse en varios diarios de Brasil.
En 1943, en el año en que publicó su primera novela, se casó con un diplomático, matrimonio del que nacieron dos hijos y que hizo que buena parte de su vida transcurriera entre Europa y Estados Unidos hasta divorciarse y volver a la que consideraba su tierra.
Escritora desde siempre, pero por sobre todo madre, Lispector amó profundamente a sus hijos y expandió su público escribiendo libros infantiles, género que le servía como «vía de escape», como ella misma afirmaba.
Lispector, como mujer y escritora, revolucionó la literatura en Brasil, pero nunca se consideró feminista. Aunque fue aplaudida y exitosa en el país que la adoptó, no conoció en vida la inmensa fama que le dieron sus textos y hoy sus contundentes frases son todo un fenómeno en las redes sociales.
A los 56 años, un cáncer de ovario le quitó la vida un 9 de diciembre de 1977, justo un día antes del que hubiese sido su 57 cumpleaños.
UNA CELEBRACIÓN DIEZMADA POR LA PANDEMIA
En un año en el que se esperaba que Brasil fuese a conmemorar por todo lo alto el centenario de nacimiento de Clarice Lispector, la pandemia del coronavirus llegó y, salvo algunos homenajes, muchas conferencias, exposiciones, documentales y obras de teatro tuvieron que cancelar o ser aplazadas hasta el 2021.
Este jueves fue abierto el site [Tienes que estar registrado y conectado para ver este vínculo] un portal bilingüe sobre la escritora que reúne miles de piezas, entre fotos, cartas, libros, cuentos, frases, textos críticos y entrevistas en diversos formatos, creado por el Instituto Moreira Salles (IMS), que tiene la custodia de buena parte del acervo de la autora.
Los manuscritos de «Cerca del corazón salvaje» y «Un soplo de vida», la última novela de la escritora, publicada un año después de su muerte el 9 de diciembre de 1977 pueden encontrarse en la página.
También cientos de fotografías que evidencian su seductora belleza, para muchos semejante a la de Sofía Loren, y una sección con todos sus libros, así como cuadernos poco conocidos o inéditos y decenas de cartas enviadas a lo largo de su vida.
Otra iniciativa surgió de la editora Rocco que, bajo el proyecto «Voces de Clarice», reeditó la colección de la escritora con detalles de las pinturas de Lispector en las carátulas de los libros, que se pueden encontrar impresos, en digital y en audio.
María Angélica Troncoso
Fuente: elDiario.es
[Tienes que estar registrado y conectado para ver este vínculo]
_________________
"Ser como un verso volando
o un ciego soñando
y en ese vuelo y en ese sueño
compartir contigo sol y luna,
siendo guardián en tu cielo
y tren de tus ilusiones."
(Hánjel)
o un ciego soñando
y en ese vuelo y en ese sueño
compartir contigo sol y luna,
siendo guardián en tu cielo
y tren de tus ilusiones."
(Hánjel)
[Tienes que estar registrado y conectado para ver esa imagen]
Maria Lua- Administrador-Moderador
- Cantidad de envíos : 76735
Fecha de inscripción : 12/04/2009
Localización : Nova Friburgo / RJ / Brasil
- Mensaje n°684
Re: CLARICE LISPECTOR I ( ESCRITORA BRASILEÑA)
En algún punto debe de haber un error:
es que al escribir, por más que me
exprese, tengo la sensación de nunca
haberme expresado en verdad. A tal
punto eso me desalienta que me parece,
ahora, haber pasado a concentrarme más
en querer expresarme que en la
expresión misma. Sé que es una manía
muy pasajera. Pero, de cualquier forma,
intentaré lo siguiente: una especie de
silencio. Aun cuando siga escribiendo,
usaré el silencio. Y, si existiera lo que
se llama expresión, que se exhale de lo
que soy. Ya no va a ser más: «Me
expreso, luego soy». Será: «Soy, luego
soy».
es que al escribir, por más que me
exprese, tengo la sensación de nunca
haberme expresado en verdad. A tal
punto eso me desalienta que me parece,
ahora, haber pasado a concentrarme más
en querer expresarme que en la
expresión misma. Sé que es una manía
muy pasajera. Pero, de cualquier forma,
intentaré lo siguiente: una especie de
silencio. Aun cuando siga escribiendo,
usaré el silencio. Y, si existiera lo que
se llama expresión, que se exhale de lo
que soy. Ya no va a ser más: «Me
expreso, luego soy». Será: «Soy, luego
soy».
_________________
"Ser como un verso volando
o un ciego soñando
y en ese vuelo y en ese sueño
compartir contigo sol y luna,
siendo guardián en tu cielo
y tren de tus ilusiones."
(Hánjel)
o un ciego soñando
y en ese vuelo y en ese sueño
compartir contigo sol y luna,
siendo guardián en tu cielo
y tren de tus ilusiones."
(Hánjel)
[Tienes que estar registrado y conectado para ver esa imagen]
Maria Lua- Administrador-Moderador
- Cantidad de envíos : 76735
Fecha de inscripción : 12/04/2009
Localización : Nova Friburgo / RJ / Brasil
- Mensaje n°685
Re: CLARICE LISPECTOR I ( ESCRITORA BRASILEÑA)
La vida no es cine, y es muy difícil «usar» la excentricidad. La excentricidad es un deseo desesperado de agradar. El instinto de las mujeres las avisa de «hasta dónde pueden llegar» en su deseo de agradar. ¿Has pensado alguna vez en el esfuerzo enorme que la excentricidad exige de una mu jer? Casi un esfuerzo físico para mantener algo antinatural. Después de algunas horas se ve en el rostro de la excéntrica su enorme cansancio, sus ganas de volver a casa...
SÓLO PARA MUJERES Consejos, recetas y secretos
SÓLO PARA MUJERES Consejos, recetas y secretos
_________________
"Ser como un verso volando
o un ciego soñando
y en ese vuelo y en ese sueño
compartir contigo sol y luna,
siendo guardián en tu cielo
y tren de tus ilusiones."
(Hánjel)
o un ciego soñando
y en ese vuelo y en ese sueño
compartir contigo sol y luna,
siendo guardián en tu cielo
y tren de tus ilusiones."
(Hánjel)
[Tienes que estar registrado y conectado para ver esa imagen]
Maria Lua- Administrador-Moderador
- Cantidad de envíos : 76735
Fecha de inscripción : 12/04/2009
Localización : Nova Friburgo / RJ / Brasil
- Mensaje n°686
Re: CLARICE LISPECTOR I ( ESCRITORA BRASILEÑA)
Hemos organizado asociaciones y clubs sonrientes donde se sirve con o sin soda. Hemos tratado de salvarnos, pero sin usar la palabra salvación para no avergonzarnos de ser inocentes. No hemos usado la palabra amor para no tener que reconocer su contextura de odio, de amor, de celos y de tantos otros opuestos. Hemos mantenido en secreto nuestra muerte para hacer posible nuestra vida.
...
Aprendizaje o el libro de los placeres
...
Aprendizaje o el libro de los placeres
_________________
"Ser como un verso volando
o un ciego soñando
y en ese vuelo y en ese sueño
compartir contigo sol y luna,
siendo guardián en tu cielo
y tren de tus ilusiones."
(Hánjel)
o un ciego soñando
y en ese vuelo y en ese sueño
compartir contigo sol y luna,
siendo guardián en tu cielo
y tren de tus ilusiones."
(Hánjel)
[Tienes que estar registrado y conectado para ver esa imagen]
Maria Lua- Administrador-Moderador
- Cantidad de envíos : 76735
Fecha de inscripción : 12/04/2009
Localización : Nova Friburgo / RJ / Brasil
- Mensaje n°687
Re: CLARICE LISPECTOR I ( ESCRITORA BRASILEÑA)
Mira a todos a tu alrededor y ve lo que hemos hecho de nosotros y de eso considerado como victoria nuestra de cada día. No hemos amado por encima de todas las cosas. No hemos aceptado lo que no se entiende porque no queremos pasar por tontos. Hemos amontonado cosas y seguridades por no tenernos el uno al otro. No tenemos ninguna alegría que no haya sido catalogada.
Aprendizaje o el libro de los placeres.
Aprendizaje o el libro de los placeres.
_________________
"Ser como un verso volando
o un ciego soñando
y en ese vuelo y en ese sueño
compartir contigo sol y luna,
siendo guardián en tu cielo
y tren de tus ilusiones."
(Hánjel)
o un ciego soñando
y en ese vuelo y en ese sueño
compartir contigo sol y luna,
siendo guardián en tu cielo
y tren de tus ilusiones."
(Hánjel)
[Tienes que estar registrado y conectado para ver esa imagen]
Maria Lua- Administrador-Moderador
- Cantidad de envíos : 76735
Fecha de inscripción : 12/04/2009
Localización : Nova Friburgo / RJ / Brasil
- Mensaje n°688
Re: CLARICE LISPECTOR I ( ESCRITORA BRASILEÑA)
“No he escrito ni una línea, lo cual perturba mi reposo. Vivo en espera de la inspiración con una avidez que no me da tregua. De hecho he llegado a la conclusión de que escribir es lo que más quiero en el mundo, incluso más que el amor”
Carta escrita en enero de 1942.
(Fuente: Tierra Adentro)
Carta escrita en enero de 1942.
(Fuente: Tierra Adentro)
_________________
"Ser como un verso volando
o un ciego soñando
y en ese vuelo y en ese sueño
compartir contigo sol y luna,
siendo guardián en tu cielo
y tren de tus ilusiones."
(Hánjel)
o un ciego soñando
y en ese vuelo y en ese sueño
compartir contigo sol y luna,
siendo guardián en tu cielo
y tren de tus ilusiones."
(Hánjel)
[Tienes que estar registrado y conectado para ver esa imagen]
Maria Lua- Administrador-Moderador
- Cantidad de envíos : 76735
Fecha de inscripción : 12/04/2009
Localización : Nova Friburgo / RJ / Brasil
- Mensaje n°689
Re: CLARICE LISPECTOR I ( ESCRITORA BRASILEÑA)
Estaba profundamente derrotado por el mundo en que vivía. Y se había separado de las personas por su derrota y por sentir que los otros también eran derrotados. Él no quería formar parte de un mundo donde, por ejemplo, el rico devoraba al pobre. Como el suyo sólo le parecía un movimiento romántico, si se agregaba a los que luchaban contra el aplastamiento de la vida tal como era, entonces se cerró en una individualización que, si no tenía cuidado, podía transformarse en soledad histérica o meramente contemplativa. Mientras no llegara algo mejor, buscaba relacionarse con los otros derrotados por intermedio de una especie de amor torcido, que alcanzaba tanto a los otros como, de algún modo, a sí mismo.
Descubrimientos
Descubrimientos
_________________
"Ser como un verso volando
o un ciego soñando
y en ese vuelo y en ese sueño
compartir contigo sol y luna,
siendo guardián en tu cielo
y tren de tus ilusiones."
(Hánjel)
o un ciego soñando
y en ese vuelo y en ese sueño
compartir contigo sol y luna,
siendo guardián en tu cielo
y tren de tus ilusiones."
(Hánjel)
[Tienes que estar registrado y conectado para ver esa imagen]
Maria Lua- Administrador-Moderador
- Cantidad de envíos : 76735
Fecha de inscripción : 12/04/2009
Localización : Nova Friburgo / RJ / Brasil
- Mensaje n°690
Re: CLARICE LISPECTOR I ( ESCRITORA BRASILEÑA)
Dies irae – Clarice Lispector
Amanheci em cólera. Não, não, o mundo não me agrada. A maioria das pessoas estão mortas e não sabem, ou estão vivas com charlatanismo. E o amor, em vez de dar, exige. E quem gosta de nós quer que sejamos alguma coisa de que eles precisam. Mentir dá remorso. E não mentir é um dom que o mundo não merece. E nem ao menos posso fazer o que uma menina semiparalítica fez em vingança: quebrar um jarro. Não sou semiparalítica. Embora alguma coisa em mim diga que somos semiparalíticos. E morre-se, sem ao menos uma explicação. E o pior – vive-se, sem ao menos uma explicação. E ter empregadas, chamemo-las de uma vez de criadas, é uma ofensa à humanidade.
E ter a obrigação de ser o que se chama de apresentável me irrita. Por que não posso andar em trapos, como homens que às vezes vejo na rua com barba até o peito e uma bíblia na mão, esses deuses que fizeram da loucura um meio de entender? E por que, só porque eu escrevi, pensam que tenho que continuar a escrever? Avisei a meus filhos que amanheci em cólera, e que eles não ligassem. Mas eu quero ligar. Quereria fazer alguma coisa definitiva que rebentasse com o tendão tenso que sustenta meu coração.
E os que desistem? Conheço uma mulher que desistiu. E vive razoavelmente bem: o sistema que arranjou para viver é ocupar-se. Nenhuma ocupação lhe agrada. Nada do que eu já fiz me agrada. E o que eu fiz com amor estraçalhou-se. Nem amar eu sabia, nem amar eu sabia. E criaram o Dia dos Analfabetos. Só li a manchete, recusei-me a ler o texto. Recuso-me a ler o texto do mundo, as manchetes já me deixam em cólera. E comemora-se muito. E guerreia-se o tempo todo. Todo um mundo de semiparalíticos. E espera-se
inutilmente o milagre. E quem não espera o milagre está ainda pior, ainda mais jarros precisaria quebrar. E as igrejas estão cheias dos que temem a cólera de Deus. E dos que pedem a graça, que seria o contrário da cólera.
Não, não tenho pena dos que morrem de fome. A ira é o que me toma. E acho certo roubar para comer. – Acabo de ser interrompida pelo telefonema de uma moça chamada Teresa que ficou muito contente de eu me lembrar dela. Lembro-me: era uma desconhecida, que um dia apareceu no hospital, durante os quase três meses onde passei para me salvar do incêndio. Ela se sentara, ficara um pouco calada, falara um pouco. Depois fora embora. E agora me telefonou para ser franca: que eu não escreva no jornal nada de crônicas ou coisa parecida. Que ela e muitos querem que eu seja eu própria, mesmo que remunerada para isso. Que muitos têm acesso a meus livros e que me querem como sou no jornal mesmo. Eu disse que sim, em parte porque também gostaria que fosse sim, em parte para mostrar a Teresa, que não me parece semiparalítica, que ainda se pode dizer sim.
Sim, meu Deus. Que se possa dizer sim. No entanto neste mesmo momento alguma coisa estranha aconteceu. Estou escrevendo de manhã e o tempo de repente escureceu de tal forma que foi preciso acender as luzes. E outro telefonema veio: de uma amiga perguntando-me espantada se aqui também tinha escurecido. Sim, aqui é noite escura às dez horas da manhã. É a ira de Deus. E se essa escuridão se transformar em chuva, que volte o dilúvio, mas sem a arca, nós que não soubemos fazer um mundo onde viver e não sabemos na nossa paralisia como viver. Porque se não voltar o dilúvio, voltarão Sodoma e Gomorra, que era a solução. Por que deixar entrar na arca um par de cada espécie? Pelo menos o par humano não tem dado senão filhos, mas não a outra vida, aquela que, não existindo, me fez amanhecer em cólera.
Teresa, quando você me visitou no hospital, viu-me toda enfaixada e imobilizada. Hoje você me veria mais imobilizada ainda. Hoje sou a paralítica e a muda. E se tento falar, sai um rugido de tristeza. Então não é cólera apenas? Não, é tristeza também.
— Clarice Lispector, no livro “A descoberta do mundo”. Rio de Janeiro: Rocco, 1999.
_________________
"Ser como un verso volando
o un ciego soñando
y en ese vuelo y en ese sueño
compartir contigo sol y luna,
siendo guardián en tu cielo
y tren de tus ilusiones."
(Hánjel)
o un ciego soñando
y en ese vuelo y en ese sueño
compartir contigo sol y luna,
siendo guardián en tu cielo
y tren de tus ilusiones."
(Hánjel)
[Tienes que estar registrado y conectado para ver esa imagen]
Hoy a las 12:50 por cecilia gargantini
» CLARICE LISPECTOR II ( ESCRITORA BRASILEÑA)
Hoy a las 09:51 por Maria Lua
» CECILIA MEIRELES ( POETA BRASILEÑA)
Hoy a las 09:47 por Maria Lua
» MARIO QUINTANA ( Brasil: 30/07/1906 -05/05/1994)
Hoy a las 09:45 por Maria Lua
» CARLOS DRUMMOND DE ANDRADE (Brasil, 31/10/ 1902 – 17/08/ 1987)
Hoy a las 09:43 por Maria Lua
» Luís Vaz de Camões (c.1524-1580)
Hoy a las 09:41 por Maria Lua
» Khalil Gibran (1883-1931)
Hoy a las 09:39 por Maria Lua
» JULIO VERNE (1828-1905)
Hoy a las 09:35 por Maria Lua
» DOSTOYEVSKI
Hoy a las 09:32 por Maria Lua
» VICTOR HUGO (1802-1885)
Hoy a las 09:23 por Maria Lua